The Maze Runner | Otro comienzo (Brenda&Thomas)

La chica que amaba.

CAPÍTULO 31

Volví a ver el cuerpo de Ben, Brenda tenía razón. No era él. Habían hecho algo con él.

-Brenda estas pálida ¿Te encuentras bien?- me acerque a ella lentamente. Sus dientes castañeaban sin control.

-Estoy asustada.

Ella me miro con expresión de preocupación.

-Acabo de matar a alguien.- susurro.- El era mi amigo.

La mire durante un rato. No podía identificar a esta Brenda, no sabía que recuerdos había recordado. No me importaba. La rodé con mis brazos, sentí su calor y podía notar su aroma.

-Gracias.- dijo ella mientras se separaba de mí.

-Hueles bien.- dije sin pensarlo. Quería distraerla.

Una sonrisa fugas apareció en su rostro, en el momento en que se escuchaba una puerta abrir. La protegí con mi brazo derecho y apunte con  mi cuchillo.

-¡Soy yo!- escuche la voz de Gally. El apareció y miro sorprendido el cadáver de Ben.

-Tienes que ir por Teresa.- le dije mientras tomaba el hacha que estaba tirada en el suelo.-Ella esta...

-¿Teresa?- pregunto Gally.- ¿Debes de estar bromeando? Esa maldita Garlopa esta con los de CRUEL.

-¡No! Yo la vi en el cuarto de Jason...

-¡Imposible! La he visto en...-Pero fue cortado a media oración.

Se escucho un estallido, y el cuerpo  de Gally se dio vuelta como si fuera golpeado. Cayó hacia atrás. Había un pequeño agujero en el lado izquierdo de su pecho. Brenda soltó un chillido.

-Demasiada información.- Escuche la voz de la Rata a nuestras espaldas.- ¿No es así Thomas?

Me voltee inmediatamente y vi a la Rata con una pistola normal, una real.  

-Das un paso más y le volare la cabeza a tu novia.-

-Déjala ir. Me tienes a mí, a ella no la necesitas.- trate de convencerlo.

-Ella le hizo esto a mi ojo.- señalo al hueco que tenía en la parte izquierdo de su cara.-Andando.

Nos llevo a la parte trasera del edificio, salimos por una puerta y entonces  sentimos una terrible corriente de aire frio.

Escuchamos una gran explosión a nuestras espaldas.  Vimos como la mitad del edificio se venía en partes, derrumbándose como fichas de dómino.

Vi una pequeña camioneta. Tome la mano de Brenda. La Rata estaba distraído viendo como todo se venía abajo.

-¡Detrás de la camioneta, detrás de la camioneta!- le señale a Brenda mientras corríamos agarrados de la mano. Subimos inmediatamente.

-¿Estás bien?- le pregunte, mientras veía por el retrovisor los movimientos de la Rata.

-Perfectamente.- replico ella.

Me había sentado en el asiento del conductor, gire la llave y la rotación del motor cobro vida.

-¡Deprisa!- Grito Brenda mientras tomaba el asiento de copiloto. Se escucho un martilleo metálico, la Rata nos estaba disparando.

Retrocedí hacia atrás y después tome el camino de la carretera que se encontraba ahí.

-¿Dónde está esa maldita Rata?- pregunte furioso mientras veía por el retrovisor.

-Vendrá. Puede estar...- empezó a decir Brenda, pero en medio de esto una furgoneta vieja apareció en la curva de la carretera.- ¿Ves?

Rápidamente se fue acercándose hacia nosotros. Las balas golpearon la camioneta.

-Maldita sea.- empecé a conducir en forma de zic-zac para que no nos diera en los neumáticos.

Blam, POP. El asiento en el hombro de Brenda exploto.

-¡Al suelo!- Grite.

-¡Encontré un arma!- grito Brenda mientras sacaba algo por debajo de su asiento.

La Rata venia a tan solo 20 metros, no lo íbamos a conseguir. Gire bruscamente y entre en la entrada de las instalaciones de CRUEL.

-¡Dame el arma!- Brenda me paso la pistola y entonces le indique que se bajara.

Abrí la puerta y baje y apunte hacia la furgoneta. Brenda corrió hacia donde estaban unos concretos que le servían de protección.

La furgoneta venia derecho hacia la camioneta. Hubo una explosión.

Eso no impido que la Rata saltara antes del choque. Cayo sobre el pavimento, vi como se levantaba, con su pistola en la mano derecha. ¡Todavía estaba vivo!

Apunte con mi arma, apreté el gatillo. Esta no disparo.

Demasiado tarde para cargar el arma. Era demasiado tarde. 

El sonido de un cañón sonó.

Vi el cuerpo de la Rata caer hacia atrás y estrellarse contra el suelo. Moví lentamente mi cabeza hacia la derecha. Minho estaba de pie, sosteniendo un revolver con ambas manos.

-¡¿Querías quitarme toda la diversión?!- dijo en forma sarcástica Minho.

-¡Maldita sea, ya me daba por muerto!- dije mientras él se acercaba a mí.

Vi a Brenda salir de entre los escombros. Ella nos miro. Entonces corrió hacia nuestra dirección. Sabía que abrazaría a Minho, a mi me reconocía como una amenaza.

Sentí el fuerte impacto del cuerpo de Brenda con el mío, sentí un poco de dolor en mi costado, pero no me importo.  Volver a sentir la calidez del cuerpo de Brenda contra el mío era fantástico. La abrace con todas mis fuerzas y suspire su aroma.

Era ella, era mi Brenda. La chica que amaba.