Los feos no ligamos con guapos STONY

6- Primer día

Tony se levantó esa mañana más temprano de lo normal, no podía dormir, y no tenía nada que ver con que hoy estrenaría trabajo, sino con un apuesto rubio que le había quitado el sueño al colarse en sus pensamientos y del que solo sabía su fiel consejero Jarvis, su oso de peluche.

El amanecer no se hizo esperar y Tony tampoco, después de su clásica conversación con el guapo security de la entrada se dispuso a subir a su planta y empezar su jornada de trabajo, el llegar la señorita Margaret lo esperaba para indicarle cuál sería su ‘’oficina’’

-Visto que no gozas de una apariencia a juego con la imagen de la empresa el escritorio del exterior lo tendrá Sharon que se encargará de la agenda personal de Steve, los asuntos financieros mientras tu puedes…servir cafés, contestar llamadas, etc… Esta será tu oficina –Peggy se detuvo dentro de la oficina presidencial, muy adentro de esta había un pequeño closet donde el pequeño Tony trabajaría- El espacio es reducido, pero puede cubrir tus necesidades laborales, y límpialo un poco

Peggy salió de allí dejando a Tony entre el polvo y las cajas vacías que ‘’decoraban’’ su oficina, era pequeña, claro que lo era, pero tampoco se podía quejar, almenos alguien había confiado en él para el puesto. Cuando comenzaba a idealizar a Steve escucho como un par de cuerpos unidos en un apasionado beso entraban torpemente al despacho presidencial, se trataba de su jefe que venía en compañía de una modelo muy hermosa.

-Steve, me vuelves loca –su voz era lujuriosa y lasciva mientras Steve seguía en su labor de adorar aquel cuerpo cuando la voz de su prometida hizo eco en la habitación-

-Mierda, es Peggy, tienes que esconderte –Steve entró al pequeño cuarto ahora oficina de Tony para esconder a la modelo, pero se quedó paralizado al ver a Tony que le veía impactado- Anthony…

-¿Y este quién es, Steve? –La voz de Peggy se hacía más nítida, estaba cerca-

-Usted trate de distraer a su prometida, yo me encargo de la modelo –Steve miró a Tony con duda, sin saber si debería confiar en él, acepto lo que le propuso el castaño dejando a la modelo a su cargo-

Steve salió apresurado a su encuentro con Margaret y entre besos logró distraer su atención del despacho presidencial, dándole el tiempo suficiente a Tony para sacar a la modelo de la oficina y acompañarla al taller del diseñador de Rogers Fashion ‘’Loki’’ por su nombre artístico. Al llegar un grito de alerta encendió sus sentidos.

-Escoria humana, regresa a la cloaca de la que saliste ¿Qué haces aquí? ¿Quién te dijo que podías invadir mi templo?

-Lo…lo siento señor

-Como te atreves a siquiera dirigirme la palabra, que horror, que se mueran los feos –Tony comenzó a llorar, las palabras del diseñador llegaban como dagas a su corazón, donde quiera que iba Tony era tratado con desprecio, como si su único defecto fuese existir- Largo de mi vista

-Sí señor –dicho eso salió corriendo de vuelta a su oficina, este será un día largo para él-