¬°.' DRAMA [ YoonKook ] '.°¬

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Sinceramente tenía miedo, había propuesto que todo fuera casual, pero no fue más que una gran mentira para mostrarme seguro. Volví a caer por el mismo chico, solo que esta vez existía una gran diferencia al despertar a su lado.

Que yo solo pude sentir miedo de ser abandonado de nuevo. Esa es la razón por la que esta vez tomé la delantera y en cuanto abrí los ojos, me marche de ese cuarto de hotel, testigo de un momento tan incoherente.

Sus labios seguían siendo los más apetecibles y la sensación de su cuerpo junto al mío, continuaba siendo mi favorita, “pero el volverá a déjarme" en verdad que no estoy bien.

En cuanto llegué a casa me permití liberar mis lágrimas, derrumbado en el sofá me terminé de romper. Irme del país hace cinco años no fue un cierre, fue una huida. ¿Qué pretende Namjoon? ¿Qué espero yo?

No esperaba contactarlo en los siguientes días, tampoco esperaba que él lo hiciera, supongo que lo de aquella noche quedó en claro. Tuve que ir a trabajar como siempre, enfrentarme a mis compañeros como si nada me aturdiera.

- Buenas noches. - Saludé a todos en el estudio, y cuando aquello empezó, di las noticias nocturnas, mi nuevo horario, mi verdadero inicio. - Buen trabajo vayamos a descansar.

Al salir bostece en grande, la noche anterior no logré pegar los ojos para dormir, el cansancio del día me estaba afectando, y todavía debia manejar a casa...

- La otra vez te esperé. - Un chico recargado en la salida del estudio me asustó al hablar, por un momento me pregunté si era yo el verdadero objetivo, hasta que observé bien su rostro.

- Oh, tú eres.

- Es bueno saber que al menos me recuerdas. - El chiquillo de la fiesta que lo invitó, estaba ahí mismo esperando por él. ¿Pará qué? - De acuerdo, al ver que me dejaste plantado yo definitivamente lo iba dejar pasar y seguir adelante, pero hyung hoy te vi y en verdad que no pude resistir buscarte porque me gustas.

Taehyung se quedó pasmado, el chico era bastante directo mientras mantenía aquella intensa mirada.

- Oye, yo. - Un bostezo no le dejó terminar de decir lo que quería, aquello provocó una pequeña risa en el castaño.

-Así que estas agotado, Hyung no puedes manejar así a casa. - Terminó extendiendo la mano haciendo clara su idea. - Dame las llaves, te llevaré.

- Hey, por qué siento que esto lo haces para aprovechar y obtener mi dirección. - Sostuvo fuerte sus propias llaves mirando dudoso a la persona frente suyo.

- Yo no sabía que tendrías sueño cuando vine a buscarte, es preocupación genuina, ya los datos extras están de más. - Se quedó unos segundos considerando sus opciones, conocía al chico, definitivamente trabajan en la misma empresa, lo segundo es que hubiera preferido llamar a su amigo, pero era más probable que este ya estuviera en casa, y a parte de eso, no tenía a nadie más. - No puedes ser un ciudadano irresponsable.

Y el chico tenía algo que lo hacía querer decir si, solo que, después del incidente con su ex novio, no estaba seguro de querer ser pretendido por alguien más, necesitaba dejar en claro sus sentimientos y no permitir que el chico se ilusione.

- Tu ganas. - Le extendí las llaves y el camino a casa empezó. Tal vez lo más asombroso del chico es que nunca dejaba silencios incómodos, tenía tantas cosas de las que hablar, muchos de esos temas le sacaron una risa que le hizo olvidar su cansancio del día. - ¿Qué tal si vamos a cenar?

Ahí estaba de nuevo esa iniciativa.

- Te estás aprovechando, bien, vamos de una vez. - En ese poco tiempo averiguó datos de su compañero, como que su nombre era Sanghwa, tenía 24 años y se encontraba haciendo su pasantia en la empresa.