Maltratos 《yoonmin》

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JiMin despertó luego de... ni siquiera sabía cuanto tiempo había pasado, solo sabía que ya había oscurecido y YoonGi no se había movido de la habitación, temiendo que algo le pasara si se alejaba de él.

Preocupado por su esposo, pero como dominante sería peor si llamaba a un hospital, los hospitales solo eran para aquellos que podían pagarlos, lo cual YoonGi dificilmente podía costear debido al cerrado sistema de salud y porque su trabajo no le permitía pagar ese tipo de beneficios que según él deberían ser para todos sin limitaciones o excepciones, sin contar que se delatarían en su forma de actuar tan preocupado por su sumiso.

- Mi amor...- YoonGi le ayuda a sentarse. Durante su estado inconciente, el mayor había retirado el maquillaje que cubría la bonita piel de su esposo, detestando que tuviera que hacer eso, para evitar problemas.

JiMin se siente un poco perdido y mareado. YoonGi parece notar su estado a la deriva, le acerca un vaso de agua y el menor con manos temblorosas apenas y puede sostener el vaso. Al notar esa reacción, YoonGi se sienta al lado de menor, para que lo use como apoyo y toma el vaso para acercarlo a los labios del menor, JiMin se recarga en su cuerpo, y YoonGi puede sentirlo temblar.

- Tranquilo...- YoonGi le sonríe y le abraza mientras el menor bebe pequeños sorbos del vaso. YoonGi solo trata de reconfortarlo, sobre todo cuando siente el cuerpo de JiMin temblar entre sus brazos.- Esta bien... amor...

JiMin llora en silencio, tuvo tanto miedo cuando escuchó a su padre hablar. No quería que alguien más lo tocara... ni siquiera su suegro había intentado sobrepasarse con él. Ni su esposo había recurrido a la fuerza para lastimarlo, YoonGi no había abusado de él, nunca le había levantado la mano ni la voz.
Por eso temía... estaba aterrado.

- Estas a salvo, conmigo...- susurra, queriendo protegerlo entre sus brazos. YoonGi sabe que tarde o temprano les harán un registro, y tendrán problemas si no piensa en algo rápido. Los registros eran para asegurarse que los sumisos estaban cumpliendo con sus funciones dentro de la sociedad, y si un sumiso llama la atención de alguna autoridad es deber del dominante, entregarlo para que hagan lo que deseen con él, necesita ideas para evitar que JiMin pase por esa humillación.

- YoonGi...- JiMin dice con en su voz, el menor sabe que tarde o temprano alguien puede darse cuenta de lo que pasa entre ellos. Y está aterrado...

¿Por qué YoonGi debe ser diferente? ¿Por qué le gusta que lo amen de esa forma? ¿Por qué ya no le parece correcto sufrir tanto por amor?

Y se le desgarra el alma cuando, entiende que ya no quiere golpes, que ya no desea ser maltratado por nadie, que no quiere vivir escondiendo su forma de amor, que ese amor, es sin duda lo más bonito que ha vivido junto a su esposo...

YoonGi lo abraza y trata de consolarlo.

- Me has dado un susto... tuve miedo de que algo te pasara... tardaste tanto en reaccionar.- le dice en medio de susurros, besando su sien, sosteniendolo entre sus brazos, lo suficientemente fuerte oara tranquilizarlo y al mismo tiempo, de manera suave para no lastimarlo.

JiMin se aferra a los brazos que lo rodean, temoroso de lo que puede pasar, ha visto tanto a sus cortos veintiun años, tantas violaciones en plena luz del día, tantas muertes... tantos golpes, tantas amenazas...

Llora con dolor porque sabe que el sistema no defiende, solo castiga y hace ver normal todo aquello que le da miedo.

No quiere que nadie más pase por ese desagradable proceso, muchos en esos momentos son abusados como si de un maldito espectaculo se tratase, son agredidos y ultrajados por aquellos que juran amarlos, creyendo que deben soportarlo, que así esta mejor...

JiMin observó como su madre fue violada por su padre, observó la muerte de esa chica, abusada y golpeada hasta morir, niños muriendo tras las agresiones sexuales de quienes son sus tutores, niñas desfiguradas luego de haber sido obligadas a entender que cualquier dominante podía usar sus cuerpos para desquitarse...

Sabe que YoonGi no siempre va a estar cuidandolo, que tarde o temprano no va a poder llegar a defenderlo con ese gesto serio y autoritario que lo caracteriza, escondiendo su protección con castigos y penitencias que le ha impuesto, cuando lo único que hace es cuidar que nadie le haga daño, que nadie jamas vuelva a tocarlo contra su voluntad, que tenga la oportunidad de escoger y decidir dentro de su relación...

- Aquí estoy... yo voy a cuidarte...- la voz de su esposo inunda sus sentidos y deja de pensar torturandose con todo lo que puede llegar a pasarles.

- ¿Qué pasa si nos descubren...?- pregunta temoroso y con voz bajita.

- Me aseguraré de que eso no suceda...- YoonGi dice mirando un punto dentro de la habitación, hasta fijar su vista en su pequeño y adorable esposo- Desearía que todo fuera más fácil... que no tuvieras que vivir de esta forma... que nadie sea degradado a tal punto que son vistos como objetos, que no valen nada...

JiMin sigue llorando...

¿Cuántos más deben morir bajo ese sistema donde siempre el agredido es el culpable?
¿Dónde la autoridad abusa en vez de proteger?

YoonGi lo esconde entre sus brazos, abrazandolo, queriendo transmitirle seguridad.

JiMin lo observa y coloca su mano en la mejilla de su esposo, queriendo que lo vea, el menor le besa en medio de sus lágrimas... sujetandose del hombro del mayor, deseando el contacto entre ellos...

YoonGi se inclinó levemente, hasta hacer caer el cuerpo de JiMin sobre la cama, sabiendo a lo que llevaban esos besos y caricias, sintiendo la emoción acumularse en todo sus sistema.

- Enseñame... enseñame a amar de verdad...- susurra cuando se separan del beso lento y pasional que se han dado.

YoonGi no pierde tiempo, sujeta su cintura con cariño, y acaricia con su pulgar. Deja besos por el cuello, y poco a poco la ropa les deja de vestir...
Sintiendose piel con piel...

Es la primera vez que hacen el amor con lágrimas en los ojos... necesitando llenar la sensación que hormiguea en sus manos, es la primera vez que tocan sus cuerpos con lentitud, queriendo que ese momento exista para siempre, solo ellos dos, amandose en esa forma...

Aun con la angustia latiendo fuerte...

Se miran a los ojos, y sonríe en medio de un beso perezoso, y el agarre entre su manos.

- Te amo...- YoonGi le susurra.

- YoonGi... te amo...- con cariño susurra y abraza al hombre que solo le ha dado amor...