Cap 26

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Estamos en el agua bajo la lluvia y de noche.

- Estamos locos. - río.

- Así somos. Los locos molongueros.

Me echo a reír.

El agua está congelada pero ahora mismo es lo que menos me importa.
Lo importante es que estoy con él.
Ahora suena All I want de Kodaline.

La letra es muy nosotros. Siento que es nuestra.

- me gustan las canciones que reproduce tu cutre i-phone.

- Es lo que hay. - dice sumergiéndose bajo el agua arrastrándome con él.

- Serás... - no me da tiempo a terminar porque me besa.

- Seré el mejor.

-Ja.Ja.Ja.

Salimos del agua como flanes y nos tumbamos sobre una roca a mirar las estrellas y la lluvia.

Apoyo mi cabeza sobre su hombro y me duermo.

- ¡El tren! - escucho a Aidan gritar.

Tengo un frío de narices. Me levanto. Estoy sobre la roca de anoche.

- ¡Demonios!

Aidan está recogiendo cosas y me está llamando para que vaya a casa.

Tengo que ir a vestirme y a... La estación.

- Hasta luego. - le digo a Aidan que está en su coche.
Va a casa a recoger sus cosas.

Cuando entro en casa Julie me mira con una sonrisa cómplice.
Sabe que he estado con él.

- Vístete. El tren sale en una hora.

Subo a toda prisa y hago lo que me ha dicho.
Agarro un paquetito que dejé ayer en mi cómoda y lo guardo en mi sudadera.
Es para Aidan. Es un mini dibujo de nosotros sentados de espaldas mirando el lago.
Se me llenan los ojos de lágrimas. Es hoy.

- ¡KATE! - Me gritan mi tío y Julie.

Bajo a toda prisa y nos subimos al coche.

Durante el trayecto, me dispongo a escribir mi libro. Ya casi lo tengo terminado.

Hemos llegado. Aidan y su padre están en un banco esperando a que llegue el tren.

Aidan lleva su guitarra y su equipaje. Su padre se va quedar aquí, pues él estará en una residencia de estudiantes.
Cuando nos ven se levantan.

Su padre, lo abraza y le dice cosas que no logro entender. Luego mi tío y mi prima.

- no sabes lo mucho que te voy a echar de menos. No te olvides de nosotros y vuelve por navidad. - dice mi prima abrazándole.

Es mi turno. Me acerco lentamente y como si ya lo supiera, lloro. Lloro muchísimo.
Me tranquilizó antes de que Aidan cambie de idea y lo abrazo fuertísimo.

- Te quiero Aidan. - digo besándolo.

Le meto el papel en el bolso sin que se dé cuenta y lo vuelvo a abrazar.

- No olvides que siempre serás mi gotita. - dice casi llorando.

- Y tú no olvides que serás mi músico favorito.

- Más te vale volver por Navidad. - le digo.

Me sonríe dulcemente y el tren llega.

Me sueno los mocos mientras se sube despidiéndose con la mano.

El tren se aleja y le voy perdiendo.
La última imagen que tengo de él, es lluvia, el tren y su silueta despidiéndose con la mano.

- Ya está. Se fue. - digo sollozando. Julie y mi tío me abrazan.

Volvemos a estar en casa. Han pasado tres días desde que se marchó, y no he vuelto a saber nada de él. Las clases empiezan la semana que viene y es lo que menos me apetece en el mundo ahora mismo.

He terminado mi libro. Lo he llamado Lo que moja la lluvia.
Estoy segura de que llegara muy lejos. Me gusta imaginar que algún día, alguien importante lo leerá, las editoriales lo impriman y salga a la venta. Si eso fuera a pasar, le mandaría un ejemplar a Aidan.

- ¡Julie, Kate, la comida! - nos llama mi tío desde abajo.

Bajamos a comer.

Me miro el collar de vez en cuando, y me acuerdo de él. No puedo evitarlo. Él es parte de mi vida, y siempre lo será. No me importa donde esté.

Me quito la sudadera para comer más cómoda y algo cae del interior del bolsillo. Es un papel doblado. Es la misma sudadera que llevé cuando...

Desdoblo el papelito. Es una nota.

Quería que supieras que nunca te voy olvidar. Ya te lo he dicho muchas veces, pero te lo quiero repetir.
Seguramente, ahora estés en tu habitación aburrida.
Quiero que sepas, que desde el día que te conocí, supe que eras especial, y que serías lo que yo necesitaba.
Has cambiado mi mundo gotita.
Cuida mi barco por mí, y recuerda,
Nadie tiene ningún derecho a hacerte dudar de quién eres.
Un beso.
Aidan.

Tengo los ojos llorosos.
Es lo más bonito que me han dicho.

Bajo a comer y recuerdo que no va a volver por Navidad. Eso dijo, pero sé que no.

Sólo quiero aclarar una cosa.
Los mejores momentos, son gracias a la persona que te acompaña.

Lo que moja la lluvia #1 [COMPLETA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora