Capitulo 2.

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Lucía Sandoval
Mexico DF

Ya son las 11 AM hace un rato llegué de casa de mi tía; Regina e Isabela están abajo, a la espera de Altagracia, bueno, más Isabela, ella es la consentida de mamá, mientras que a mí me quedan las sobras, aunque ya estoy acostumbrada a eso, siempre duele como el primer día, y ni siquiera, entiendo el porqué de su rechazo, se supone que mis padres se aman, y yo soy fruto de ello, pero para Altagracia no es así, es como si hubiera algo que frenara su cariño hacía mi, muchas veces la escucho entrar a mi cuarto, siento como acaricia mi pelo, y muchas veces duerme conmigo hasta cierta hora, luego se levanta y se va, es como si no pudiera verme a los ojos, como si mis ojos tuvieran un puñal - una lágrima salía por mis ojos y me apresuré a limpiarla - ¿Que pasa contigo, Lucía? - me pregunté - eres fuerte y no mereces las sobras de su cariño.

- Mónica ya baja, tu papás acaban de llegar.

- Vale, ya bajo - grité.

Altagracia Sandoval.

Jose Luis y yo habíamos salido un poco más temprano de Italia, el quería que pasáramos una tarde en familia, siento que el nunca pierde la esperanza de que Lucía y yo nos recuperemos, incluso, me hizo prometer que desde hoy, iba a tratar de acercarme a Lucía, cosa que será bastante difícil para mí, porque si es cierto que la amo, y es la luz de mis ojos, no puedo demostrárselo o quizás ni siquiera quiero hacerlo, pero sus ojos brillosos cafés chocan con los míos cada que la veo y me transporta a aquella noche, uno de ellos tenía sus mismos ojos.

- Hola Regina, ¿Dónde está Isa y Lucía?

- Lucía está arriba en su cuarto, ya la llamé y Isa esta en la cocina- respondí sin más.

- Tía - veo a Isabela correr hacía mis brazos y yo correspondo, le doy un beso a en su mejilla y la pego a mi pecho - Hola, princesa de tía, ¿cómo estás?

- Bien tía, ¿y tú? Te extrañé mucho.

- Muy bien ahora que te veo, y yo también te extrañé mucho - Le doy otro beso y pocos segundos después levanto la vista y veo a Lucía bajando las escaleras.

- Papá, ¿cómo estás? - grita como niña pequeña cuándo ve un dulce y va corriendo hacía él.

- Muy bien, mi amor, ¿y tú? ¿Cómo está mi princesita hermosa? - José Luis la toma en sus brazos y la levanta.

- Ay papá - dice avergonzada - estoy bien, y ya no soy una bebé de dos años que para que me cargues y me digas así - bájame, pa' - dice entre rizas.

El le dice algo en los oídos antes de bajarla y veo como Lucia me mira con miedo, y mueve un dedo en señal de un no, mientras José Luis me tira una mirada de pocos amigos.

- Hola Lú, ¿cómo estás?

- Bien - Responde tajante.

- Tía, ¿me trajiste un regalo?

- Esta vez no, princesa, fue un viaje de negocios y no tuve tiempo de salir a comprar nada.

- Ash, no. - hizo puchero y veo cómo Lucia rueda los ojos - Esta vez habla Regina, y le dice Isabela que se despida porque ya se iban, Isabela hace berrinche pero de igual forma se despide de todos.

El pasado. Tú y yo. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora