Me pican los ojos. No sé cuanto tiempo llevo aquí sentada llorando, lo que sí sé, es que alguien se acerca a mis espaldas.
- Hola - es Aidan.
No respondo. No tengo fuerzas para responder.
- ¿Estás bien Kate? He oído sollozos. - dice.
- Sí, estoy bien. - digo secándome lágrimas de los ojos.
- ¿Seguro? Tienes los ojos bastante rojos Kate...
- Vale. He estado llorando ¿contento? - le digo un poco cortante.
No contesta, solo se sienta a mi lado mirando el lago.
- Kate, no sé lo que te pasa, ni necesito saberlo si no me lo quieres contar, pero sé, que te está matando por dentro, y tienes que dejarlo ir.
Tiene mucha razón.
- Y-yo. No puedo. - susurro.
Antes de que diga nada lo suelto todo. Todo lo que llevo deseando decir desde hace mucho tiempo.
- No estoy bien Aidan. Hago creer a la gente que sí, pero en realidad estoy muy mal. He perdido a mis padres. Murieron en un crucero. Y joder, desde ese día no he vuelto a ser la Katherine Jones que era antes. Estoy harta de fingir que esto no me afecta y que me estoy recuperando. Ojalá nada de esto hubiera pasado. - sollozo cada vez más fuerte.
Aidan no dice nada. En lugar de eso, se levanta y me abraza.
No sé cuanta falta me hacía. Me da igual que sea un chico al que conocí ayer. Sé que es buena persona y se lo agradezco. Le abrazo hasta que mi alma deja de doler un poquito menos.
- Lo siento Kate. No lo sabía. - dice una vez que nos apartamos.
- Gracias. - digo.
- ¿Sabes? No eres la única que está jodida. Mi vida es un puto infierno. - dice.
- Mi madre murió hace un par de años. Desde entonces, vivo con mi padre en el barco. No podemos regresar a nuestra antigua casa. No podemos. Todo lo que hay en ella nos recuerda a ella. Pasaron los años y aprendí a superarlo. Pero cada vez que un recuerdo inunda mi cabeza, siento que no lo he superado. - me cuenta.
- La vida es como caminar en la lluvia. Uno se esconde o se moja. Si te escondes, dejas de mojarte por un tiempo, pero al final te mojarás. Y si te mojas, más adelante te secarás y tus heridas dejarán de doler.
Me quedo callada escuchando. Parece que él también a sufrido, y no sé por qué, pero de alguna manera siento que su dolor encaja con el mío. Su frase hace que me plantee las cosas. Tiene mucha razón.
- Me alegro haberte conocido. - le digo pasado un rato.
- Igualmente Katherine. - dice.
- Aidan, ¿que te parece si nos mojamos juntos? - propongo. Si me mojo, más adelante volveré a estar seca como años antes.
No dice nada. En lugar de eso, me agarra de la mano y me arrastra corriendo por el bosque bajo la lluvia.
- ¡corre conmigo Katherine! - dice mientras corre.
Mientras corremos, pienso en todos los recuerdos que he estado evitando y dejo que me recorran la mente. Dejo que me mojen en lugar de esconderlos.
Nos pasamos bastante tiempo corriendo y saltando hasta que decidimos sentarnos en un tronco a descansar.
No puedo explicar lo que siento. Una sensación de alivio me inunda y al fin, siento una pequeña parte de mi yo antiguo. Estoy volviendo a ser yo. Me siento muchísimo mejor, y es gracias a Aidan.
- Gracias, de verdad. - digo
- No tienes que dármelas Kate. Sabía que lo necesitabas.
Le dedico una sonrisa, esta vez no es tan falsa como las que les doy a los demás. Ya puedo hacerlo de verdad.
Por fin tengo un amigo de verdad. Que me comprende y ayuda. Y estoy más que agradecida.
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Lo que moja la lluvia #1 [COMPLETA]
Romance[ENEMIES TO LOVERS] [NOVELA ROMÁNTICA] Tormenta y lluvia, agua y agua y agua. Así es el pueblo al que Katherine se ha ido a vivir. El pueblo, probablemente más lluvioso de Washington. Allí conoce a alguien que la hace cambiar. Katherine se ha prop...