KIM SEOKJIN

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Dudaste sobre usar o no la sudadera rosa con pantalones negros para hoy pero aún así te lo pusiste por que era viernes casual en la oficina y fue divertido planaerlo junto a tu novio, esperaras que su amor por ti aumentara o al menos causarle ternura ya que esto último es su punto débil.

Suspiraste dejando caer el atuendo en la cama, esta experiencia no era para nada lo que habías planeado, la idea principal fue llegar de la mano de Jin con ropa de pareja pero ahora que estaban enojados no parece ser una idea funcional, la peor parte es que el rosa no era cosa tuya era de él de hecho el día que fueron de compras Jin hizo bromas al respecto.

-Estarán mas sorprendidos por verte usando rosa que por nuestra relación.

Seguido de su característica sonrisa.

Y tenia razón cuando Jin llego a tu vida el rosa ya no parecia el peor color, tambien cambio la forma en la que te veías a ti misma por primera vez te reconociste como un alma libre y una chica guapa, fue difícil sin duda sobre todo al principio pero ahora eras más feliz porque te enseño a dejar barreras inútiles de lado.

Pero de cualquier forma si este sacrificio no valía una buena disculpa de su parte entonces... entonces ¿que? Entonces nada, él es genial.

Te pusiste de pié y comenzaste a arreglarte con aquel atuendo, tal vez tendrías que ser tu quien sediera esta vez pero no importaba porque se trata de él.

Llegaste a la oficina y lo buscaste con la mirada cuando lo viste trataste de disimular pero Jin te atrapo sus ojos se clavaron directo en los tuyos por un segundo parecian ser solo tu y él en el lugar pero su mirada era oscura y su expresión sería, no una que cause miedo pero si te desconcertó querias saber que rayos es lo que pensaba.

Trataste disimular y es que verlo con el outfit de pareja a pesar de la discusión de ayer fue la cosa más dulce para ti.

Seguiste tu camino hasta tu oficina cerrando la puerta detrás de ti, sin embargo esta enseguida se abrió dejándote ver a Seokjin cerrando pero esta vez con seguro.

Pretendías resistirte así que seguiste caminando hasta tu silla pero sus brazos se enredaron en tu cintura y después de dejar un beso en tu mejilla soltó.

- ¿Sabes lo sexy que te vez en ese hoodie?

-No, sigo molesta asi que...

Te deshiciste de su agarre para continuar tu camino no te sentias tan molesta como decias pero querias darle una lección.

Porque aunque eran emocionante andar por la oficina sin que nadie supiera que aquel chico alto de ancha espalda y  rostro perfecto era todo tuyo, estabas ofendida porque se extendió al dejar que tu jefa le acariciara el hombro de esa forma frente a ti.

-Vamos cariño no sigas castigandome, me dejaste sin sexo todo el fin de semana.

-¿Eso es lo único que importa?

De nueva cuenta atrapo tu cuerpo con sus manos y lo pego al suyo.

-No, pero me hace falta.

Sus labios tocaron los tuyos en un beso suave haciendo pequeñas pausas para morder tu labio inferior mientras su manos encuentran poco a poco el camino hasta tus bragas regresando al borde de tu pantalón, su beso se intensificó ahora era más caliente y necesitado, sus manos apretaban tu tracero pegándote a él para que sintieras su erección.

Las ganas de ser tomada por él eran insoportables tenias que hacer algo o perderías la razón.

De pronto bajo tu ropa con un rápido movimiento y se puso de rodillas entonces comenzo a lamer tu humedad, te recargaste sobre el escritorio para disfrutarlo mejor, poco a poco metio sus dedos dejandolos ser protagonistas de movimientos intensos y ritmicos dentro y fuera de ti no podias hacer nada al respecto tú lo estabas disfrutando tanto que te dejaste caer en la silla bajando hasta tus tobillos la ropa que ahora se sentia tan innecesaria y  abriendo tus piernas para darle mejor acceso al placer que Jin te hacia experimentar, entonces metió un pequeño bulto frío en ti cosa que te corto la calentura ya que no entendias lo que pasaba, querias indagar pero ataco tus pechos y tu cuello enseguida notaron que alguien estaba por entrar a tu oficina rápidamente te vestiste mientras Jin acomodaba tu sosten y aquella sudadera que tanto le gusto en ti, cuando al fin entraron tu novio corrio al baño para borrar todo rastro de los momentos de pasión que recien compartieron.

Jin te hizo reir cuando al salir de tu oficina se atrevió a rociar algo de aromatizante casi sobre la odiosa secretaria que los interrumpio sin pisca de vergüenza pero la risa murió cuando sentiste aquel bulto dentro de ti que no lastimaba pero ¿que demonios hacia ahí? ¿que habia hecho Jin?

Una vibracion comenzó dentro de ti una que te estaba dando placer, entonces lo entendiste todo tomaste el teléfono para pedirle que parará pero el envio un texto antes que tú...

Jin ♡

"NO PUDE TENERTE TODO EL FIN DE SEMANA PRINCESA, AHORA VAMOS A HACER QUE TU ME NECESITES UN POCO"

Un color rojo se apodero de tu rostro y al mismo tiempo la intensidad de esa vibración aumentó haciendote apretar las piernas y moverte en tu lugar en busca de calma ya que esto estaba por hacerte gémir.

El carraspeo de la secretaria llamó tu atención le pediste que se marchara pero ella insistió en seguir las ordenes de su jefe y revisar de una buena vez las conciliaciones contigo.

Te apresuraste a revisar mal aquel montón de hojas entre gemidos ahogados le dijiste que las dejara en tu escritorio y saliste al baño ya no podias aguantar más.

Estabas disfrutando la forma en que Jin a la distancia controlaba aquel instrumento de placer, estabas muy concentrada en no emitir sonido alguno cuando lo viste entrar al baño sin decir nada ataco tus labios para enseguida recargarte en la pared bajar tus pantalones y abrirse paso hasta sacar de ti el vibrador en ese punto comenzaste a gémir pero el atrapo tu boca con la suya para que no te escucharan cuando pensaste que todo había terminado entro en ti poco a poco lo que te hizo imposible guardar silencio todo desapareció para ti lo único que importaba era entregarte a él.

Jin no tardo en aumentar la intensidad de sus estocadas y ambos terminaron rápidamente fue cuando comenzaste a pensar y entraste en pánico así que saliste de ahí lo más rápido posible y aunque ya era el chisme de la oficina los siguientes mese no quisiste presumir que Seokjin era tu novio.

 Bangtan  +18 Donde viven las historias. Descúbrelo ahora