-De que hablas Ginny –pregunto la castaña, sin entender a que se refería su amiga, y masajeándose la sien, por el mareo.
-primero siéntate, antes de que te desmalles –le sugirió la pelirroja guiándola al sofá donde la deposito.
-estoy bien, solo fue un mareo –le informaba –seguro por no desayunar, pero te prometo ir ahora mismo al comedor, me provoco algo de tostadas con mermelada.
-Hermione, ¿te estas escuchando?
-¿Que tiene de malo querer almorzar tostadas?
-Hermione no son las tostadas. Ase poco te escuche decir “que te daba asco” lo que ahora quieres almorzar.
La castaña pareció recordar sus palabra –bueno…si, ¿pero eso que tiene? solo fue algo de momento –respondió restándole importancia.
-puede ser, pero es mejor estar seguras. Es que eso en ti no es normal.
-a ver Ginny, ¿me puedes explicar de que hablas?
-Hermione, ¿aun eres virgen?
La pregunta de su amiga, la sorprendió hasta llegar a sonrojarse y con sus ojos fuera de orbita respondió como pudo –hee…no, ¿pero porque lo preguntas?
La pelirroja embozo una sonrisa, para luego encarnar una mirada picara, que logro que la castaña se apenara aun mas –Hermione Jean Granger, perdón, Black –se corrigió –lo siento aun no me acostumbro. En fin, ¿Por qué? tu siendo mi mejor amiga y creo que yo también lo soy para ti, ¿no me habías dado semejante noticia?
-no lo se, es que…
-bueno eso es lo de meno, cuéntame detalle por detalle y de aquí no salimos hasta que me cuentes todos.
A la joven Black no le quedo de otra que contarle a su amiga, lo mágico que había sido su primera vez, sin dejar a un lado el tener que confesarle que mantenía una relación en secreto con su primo. La pelirroja se sentía muy feliz por su amiga aunque un poco indignada por tener que ocultarlo a Harry y Ron.
-¿y por que no simplemente dejan de fingir que se odian y ya? si están comprometidos.
-es por Harry y Ron, ellos no se llevan bien. Harry me advirtió que no debía estar cerca de el, que no era de confiar. Si llegara a saberlo, desconfiaría aun más.
-bueno si, Harry puede ser un poco testarudo y paranoico, cuando se trata de ti.
-a todas estas Ginny, ¿por que me preguntaste? si…ya…yo…bueno ya sabes.
-Hermione, ¿te cuidas? –La pelirroja al ver a su amiga que hacia gestos de no entender, le explico –ya sabes, para no salir embarazada.
-claro que si, Ginny –Hermione siempre escuchaba a Draco, en sus momentos de intimidad, un hechizo de anticoncepción que Hermione conocía muy bien, pues se había informado de el –totalmente. ¿Por que estas preguntas?
-es creí que podías, bueno…solo fue una idea tonta –la castaña arqueo ambas cejas, de forma interrogativa –esta bien, esta bien, pero no me mires así. Creí que podrías estar…embarazada –Ginny sonrió, como si hubiera hecho alguna travesura.
-¡Ginny! –Subió un poco el tono de voz –por supuesto que no.
-te creo. Es que con tus repentinos ascos a la comida, con lo que le escuche decir a Harry y ahora este mareo. Solo fue una duda y me ha quedado claro de que no lo estas.
-pues no, no lo estoy. Ginny no querría tener un hijo, no ahora quiero decir, un hijo requiere mucha responsabilidad y con todo lo que esta pasando y lo que podría pasar, seria un acto inconsciente.
ESTÁS LEYENDO
D&H juntos - la magia no es tan asombrosa.
FanfictionLa guerra había terminado, el señor oscuro ya no estaba y en el mundo Mágico las cosas parecían marchar bien. Pero la reciente aparición de un desconocido Mago, podría esta vez, destruirlo todo.