Lumbra | Taegyu

Capítulo 17 ☕🥐

— Te perdiste todo ayer,— contaba Kai a través del alta voz.

— ¿Según tú de qué me perdí? Verte borracho no es mi ideal de un viernes por la noche si me lo preguntas.— A Taehyun le divirtió el resoplido que se escuchó de su amigo.

— Para tú información estaba lo suficientemente sobrio para recordar todo lo que hice ayer,— dijo con tono sugestivo.

— Ya eso es información de más.— Sabía que su amigo tenía el mínimo de vergüenza y se atrevía a contar todo con lujo de detalle.

— Era una chica agradable, inteligente y muy bonita.

— Me sorprende que seas capaz de recordar todo eso.

— De camino al hotel se habla de muchas cosas.— Taehyun puso una cara asqueada.

— Repito, información de más.— Ambos amigos rompieron en carcajadas interrumpidas por el timbre de la casa de Taehyun.— Kai, hay alguien en la puerta, te colgaré para ver.

— Está bien, nos vemos hoy en la noche,— se despidió Kai.

— ¿No te cansas?— Taehyun rió y colgó la llamada de camino a la entrada.

Del otro lado de la puerta estaba la última persona que pensaba ver ese día, Beomgyu. Su sorpresa fue tanta que se quedó congelado por un tiempo mientras sostenía la puerta.

— ¿Será que puedo pasar?— La voz contraria lo sacó del trance.

— Sí, claro, pasa.— Se hizo a un lado y vio, aún con sorpresa como Beomgyu entraba cómodamente en su casa.— No pensaba que vendrías hoy.

— Lo siento, ¿Tienes algo que hacer?— Los labios de Beomgyu habían formado un puchero al que claramente no iba a resistirse.

— ¡No!— Se apresuró a asegurar.— No salgo mucho de casa al menos que sea por trabajo. Puedes venir cuando quieras.— Ante la invitación Beomgyu sonrió y siguió hasta el salón.

Taehyun observó al recién llegado hacer el mismo recorrido que la noche anterior. ¿Habrá huido de casa de sus padres? Tenía entendido que ese era su destino y minutos antes habían estado mensajeándose.

Beomgyu había perdido todo el valor que ganó en su antigua habitación. ¿En serio pensó que podía llegar y atacarlo? Olvidó lo cobarde que era en situaciones que tenían que ver con su cuerpo.

Su primera vez había sido con el primer chico que le había coqueteado. Era un sunbae de su carrera y él un estudiante de nuevo ingreso. Se sintió bien tener la atención de un chico como este, pero tiempo después se dio cuenta de que no había sido más que un capricho.

No lloró, ni se decepcionó. No estaba enamorado de aquel sunbae y solo se recordó a sí mismo que era una experiencia más en su vida. Si aquel chico no lo tomaba en serio él tampoco lo haría.

Luego, estuvo con Minjeong, más veces de las que preferiría. En el tiempo en que intentó que lo de ellos funcionara satisfacía sus necesidades con la chica que se supone que tenía una relación. Era con consentimiento de ambos y de manera segura. Sin embargo, no logró conectar con ella siquiera de esa forma.

Con Taehyun la cosa había sido distinta. Había atracción, consentimiento, interés, todo lo que no había conseguido con otra persona. Con Taehyun no se sentía como el capricho de un chico ni obligado como con Minjeong. Con Taehyun se sintió libre de entregarle su cuerpo a alguien de quien también quería el suyo.

— ¿Estabas haciendo algo antes de que llegara?— Rompió el silencio.

— Sí, hablaba con Kai.

Beomgyu paseó su mirada por la casa como buscando a alguien, seguramente a Kai.— No está aquí, era una llamada telefónica.— Vio como respiró profundo y no pudo evitar reír.

Taehyun se acercó al menor para invitarlo a tomar asiento en el sofá, pero al acercarse algo lo tomó desprevenido. Sus labios fueron atacados por el contrario. Esperó esto por una semana y justo cuando sucedía reaccionaba como un tonto.

Tardó en corresponder el beso, pero cuando lo hizo salió premiado con los movimientos de las manos en su cabello y un acercamiento tal que había eliminado el espacio entre ellos.

Cuando sentía que no tenían aire separaron sus labios pero Beomgyu seguía atrapado en los brazos del mayor y él no dejó de acariciarle el cabello.

— ¿A eso viniste?— La sonrisa de Taehyun era amplia, tanto que de observarla el menor no pudo evitar sentir las famosas mariposas en su estómago.

— Sí,— respondió con franqueza y solo bastó decir eso para que el mayor lo volviera a besar, haciéndolo caminar hasta el sofá.

Taehyun se sentó y Beomgyu sobre él sin romper aquel beso. Era todo lo que ambos habían deseado desde que se separaron por primera vez el lunes. Nadie allí se atrevía a terminar el momento. Ambos se concentraron en disfrutar de las caricias que el otro proporcionaba.

Cuando comenzó el vaivén de sus cuerpos y ninguno tenía la resistencia para deterlo Taehyun tomó los muslos de Beomgyu y lo elevó para llevarlo a la habitación.

Las ropas ya se habían alejado de sus cuerpos y lo que se adheria era la piel contraria. Sus labios solo habían dejado de tocarse cuando bajaban a acariciar alguna otra parte de la anatomía.

La habitación se llenó de melodías, sudor y placer. Estaban dejando todo entre movimientos que fundían sus cuerpos. Con cada roce querían darle más al otro hasta el punto en que estallaron entre jadeos.

Taehyun cayó sobre Beomgyu, intentando no aplastar su cuerpo y depositó un beso suave en sus labios, luego en su mejilla y nuevamente en los labios.

Se sonrieron y Taehyun se echó a su lado rodeando el cuerpo del menor con sus brazos. Beomgyu se acurrucó más quedando frente al mayor y por unos minutos no dijeron nada, solo siguieron dándose suaves besos y sonriéndose.

— ¿Por qué eres tan precioso?— Fue lo primero que dijo Taehyun, sin dejar de mirarlo a los ojos.

— Supongo que fui hecho con amor.— Su respuesta causó la risa de ambos.

— De seguro que sí.— Depositó otro beso.

— Si me sigues besando no me voy a resistir.

— No quiero que lo hagas.

La petición fue contestada cuando Beomgyu saltó sobre el cuerpo de Taehyun y nuevamente atacó sus labios. Las cosas hubiesen continuado si el teléfono de Beomgyu no hubiese comenzado a sonar y el nombre que aparecía en pantalla era "Yeonjunie hyung".

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Les juro que nada es más difícil para mí que narrar esas cosas kajqwkqksjwj lo hago solo porque son parte fundamental de la historia que vive en mi cabeza, pero a parte de la profunda pena que me da describirlo detallamente creo que no es necesario.

Queden conforme con eso.

No sé si despedirme porque creo que seguiré escribiendo xd