Dos ojos azules como las aguas de safarios de las islas de Tarth donde había crecido, era lo único que sentía que era verdaderamente de ella al no contar con un nombre familiar que la respaldara o un origen del cual tuviera claridad de donde venia s...
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Estaba acostada mirando el techo de la habitación que habia escogido hace unas horas viendo que era la mas cercana a Jon, tratando de no sentirse extraña ante estar en un nuevo lugar muy diferente al que habia crecido, teniendo su propia chimenea y su propia gran cama, asi como ropa propia, se puso de pie y miro el espejo que estaba frente al armario de el lugar viendose a si misma viendo su cabello azabache callendo sobre su cuerpo que era cubierto por un camison blanco, casi pareciendo una Lady de alta cuna, no una bastarda campesina que dentro de ella siempre seria. Extrañaba tener una ventana que diera a el campo de fresas fuera de su casa y que si los vientos eran favorecedores llegaba hasta esta la brisa de el mar saldo ayudando a que sus fosas nasales se liberaran de todo el estrés acumulado que tenia durante el dia, pero dentro de ese lugar estaba encerrada dentro de 4 paredes, unas bellas 4 paredes, pero estaba sola, nunca habia tenido que dormir sola y las veces que lo habia hecho habian sido extremadamente incomodas. Camino hasta la silla tomando una capa con la que cubrir su cuerpo de el frio invierno fuera y abrio la puerta de el lugar dando unos paso hasta llegar a la puerta de Jon, dio unos ligeros golpes en esta, casi esperando que el chico no atendiera para decirse a si misma que dejara la niñerias y fuera una adulta y aprendiera a dormir sola, espero unos segundos y cuando estaba dispuesta a irse vio como la puerta de el lugar se abria viendo a Jon con el cabello alborotado y claramente somnoliento.
—Te desperté ¿No es asi?— pregunto la chica sintiendo culpabilidad dentro de ella —Sera mejor que...
—No, por algo viniste aqui— dijo el chico tratando de contener un bostezo en sus labios —¿Pasa algo?
—Se que te parecera muy infantil, pero nunca he tenido mi propia habitación— vio a Jon sonreir divertido al ver la expresión de la chica —Y nunca he dormido bien sola... asi que...
—Pasa— le dijo el chico haciendose a un lado para que Ray arrastrara los pies dentro de la habitación volviendo a sentir el calor de el fuego junto a ella —Entonces no puedes dormir.
—Llevo horas dando vueltas en la cama pero me siento... rara— quito la capa de su cuerpo dejandola sobre la silla junto a ella solo usando su camison blanco, se giro y vio como Jon se encontraba con la boca abierta al ver a la chica notando como gracias a la luz de la chimenea lograba ver a la perfeccion su figura sin todas las capas de ropa que solia usar, no dejando casi nada a la imaginacion, Ray se dio cuenta de la manera que la veia y camino hacia el alejandose de la luz del fuego sintiendo sus mejillas extremadamente enrojecidas —No te hagas ideas, mi moral no ha sido doblegada... todavia— vio la mirada de Jon sobre ella viendo como luchaba contra sus instintos de seguir observando el cuerpo delicado de la chica frente a el—Tal vez deberia...
—Tranquila solo me sorprendiste— le dijo rapidamente negando con la cabeza tratando de alejar cualquier idea que hubiera pasado por su mente en ese momento —Si quieres dormir aqui por mi esta bien...
—Gracias— dijo para darse la vuelta y caminar de manera apresurada hasta la cama subiendose de un salto entrando bajo las sabanas cubriendose hasta el cuello —¿Vienes?— vio a Jon sonreir por su accion tan inocente antes de caminar a la cama y acostarse junto a la chica dejando caer su cuerpo con fuerza mostrando su verdadero estado cansado —¿Puedo preguntarte algo?
