Dos ojos azules como las aguas de safarios de las islas de Tarth donde había crecido, era lo único que sentía que era verdaderamente de ella al no contar con un nombre familiar que la respaldara o un origen del cual tuviera claridad de donde venia s...
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Despues de su charla con Gilly las cosas le habian quedado mas claras, no sabia cuando el Night king llegaria, no sabia si serian meses o semana o dias, por lo que al menos debia decirle a la unica persona que tenia derecho alguno a saber su estado, la persona en parte responsable de este, estaba sentada frente a la chimenea de el lugar pasando sus dedos sobre el papel frente a ella dibujando lo que gracias a su imaginación y usando el rostro de el pequeño Sam lo que podria ser su hijo algun dia, esperando que tuviera los marrones ojos de Jon y su cabello lacio azabache, esperando lograr comprobar eso con sus propios ojos algun dia, escucho la puerta de la habitación abrirse haciendo que volteara para poder ver a Jon entrar a la habitación, le ofrecio una de sus calidas sonrisas pero no recibío ni una mirada por parte de Jon, solo paso de largo a la mesa junto a ellos para tomar una jarra de vino que habia quedado de la noche anterior y sin verterla sobre un vaso la tomo de un trago haciendo que Ray cerrara su cuaderno para mirarlo extrañada por su accion.
—¿Esta todo...?— sus palabras se detuvieron cuando Jon se dejo caer junto a ella para acomodar su cabeza en sus piernas, abrazandose de su torso y soltando un fuerte suspiro, buscando confort y afecto en la presencia de su esposa, Ray no supo que hacer mas que pasar su mano por su cabello con delicadeza sin saber que lo acongojaba
—Nunca me mentirías ¿verdad?— le pregunto el chico contra la tela de su vestido haciendo que Ray abriera sus azules ojos con sorpresa
—Ni aunque mi vida dependiera de ello— le contesto con seguridad para luego ver a Jon levantar la mirada buscando sus ojos siendo iluminados por el fuego frente a ellos
—Yo nunca podría mentirte o ocultarte algo— tomo las manos de la chica con fuerza —Tengo que contarte algo... sobre quien soy realmente
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—Entonces Daenerys no deberia ser reina— admitio Ray quien estaba acostada en la cama junto a Jon, con la vista perdida en el techo pensando en la información que el chico le habia dicho —No me sorprende...
—Esto es serio Ray— le dijo Jon que se encontraba en la pocision que la chica junto a el
—Se que lo es, y no son mis celos hacia ella hablando... solo estoy conmocionada— admitio cerrando los ojos con fuerza —¿Que vas a hacer?
—No quiero ser Rey, nunca he querido serlo— admitio para la mujer en la que mas confiaba en su vida —Daenerys deberia ser reina, ella lo quiere
—No puedes creer algo solo porque quieras hacerlo— le dijo Ray mientras se daba la vuelta en la cama apoyando su cabeza sobre su mano mirando al chico junto a ella —Tyrion le dijo eso a Daenerys una vez y yo se lo dije a el, si tu vez poténcial en ella como reina te apoyare, porque a diferencia de en ella, yo confio en ti plenamente, y confio en tu juicio.
—¿Y como sabes si mi juicio es lo correcto a seguir?
—Por esto— puso su mano en el pecho de Jon logrando sentir su corazon latir con rapidez bajo esta —Tienes un gran corazon, y dejas que tus decisiones se guien por lo que este siente, llamalo intuicion de rey si quieres, pero siempre haces lo que es correcto para tu gente.
