-¿Acaso tú viste que paso en la casa de la familia Creel?- Pregunto el Doctor Brenner.
Claro que sabía que había pasado ese día, solamente que no iba a decir absolutamente nada.
Aunque me cueste la vida.
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Todo mi cuerpo estaba adolorido, me sentía muerta pero en vida. Lo primero que pensé al abrir los ojos fue ¿Qué había pasado? . Inspeccione el lugar donde estaba, la enfermería.
La puerta de la enfermería se abrió y vio a 001 entrar después de cerrarla. Fue directamente a mi dirección y se sentó en la camilla.
- Hasta que por fin despiertas, me diste un buen susto. Parecia que nunca ibas a despertar.- Soltó una sonrisa mientras me miraba a los ojos.
- Nunca vas a poder deshacerte de mi, tenlo por seguro.- Dije con la voz un poco cansada.
Quería respuestas con lo que pasó anteriormente, estaba por preguntarle pero 001 se adelantó.
- Será mejor que descanses un rato más, enseguida vendrá la enfermera para checarte.- Asentiste no muy convencida.
El se paró de la camilla y se dispuso a irse, esperaste uno rato en lo que llegaba la enfermera. La viste entrar por la puerta, lo primero que se dispuso a hacer fue checar mis latidos, ver mis ojos con una lamparita, y checar mi pulso.
- Al parecer está mucho mejor, solo le recomendaré unas pastillas para el dolor de cabeza.- Anotó unas cosas en las hojas que tenía y me voltio a ver.- Ya se puede retirar 000, su ropa está en esa silla.- Te señalo con la mirada una silla que estaba alado de la puerta.
Después de poder levantarme y vestirme, sali de la enfermería rumbo al comedor, la enfermera me había dicho que todavía no daban de comer, supe que tenía que dar de comer.
Todo estaba listo, los niños comían en silencio, estaba parada observando que se comieran todo y sin pelear, no querías otra pelea de comida como la última vez
A los que trabajaban allí siempre comían en otro comedor, ellos no eran niños chiquitos para que los esté supervisando. Estaba por decirles que se retiraran pero una voz hizo que me callara.
- Siempre voy a ser mejor que todos ustedes.- Era de un niño que andaba presumiendo sus victorias en los "juegos" de papá. No querías peleas, ya no.
- Silencio.- Fue lo primero que dije con la voz un poco seria.- Si ya terminaron de comer vayan a hacer su fila y retirarse. - Ninguno estaba dispuesto a seguir mis órdenes. ¿Acaso no les enseñaban modales a estos niños?
La voz de 001 me saco de mis pensamientos.
- ¿No la escucharon o hacen oídos sordos?.- Con rapidez todos se levantaron he hicieron dos filas, una de niños y otra de niñas.- No les hagas caso, no te conocen por eso desconfían de ti.
- No está bien, es entendible.
- Bueno niños como ya escucharon, vayan a sus habitaciones, papá en un rato les llamará.- Todos le hicieron caso y se fueron a sus respectivas habitaciones, antes de que 001 saliera completamente del comedor me dió una mirada y sonrisa sincera.
Solamente me quedé sola con el ruido te trastes siendo lavados.
━☆ﾟ.*･｡ﾟ
Para la cena solo les daría un vaso de leche y dos galletas. Eso les gusta a los niños ¿no?.
Estaban todos cenando cuando empezaron a pelearse al final de la mesa. Rápidamente fui alli.
- ¿Qué está pasando aquí? .- Eran un grupo de cuatro niños molestando a una niña menor a ellos, me detuve viéndola fijamente, tenía lágrimas bajando por sus ojos. - Si nadie me dice que está pasando le diré a papá.- Un niño que estaba alado de la niña abrió la boca rápidamente.
- Número 002, 004, 005, y 006 le quitaron su cena a 011.- En cuánto terminó de decir eso, el grupo de 4 lo miraron como si quisieran matarlo en vida.
- Con que era eso, muy bien número...- Me enseño rápido su muñeca.- Número 010 gracias por decirme la verdad te ganaste una galleta de premio.- Voltie hacia los culpables del alboroto.- En cuánto a ustedes, le diré a papá lo que pasó y el decidirá su castigo.- Le heche una mirada rápida a 011 que todavía estaba sin moverse de su lugar, y llorando.- No te preocupes 011 no te castigarán a ti, solo a ellos.- Con eso último di por terminada la conversación y me fui directo a mi antiguo lugar donde estaba observandolos lo más discreta que pude.
Mire el reloj de la pared y pasaban de las 8:10, tenían que regresar a dormir.
- Bien, ya pueden pararse y formarse en su fila sin correr.- Para mi suerte ahora sí me habían hecho caso. Ya cuando estaban todos en línea los mandé a los baños a lavarse los dientes y a dormir.
Ordene todo en cada lugar y opte por irme a dormir, muchos problemas en un día. Pero para mí mala suerte me encontré con 001 haciendo guardia por los pasillos. Quería pasar desapercibido sin llamar la atención pero al parecer estaba esperando a que pasara.
- Papá ya castigo a 002, 004, 005, y a 006 por sus actos.- Eso es un alivió.-¿ Porqué tu no los castigaste Miray?.
- No soy la persona indicada para andar castigando a cualquier hijo de papá, aparte yo todavía tengo sentimientos y esos niños me recuerdan mucho a alguien. Nunca podría hacerles algo.- Finalize con una sonrisa de boca cerrada.
Parecía que lo que dije lo dejo pensando, estaba esperando a que hablara pero parecia que ya no tenía nada que decir.
- Hablamos en otro momento, estoy agotada. Que descanses..- Ví su gafete que decía Peter Ballard.- Peter Ballard.- Termine de decir eso y puse una cara de burla.
- Que descanses niña bonita.- Ese apodo, después de mucho tiempo no me había dicho así.
Me di la vuelta para retirarme con una sonrisa que nadie me la quita.
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