SAGA:
ALIZAH Y LOS GUARDIANES DEL CAOS
¿Qué harías si descubres que entre las sombras se libra una batalla por el destino de los humanos?
Un humano común no podría pelear contra amenazas sobrenaturales. Pero el mundo los tiene a ellos, personas que...
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—¡Suéltame maldito! — Alizah intentaba librarse de la mágia del chico pero era inútil, la tenía atrapada.
Por ese camino en el bosque habían llegado hasta lo que parecía un campamento con varias cabañas en medio de un claro en el bosque.
—Está será una parada— le dijo Dean bajandola al suelo —Esta es otra Acrópolis, estamos en Fresno al norte de Los Angeles. De aqui vienen los tipos que quisieron matarte a ti y tus amigos.
—¿Cambiaste de opinión y ahora planeas entregarme?— le dijo Alizah mirandolo enojada.
—No, antes de despertar a Nyx debo deshacerme de ellos— le explicó Dean extendiendo sus brazos y estirándose —son el último bastión defensivo de California, ademas me tienen harto, los dos vamos a librarnos de molestias pestes.
—Ellos son muchos y tú...
—Solo observa Alizah, ya verás.
Dean comenzó a ser rodeado por su magia de color azul y comenzó a flotar en el aire, levanto su mano derecha y una esfera de fuego azul se formó en ella y la lanzó hacia la cabaña mas grande, esta explotó de forma imprevista dejando una gran llamarada que se elevó varios metros sobre el suelo.
Un hombre llegó volando rapidamente frente a Dean, Alizah lo reconoció como el que los estuvo persiguiendo en las últimas ocasiones.
—Dean Thomas— le dijo Adrien con el cuerpo rodeado de rayos.
—Adrien...— respondió Dean sonriendo y señalando a Alizah —Mira quien vino a visitarlos y con ella viene su fin.
—Esperamos este día desde hace mucho, no caeremos frente a ti— un gran rayo cayó sobre Adrien que luego redirigio hacia Dean.
Dean levantó un escudo de energia frente a él que lo cubrió del rayo y seguido a eso vio una lluvia de flechas venir desde una de las cabañas, rapidamente se acercó a Alizah y extendió el escudo para protegerla a ella también.
—Nos trajiste a nuestra muerte— le dijo Alizah aun paralizada pero viendolo con el ceño fruncido.
—No vendría si no tuviera la certeza de que voy a ganar.— le respondió Dean.
El chico extendió los brazos y un libro negro se materializó frente a él, con solo tenerlo cerca Alizah sintió un escalofrio y como algo siniestro emergía del libro, Dean dejó la barrera alrededor de Alizah y salió hacia el resto, leyó uno de los conjuros y varios cuervos de fuego negro se formaron a su alrededor que rapidamente volaron en encuentro de otras cabañas y personas.
El fuego negro no se extinguia de ninguna forma, Dean bajó al suelo sosteniendo una daga en cada mano y avanzo en medio del resto de guardianes del caos que se acercaban a él para combatir con sus espadas y lanzas, Dean se movia entre ellos sin problemas esquivando sus ataques, usando escudos de energia, sus dagas salian de un lado a otro apuñalando a muchos e incluso lanzaba ataques con su magia hiriendo al resto.
