El Torneo.

7.- La Fiesta

Las palabras de Draco se quedaron haciendo eco en la cabeza de Freya durante los días siguientes, cosa que la hizo estar bastante apartada de los demás, cosa que no pasó de ser percibida sobre todo por Aren, pero siempre que preguntaba, la respuesta era la misma: Solo quiero descifrar el huevo.

Aunque Aren trató de ayudar, la verdad es que estaba bastante difícil.

El tiempo corría y cada vez estaban más cerca de la segunda prueba, pero sobre todo del cumpleaños de Hermione.

-¿Ya tienes todo listo? -Susurró Hela

-Sí, cállate -La regañó Aren- Sus amigos se encargarán de llevarla a Hogsmeade y cuando regrese, la fiesta estará lista en el edificio de los campeones.

-Bien -Hela le hizo señas de que Hermione se estaba acercando- Que empiece el plan

Aren asintió y se puso de pie.

-Iré a ayudar a Freya con el huevo -Anunció en voz lo más alta y normal que pudo y se dio la vuelta para marcharse antes de que Hermione se sentara

Hermione lo miró confundida. Llevaba al menos dos días comportándose de manera extraña.

-¿Todo bien con Aren? -Preguntó y puso su desayuno en la mesa

-Sí -Respondió Hela- Freya le reprocha que no la ayuda, así que fue ayudarle.

-Es solo que ha estado muy... Distante

-Tranquila, es la presión por la segunda prueba -Hela sonrió

Hermione no dijo nada y mejor se concentró en su desayuno.

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El diecinueve de septiembre fue un día como cualquier otro.

Hermione se levantó temprano para ir al gran comedor a desayunar, ahí, Ginny, Harry y Luna la recibieron con abrazos y varios regalos, pero en el resto del día no hubo señal de Aren o sus hermanas, ni siquiera de Alec.

-Te lo dije -Comenzó Harry- Te dije que era extraño. Seguramente consiguieron lo que querían y ahora ni siquiera son para dar las gracias.

-Probablemente ya descubrieron de qué se trata la pista de la segunda prueba y te estén evitando para no decirte.

-Ya, basta -Cortó Hermione- Ellos no son así, probablemente tengan sus propios problemas. También son personas.

-¿Pero no crees que es raro? -Preguntó Hermione- ¿Acaso Aren no sabía que hoy es tu cumpleaños?

-No lo creo -Hermione se encogió de hombros y le dio un sorbo a su cerveza de mantequilla- No hablamos mucho cuando estamos juntos.

Ginny le lanzó una sonrisa, divertida.

-¿A no? -Sonrió- ¿Entonces qué hacen?

-¡Me refiero! -Hermione se había puesto tan roja como el cabello de su amiga- A que él solo me mira hacer las cosas. Cuando vamos a la biblioteca se limita a verme estudiar, hay veces en las que se queda dormido sobre el escritorio.

-Qué lindo -Dijo Luna

-Lo sé

-Bueno, da igual -Interrumpió Harry- Estamos aquí para festejar, así que -Alzó su tarro de cerveza y sonrió- Por Hermione.

-¡Por Hermione!

Usualmente a Hermione no le encantaba celebrar su cumpleaños, pero tenía que admitir que se lo estaba pasando realmente bien.