Ser valiente es comenzar de cero

Capítulo 5

Dio media vuelta con rapidez hacia la voz intrusa, encontrándose con ese viejo compañero que llevaba días sin ver. Bucky la miraba con una sonrisa burlesca al verla tan espantada de que se encontrara ahí, en su departamento. Wanda por su parte se sentía confundida, pues no entendía cómo había ingresado en el departamento.

-¿Qué demonios haces aquí?-preguntó Wanda con seriedad, mientras sus ojos se volvían rojos.

-Tranquila, estoy aquí en son de paz- espetó alzando las manos- paseaba por el vecindario y escuché que te habían llevado presa, así que me escabullí y entré al edificio-Bucky caminó hasta estar frente a la estufa.

El supersoldado se miraba tranquilo, como si no se tratara de un allanamiento al departamento de la castaña. Los ojos de Wanda se mantenían en el característico rojo de sus poderes, pero al verlo tan tranquilo, supuso que decía la verdad.

-¿Cómo supiste que este era mi departamento?-preguntó mientras se sentaba en uno de los bancos de la pequeña barra.

-Porque es el único departamento rodeado de esa cinta amarilla- espetó Bucky con voz burlesca- no se necesita ser muy listo para saber que aquí estuvo la policía- Wanda se sintió levemente avergonzada al escucharlo, pues tenía razón.

-Tiene sentido- murmuró- ¿y se puede saber qué haces de comer?-

-Sopa de verduras. Supuse que estarías cansada después de pasar medio día con los de la fuerza aérea-

-Jamás te dije que fueran los de la fuerza aérea- mencionó con el ceño fruncido. El antes soldado del invierno hizo una mueca.

-Tal vez vi un informe que estaba en tu escritorio...- respondió dando media vuelta, buscando platos para servir la comida.

-¿Hurgaste en mis cosas?-

-Lo siento, ¿sí? Solo quería saber en qué estabas metida- Bucky comenzó a servir la sopa, entregándole un plato a la castaña.

Wanda solo suspiró pesadamente, pero lo dejó pasar, pues sabía que por lo menos era alguien de confianza, o eso quería creer. Al probar el primer bocado de la comida, se sorprendió al descubrir que este estaba realmente bueno.

-No pensé que supieras cocinar- mencionó la castaña con tranquilidad.

-En mi tiempo de vez en cuando solía cocinar- mencionó con una ligera sonrisa- oh, también saqué a pasear a tu perro hace un par de horas, cuando llegué estaba pegado a la puerta llorando por salir-

-Gracias-murmuró la castaña.

Nunca se habría imaginado que encontraría a Bucky en medio de su cocina, preparándole algo de comer para cuando regresara de su pacífico interrogatorio con las fuerzas aéreas. Mientras disfrutaba de la comida, un pequeño chispazo se encendió en su mente. Al mirar sobre uno de los muebles de la cocina se encontró con algunos especieros sobre esta.

No pasaron ni siquiera dos segundos cuando dejó que su poder envolviera al mejor amigo de Steve y lo estampó contra la pared, mientras que este la miraba con molestia. El que se encontraban esos especieros ahí significaban problemas.

-¿Dónde los has metido?-preguntó con enojo.

-Tienes suerte de que haya sido yo quien los encontró y no las fuerza aérea- espetó Bucky, aun atrapado en la energía de Wanda.

-Trabajas para ellos-mencionó entre dientes la sokoviana.

-Claro que no. Al igual que a ti, me tienen bajo vigilancia constante-

-¿Entonces por qué los buscaste?-el que hubiera encontrado los sueros del supersoldado le daba muy mala espina.

-No los busqué, los encontré mientras cocinaba, lo juro- Wanda dejó de envolverlo con su energía, pero esta seguía activa por si intentaba huir- veo que la confianza no es lo tuyo- murmuró.