Capítulo 5

22 5 2
                                    

—En el sueño estábamos en este parque y esa biblioteca es identica a la de otro sueño

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

—En el sueño estábamos en este parque y esa biblioteca es identica a la de otro sueño.

Alizah corrió llegando primero para estar frente a ella y señalar el edificio que estaba detrás del parque.

—Son los únicos lugares que podría reconocer, el resto no se donde quedan y tampoco creo que encontremos alla a Chace.

—Esperemos encontrarlo a salvo— Selene revisó su bolso sacando una hoja de papel que estaba doblada y manteniéndola en su mano —sin duda si le muestro lo que hay en el libro quedará convencido.

—Me alegra haberte encontrado, sino tendría que mostrar mi diario y estaría muy avergonzada— Alizah ocultó su rostro detrás de unos mechones.

Ambas fueron a la biblioteca y tal como esperaban el lugar estaba mas que desierto, vieron a Chace salir de la misma con dos libros, su sonrisa cambió rápidamente a una mueca de disgusto al ver a Alizah.

—Genial— murmuró Chace entre dientes con algo de disgusto —la loca trajo refuerzos.

—¡Qué no estoy loca!— replicó Alizah, golpeando el suelo con su talón derecho.

—Chace, he venido a explicarte... Me llamo Selene— ella se paró frente a Alizah mostrándose más diplomática y calmada —Te juro que solo necesito 10 minutos... ¿está bien?

El chico rodó los ojos y quiso alejarse nuevamente, pero la mirada de Selene se lo impedía, podía presumir que en ocasiones era bueno para leer a las personas y la mirada de ella no parecía la de alguien que le estuviera mintiendo y su siguiente oración terminó por convencerlo, al menos por el momento.

—Se que puedes ver esas sombras.

[...]

Se sentaron frente a la biblioteca, en unas mesas que parecían hechas de concreto, Selene dejó aquel libro en la mesa y lo deslizó lentamente hacia donde estaba sentado Chace.

—Leelo, luego te explicaré.

Chace hizo una mueca y rodó los ojos, ya se estaba arrepintiendo nuevamente, vio el libro. Parecía uno muy antiguo pero eso no aseguraba que fuera real, puso su mano sobre la portada entonces varias imagenes llegaron a su mente como si fuera una visión.

[...

Se veía a si mismo peleando contra lo que parecia una serpiente gigante mezclada con un dragón de escamas rojas, llevaba una espada de color negra con un craneo en la empuñadura, en cada herida que dejaba en aquel monstruo dejaba llamas negras ardiendo en las heridas que lo lastimaban aun mas.

Tenía la ropa destrozada y en su brazo derecho notó un tatuaje parecido a un lobo con tres cabezas.

¡Pertenezco a la casa de Hades! No caeré tan fácil.

El Pacto de la Noche || Libro 1Donde viven las historias. Descúbrelo ahora