One Shots ~• GTA Rolplay

Free ~°🌿

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Toni sabe que no puede seguir escondiéndose, protegiéndose, así que hace una última locura que espera que salga bien.

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"Seguro que este es mi piloto Jimmy"

"Si, ese es, buen viaje"

Toni volvió a ver al tío que se terminaba su porro y suspiró encomendado su vida a dios, no sabía como acabaría todo, pero ese era su último tiro, era todo o nada, lo buscaba todo el puto mundo, la muerte a ese punto era lo de menos.

Besó la cruz en su cuello y subió al avión partiendo junto al piloto a una de las ciudades que lo vio surgir y donde estaba altamente buscado, Marbella.

¿Que iba a hacer?

Visitar a Salinas.

Su historia era complicada, un tira y afloja de deseos y sentimientos que tuvieron que distanciarse por culpa de lo que todos ya sabíamos que sucedería, la caída en picada de la mafia, para Toni no fue fácil escuchar la despedida de Raúl desde el avión y para el abogado no fue fácil saber que estaría quince años alejado de ese italiano que le había revuelto su corazón.

Pero quizás las cosas cambiarían ese día.

--Solo espero que te cuides muchacho....--Acotó Salinas desde el otro lado de la sala de visitas de la cárcel terminando de hablar con él italiano.

--Raúl...¿Sabes que nosotros siempre tuvimos algo no? --Preguntó sostenido firmemente el teléfono que le permitía comunicarse con el contrario, llevaban fácilmente unos cuantos minutos hablando, pero eran suficientes para que Toni confirmara que era posible hacer la locura que estaba pensando.

Las cárceles de España nunca fueron las más resguardadas.

--Si...creo que todos lo sabían, eras una celosa y yo no dudaba en darte todos los abrazos mexicanos que quisieras... --Habló con una sonrisa.

--Te quiero...demasiado como para ser el último momento en que te vea, no puedo volver a Londres, no puedo volver a Marbella...pero si puedo seguir escapando y escapando hasta encontrar un lugar donde morir de viejo...y quiero que estes junto a mi -- Explicó sintiendo su corazón acelerado al ver la cara sorprendida de Raúl -- Esto es decisión tuya, no te obligaré a nada perro...hay una avioneta de cuatro personas solo saliendo por el portón...un solo guardia cuida esa entrada, nos da tiempo suficiente antes que llegue la policía.

--Toni, no...¿Que me estas pidiendo? -- Suspiró el abogado sabiendo que quedaban pocos segundos para dar una respuesta, los pasos del guardia de recepción se escuchaban.

--Te estoy pidiendo que te vengas conmigo, que seamos la pareja que no pudimos ser aquí, quiero vivir esta vida de mierda contigo...me tengo que ir, si no quieres, solo levanta la manos al lado de la puerta -- Finalizó levantándose de la silla y saliendo junto al guardia de turno dejando al pelinegro procesando la situación.

Salió igualmente hacía el patio y vio a Toni subirse a la avioneta, miró al guardia con sus armas contemplando el horizonte totalmente distraído, no era la primera vez que alguien intentaría escaparse, no sería la primera vez que se cometían locuras por amor.

Sin perder el tiempo empujó el portón siempre abierto pero custodiado de la prisión y corrió hasta la avioneta escuchando los gritos y disparos del guardia, se apoyó en el italiano subiendo de un salto y sintiendo las balas chocar contra el metal la avioneta que emprendió vuelo lejos de ese lugar dejando las patrullas policiales como hormigas en el suelo.

--Jaime quedará como un delincuente --Rio Toni sacándose el bigote falso para tomar la cara del abogado y darle los besos que le habían faltado todo ese tiempo -- Te extrañé abogado guarro.

--Y yo a ti muchacho ¿Nos vamos a alguna isla? -- Preguntó poniéndose los auriculares de vuelo para no quedarse sordo.

--Si, pero ya que cometí esta locura pasemos a buscar a los chicos, Carlo también te hecha de menos cariño -- Sonrió el italiano para después darle indicaciones al conductor en ingles.

Las locuras por amor eran dignas de película, quizás ahora los buscarían más aún, pero estarían juntos.

Y libres.