Jennie Kim, una importante empresaria de Corea del Sur, casada con una joven de su misma clase social. Su vida parecía perfecta...pero para su desdicha, eso estaba muy lejos de la realidad.
Roseanne Park, una joven que después de la muerte de su pad...
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Lalisa's POV
Nadie sabe darme razón de Jennie, llamé a sus padres, a sus amistades aunque la verdad no son muchas y nadie la ha visto, ni saben donde está. Es como si se la hubiera tragado la tierra.
Tampoco se fue a la casa de la playa, ni a la cabaña en Aspen, y la muy desgraciada de Jisoo por supuesto que no va a decirme nada.
Ya hace dos días que no la ubico, la he estado llamando pero no me contesta. Incluso tengo a Jimin, su chofer, averiguándome su paradero, necesito encontrarla para poder hacer que entre en razón y desista del maldito divorcio.
Tal vez debí haber dejado a Somi esa noche en el hotel e ir detrás de Jennie cuando nos sorprendió en pleno acto. Pero la verdad la estaba pasando demasiado bien como para dejarlo todo tirado y preferir escuchar los reproches y lloriqueos de mi esposa. Aún así estoy segura de que cuando la encuentre podré arreglarlo, no hay nada que unas palabras bonitas y un buen sexo no puedan solucionar.
El amor puede hacer a una persona tan manipulable y si le agregas una buena complacida en la cama, problema resuelto.
Nada mejor que el sexo de reconciliación.
Pero mientras no la ubique, estoy en desventaja, y su amiguita puede usar sus contactos e influencias para conseguir esa resolución de divorcio antes de lo previsto.
Maldita seas Kim Jisoo...
Jisoo's POV
Quedé de verme con Sehun a las 8:00 en el restaurante, debo decir que la cena me tiene muy emocionada, me miro al espejo y Dios mío me encanta.
Decidí usar un vestido negro ceñido al cuerpo que me llega un poco más arriba de la rodilla con un discreto pero sexy escote que muestra la generosidad de la genética con mi pechonalidad. Llevo mi cabello suelto con unas delicadas ondas y un maquillaje ahumado que resalta mis ojos marrones y un labial rojo que complementa perfectamente mi maquillaje.
Me siento bella.
Llego hasta el restaurante español, donde me citó Park, la recepcionista del lugar me dirige hacia la mesa donde me esperan mis futuros clientes. Al llegar me llama la atención solo encontrar a Sehun esperándome sentado en la mesa, su mirada me recorre sin disimulo y bingo, se que logré el efecto deseado.
—Buenas noches, pensé que yo era la que venía retrasada.
—Buenas noches. —toma mi mano y deposita un suave beso sobre mis nudillos —Si lo dices por mi sobrina, ella no vendrá, estaba un poco indispuesta y me pidió que la disculpara.
—Ya, bueno creo que esta noche solo seremos tú y yo.
—Así es señorita.
La mesera nos entrega la carta y Sehun pide una botella de vino de las más costosa, no pues si hay pobreza que no se note, los hombres y su afán por impresionar.
