Capitulo 24

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Alizah se dio media vuelta caminando de vuelta a su casa a paso lento, a pesar de gran mal presentimiento apresado en su corazón pero no quería interponerse en la misión de sus amigos

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Alizah se dio media vuelta caminando de vuelta a su casa a paso lento, a pesar de gran mal presentimiento apresado en su corazón pero no quería interponerse en la misión de sus amigos. En esos momentos solo le quedaba confiar en que saldrían bien de su campaña ya que tenían razón en que ella no era útil en ya que no sabía pelear.

—¡Alizah!

Escuchó la voz de su madre llamarla a metros de ella, al levantar la mirada vio como se acercaba a ella corriendo para abrazarla con mucha preocupación.

—Escuché que el teatro fue atacado, estaba asustada, vine corriendo porque no llegaste a casa y supuse que estábas aquí— se separó viendo a su hija y examinandola en busca de heridas —me alegra que estés bien.

—Mamá...— Alizah terminó de romper en llanto volviendo a abrazarla para comenzar a llorar.

Todas las emociones que había contenido hasta ese momento habían sido liberadas de golpe, primero el ataque de la hidra, la quimera, su excursión en el bosque, había sido secuestrada y ahora no podía ser de apoyo, simplemente todo era demasiado para Alizah que aun era una adolescente de solo 15 años.

—Ellos solo entraron... yo no... yo no...

—Tranquila...— Su madre acarició su cabello para calmarla —Ellos estarán bien.

—No, él... me robó una profecía, Nyx despertará— Alizah se separó limpiando las lágrimas de sus ojos pero seguía llorando por la preocupación —Ellos no podrán, ellos no...

—Alizah— Su madre sujetó su rostro mirandola a los ojos —El futuro no es absoluto. Quizá dijiste que algo pasaría, pero no sabes que hay mas allá.

—¿Qué?— Alizah quedó atónita sin entenderlo muy bien y dejando de llorar por aquella sorpresa.

—Los dioses quizá no escuchen pero nunca abandonan, eso decían siempre las personas que conocí— le dijo su madre sonriendo con calma —Tal vez Nyx despierte por la profecía que dijiste, pero seguro también te dijeron en sueños como frenarla, en algun momento tus sueños te guiaron igual.

—En sueños...— Alizah sacó su diario de su mochila sosteniéndolo en sus manos viendo fijamente la tapa, donde había registrado los mas de mil sueños que había tenido desde los 7 años.

—Dices que no tienes armas, pero fuiste elegida como el oráculo de Delfos— su madre puso su mano sobre el diario —Todos los sueños, todas tus visiones, son un arma, por eso te dije que ellos te necesitan mas a ti que...

—Que yo a ellos...— completo Alizah dejando de llorar —no debí dejarlos, debo ayudarlos.

Alizah se aferró al diario en su pecho, no recordaba todos los sueños que tuvo pero esperaba que en uno de ellos se encontrara la respuesta que necesitaba para frenar el despertar de Nyx o en cualquier caso, derrotarla.

El Pacto de la Noche || Libro 1Donde viven las historias. Descúbrelo ahora