➳Ángel ◂JongKey▸

6 (Editado)

VI - Jonghyun

«El amor más puro es el que da solo para ver feliz, sin recibir nada a cambio»

Kibum se sentó a desayunar mientras Jonghyun husmeaba por la casa, curioso de todo lo que había allí. ¿Los ángeles comían? Después de todo, había preparado algunas cosas de más luego de recuperar sus fuerzas.

—Jonghyun...

—¿Sí?

Dudó un poco, no quería quedar en vergüenza si no se alimentaba con comida humana. —¿Quieres desayunar conmigo?

El mayor parpadeó un par de veces antes de asentir. Se acercó y se sentó a su lado. —Gracias —susurró antes de servirse algo de leche y comenzar a comer.

Se formó un silencio incómodo cuando ambos no supieron que decir. Jonghyun dijo un par de cosas sobre el desayuno, como que extrañaba comer comida humana, la de los ángeles apenas y tenía sabor y Kibum mencionó que debería probar la torta de chocolate de su mamá.

Kibum tenía tanta curiosidad por muchísimas cosas sobre Jonghyun. ¿Cómo era el cielo? ¿Por qué terminó siendo ángel? ¿Él podía elegir su protegido o se lo daban al azar? ¿Cómo era cuando vivía? ¿Cómo...?

—No me pondré en explicaciones metafísicas y sobre otras dimensiones —rompió el silencio Jonghyun—. Piensa en el Cielo como una gran ciudad... Hay una parte donde están la gente que ya falleció y accede al paraíso, pero no es ángel ni nada de eso... Luego según el rango de ángel, te ponen en un sector u otro. Y repito, la comida es un asco... Es extraño, es como si fuera otra dimensión, no estamos en el cielo en el sentido... ¿humano? De la palabra.

El rubio rio. —¿Cómo sabías que-?

—Si piensas algo sobre mí, puedo saberlo —explicó el mayor comiendo una galleta—. Es decir, tú y yo estamos conectados irremediablemente. Lo que tú sientas o pienses...

—¿Todo el tiempo? —cuestionó con algo de vergüenza.

—No te espiaré... Tus pensamientos solo vienen a mí si son sobre mí. Pero puedes aprender a cerrar tu mente. No será difícil. Solo necesitas sentirte seguro.

—Es algo conveniente —sonrió Kibum—. ¿Y el estudio?

—¿Estudiar...? Estudiar la biblia, estudiar las religiones, las conductas humanas. No somos seres extraordinarios, solo que tenemos otra tarea... Y debemos saber cómo llevarla a cabo —aclaró el mayor, casi como si estuviera hablando de estudiar medicina—. No es como si eligiéramos ser ángeles, solo te dicen que lo serás...

—¿No te gusta?

—Me encanta... pero no creo que me lo merezca... —admitió bajando la vista—. En mi vida, solo hice un sacrificio, que fue salvar a mi amigo... Pero... ¿Y después? Ya te dije que era ateo, así que me pasaba negándolo. Mi vida sentimental era un asco. No hablaba con mi familia. Una locura.

—Algo debió haber —murmuró Kibum con desconfianza. Él no entendía mucho, pero no te vuelves Ángel solo porque sí, en la Iglesia no decían eso.—. Quizás no lo ves.

—O quizás no lo hubo. Quizás solo me quisieron dar una lección...

—Yo creo que debiste ser buena persona.

—Y yo creo que tú eres tan buena persona que crees que pude haber hecho algo bien —dijo Jonghyun acariciándole la mejilla.

Kibum se puso rojo tan rápido como sintió el tacto del otro contra su piel. Las caricias de Jonghyun lo paralizaban y a la vez le brindaban una calidez que jamás antes había experimentado. Seguía asustándole.