The Maze Runner | Otro comienzo (Brenda&Thomas)

Esto no ha terminado.

CAPÍTULO 34

Thomas POV

-Te amo.- susurre al aire.

Ella ya no estaba.

Lo único que se lograba ver era la luz de la puerta de las escaleras que estaba a unos 8 metros.

-¿Estás bien?-me pregunto Minho. Y aunque no pudiera verlo sabía que entendía mi dolor.

-Tenemos que continuar.- busque a tientas las escaleras. Escuche las fuertes pisadas de los pies de Jorge. Empezamos a subir corriendo las escaleras.

El polvo y la suciedad empezaban a jugar una de las suyas. Pues a cada paso que avanzábamos nos costaba mayor trabajo respirar.

En este momento una rabia circulaba en mis venas, estaba enojado con Brenda. ¡Quieres arriesgar tu maldita vida, y  hacerte la heroína! No puedes sacrificarte  para salvarnos. ¡No tienes derecho ha dejarme! ¡No tienes derecho a hacer esto! Sentí una lagrima rabiosa bajar por mi mejilla.

¡Prometiste no dejarme! Tú lo prometiste.

-¡Solo unos escalones más!- Escuche la voz de Jorge. Podía ver una luz a un par de metros.

Veo unos escombros que obstruyen la puerta. Jorge los cruza sin problemas y le ofrece la mano a Minho., lo ayuda a subir.

Jorge extiende su mano y yo dudo por un momento. Volteo a ver hacia atrás. Si tomo su mano, es como estar renunciando a Brenda.

-¿Thomas?- pregunto Jorge. No lo pensé más y tome su mano. La luz calaba mis ojos. Subí y nos encontrábamos en el techo de las instalaciones de CRUEL.  Escuchamos el rugido del Berg, este se dirige hacia nosotros.

-¡Tendremos que saltar!- escuche decir a Jorge.

Minho y Jorge corrieron. Yo aun llevaba a Sonya en mi espalda.  

Escucho una explosión. El suelo en el que estamos empieza a temblar.

¡Brenda!

Salimos corriendo a toda prisa, Sonya rebota en la espalda. Empiezo a notar que el suelo que voy dejando atrás empieza a caerse. Jorge y Minho están a varios metros, apenas frenan, la puerta del Berg se abre de golpe, y Harriet se asoma entre tanto polvo.

Harriet extiende su mano hacia Jorge y lo mete hacia adentro, hace lo mismo con Minho. Tomo a Sonya entre mis brazos y la lanzo. Minho la alcanza a tomar de uno de los brazos.

Pero yo no tengo tanta suerte, me quedo en la mera separación entre el edificio y el Berg en el aire.

Minho da media vuelta y me extiende su mano.

Agito mis brazos para que se vaya. ¡No hay tiempo!

Siento el suelo abrirse entre mis pies, empiezo a ir abajo, alejándome de Minho. Las puntas de nuestros dedos se tocan, así que, en medio de un segundo, logra sujetarme de la muñeca,

Lo veo tirar hacia atrás y me mete al Berg. Siento la aceleración de mi respiración que esta descontrolada.

Entonces ocurre todo, a una distancia de medio kilometro pudimos ver una gran explosión.

"Ahora ya se cual fue mi propósito"

Las palabras de Brenda seguían repitiéndose una y otra vez.

-¡BRENDA!- grite mientras veía por una de las ventanas del Berg- ¡NO BRENDA! ¡NOOOOOO!

Intente abrir la puerta del compartimiento. Tenía que ir por ella.

-¡No Thomas!- sentí los brazos de Jorge detenerme.- ¡Ella ya no está!

-¡PROMETÍ SALVARLA! ¡ELLA NO...! No puede estar muerta....

Vi varias llamas brillantes. Las instalaciones de CRUEL se habían desvanecido, casi no había rastro.

Y en ella también lo hacía Brenda.

Me acerque lentamente al ventanal, tratando de poder trasmitirle algún sentimiento y querer poder estar ahí contigo.

Y aun siento en el aire que me acaricia tu voz. Porque no hubo nadie a quien amara tanto, ahora entiendo cuanto significaba esto. Un fuerte dolor siento en mi pecho, uno que me desgarra.

Te fuiste de aquí sin pensarlo, no sé qué hare sin ti. No sé si pueda soportarlo, todo ha acabado.

¿Seguirá alguien vivo? ¿Te regresaste para destruir a Ava Paige? No sé porque te fuiste de mi lado, se que la vida me puso junto a ti o tal vez el destino lo sabía.

Quisiera poderte haberte dicho que eres la única persona que ha podido encender cada especio de mi ser.

Y nunca pude  predecir que te convertirías en lo más importante en mi vida. Ahora que miro el pasado es que entiendo que a tu lado siempre pertenecí.

Por esos días llenos de sueños, por tu sonrisa, sé que esos días ya nunca más  volverán.

Sé que duele tanto recordar y no quiero  pensar que esto no valió de nada. 

Y aunque no estés, quedaron las huellas de nuestro amor.

Yo se que la vida seguirá, y que lo nuestro será un rastro del pasado y solo te pido que por última vez finjamos que esto no ha terminado. 

-Mira eso...-

Fin.