SAGA:
ALIZAH Y LOS GUARDIANES DEL CAOS
¿Qué harías si descubres que entre las sombras se libra una batalla por el destino de los humanos?
Un humano común no podría pelear contra amenazas sobrenaturales. Pero el mundo los tiene a ellos, personas que...
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Alizah había recibido la información de todo lo que dijo, se sentía extraña pues mientras decía esas palabras ella parecia verlo desde dentro, era algo muy complicado de explicar que preferia dejar de intentar explicarlo. Ella también había intercambiado información con lo que Dean le había dicho.
—Profe... cia...— pensó Alizah sin saber que decir. —¿Entonces Nyx si va a despertar? No hay nada que hacer.
—No...— Selene negó con la cabeza —Dean no escuchó todo, al final dijiste que quizá conseguiríamos la victoria, creo... fue confuso.
—Ne... necesito saber que dije.— Alizah descolgó su mochila.
Sacó de ella el diario con el que siempre cargaba, al abrirlo y rebuscar entre las hojas una vacia una hoja doblada cayó al suelo. Alizah la tomó y volvió a meter entre las hojas tomando un lapicero, rápidamente anotó las palabras que Chace estaba repitiendo.
—¿Como es posible que recuerdes todas esas lineas?— le dijo Isabela viendolo sorprendida.
—Ya dije que tengo una muy buena memoria.
—Entonces...— Alizah hizo una mueca pensando en lo que estaba escrito.
Su mente no era tan ágil al momento de analizar, no tenía la destreza de Dean que apostaba ya estaba camino a lo que decían esas lineas, tampoco había intentado darle un sentido a sus sueños antes y se arrepintió de no haberlo intentado.
—No, no, no, no— Selene cerró su diario evitando que la chica leyera mas. —No intentes analizar profecias, te empujarán a la locura, muchas veces ni significan lo que dicen.
El lugar se quedó en silencio por unos minutos, aunque todos habían escuchado la advertencia de Selene, habían ignorado olímpicamente eso, estaban pensando en las lineas de aquella profecía.
—Tenemos que volver al teatro— decretó Isabela muy segura —Estoy muy segura.
—¿Volver al teatro?— Chace hizo una mueca, había pensado en esa posibilidad pero esa extraña serpiente de tres cabezas debería seguir ahi.
—¿Por qué lo dices?— preguntó Alizah.
—Bueno... dice "en donde el oráculo buscó refugio"— repitió Isabela —nos contaste que Dean te persiguió hasta que te ocultaste alli. Y debemos volver ahora, lo más rápido.
—¿Rápido? Usaría un hechizo pero ya casi no tengo energia— les dijo Selene.
—A mi ni me miren, abrir esa grieta no fue sencillo.
—Tengo una solución...— Alizah se levantó y corrió hacia la cabaña y salió con unas pequeñas botellas de cristal que tenía un liquido dorado. — Cuando Dean hizo el hechizo en la puerta para protegernos se sentía cansado, tomó uno de estos, creo que es un energetizante o algo...
