-Encantado. Yo me llamo Kisaki Tetta.
Por alguna razón al escuchar su nombre Takemichi no pudo evitar sentir un escalofrío recorrer su espina dorsal y el pánico crecer en su interior. Una voz en su cabeza le gritaba que corriera, que se alejara de la persona enfrente suya, que era peligrosa. Inconscientemente dio un paso atrás con una expresión de angustia total.
-Os conocéis?- Chifuyu observaba fijamente a su compañero, su reacción no había sido normal y eso empezaba a inquietar al ojo verde.
-Yo creo que no, vuestros nombres no me suenan y las caras tampoco y yo soy muy bueno recordando caras.- con bastante orgullo respondió Kisaki aunque también estaba un poco incómodo con la reacción del ojiazul frente a él.
-Take-chan estas bien?- Kazutora se acercó a su amigo, tampoco entendía la reacción de este pero él lo apoyaría en todo.
-No pasa nada.-Trató de tranquilizar a sus amigos.- He sentido como si nos conociéramos de antes, ha sido una sensación muy extraña.
Por unos segundos el ambiente quedó sumido en un incomodo silencio hasta que una voz lo interrumpió. Solo un moreno con gafas pudo reconocer aquella voz gruesa pero cantarina que se dirigía hacia ellos.
-Kisakiii~♡.-Canturreo.- Porque tardas tanto, me siento solito.- Con ambos brazos se aferró a la cintura del más joven el cual ahora mismo podía competir con un tomate debido al color de su cara.
-Hanma para.- en vano intentó escapar del mayor pero fue imposible.- Estamos en público, me da vergüenza.- su voz se hacía cada vez más baja debido a la pena que sentía que aun estando cerca incluso a Hanma se le dificulto oírlo.
-No me vas a presentar a tus amigos.- haciendo caso omiso a la queja del moreno se dirigió a los tres chicos enfrente suya.- Hanma Shuji, novio de esta belleza~♡.- con una sonrisa traviesa dejo un beso en la comisura de los labios de Kisaki que apunto estuvo de desmayarse por el beso.
Takemichi y Chifuyu estaban aguantando la risa mientras que Kazutora inspeccionaba al recién llegado, sabía que lo conocía de alguna parte pero no recordaba de donde. Se dedicó a mirarlo fijamente provocando los celos del menor que aunque fuera tímido era posesivo con su novio. De manera sutil se fue posicionando enfrente de Hanma para ocultarlo de la mirada del oji ámbar.
-Hola, yo soy Hanagaki Takemichi y él es mi compañero Matsuno Chifuyu. Nos alegra conocer gente nueva.- De manera rápida intentó recomponerse de la mala vibra que le transmite la pareja.- El es mi.- fue cortado abruptamente por el más alto.
-Hanemiya Kazutora, si nos conocemos.- La mención de su apellido provocó un mal estar en él, no le gustaba los recuerdos que venían junto a este, solo hizo una mueca de disgusto.
-Es Hanagaki Kazutora ahora. Por favor recuérdelo a partir de ahora.- A Takemichi no le gustaba ser desagradable por lo cual cuando se enfadaba siempre mantenía la compostura y trataba a la gente con respeto a pesar de no merecerlo, era su manera de que no le afectarán los malos comentarios.
-¿Nos conocemos?- Kazutora fue quien calló el comentario seguramente mordaz que Hanma estaba apunto de soltar.
-No te acuerdas de mi pequeño Tora.- fingió limpiarse una lágrima.- Si yo te recuerdo con mucho cariño, del mismo barrio, misma calle...-Kazutora solo se tenso, por fin recordaba a Hanma.
El silencio volvió a reinar pero este era mucho más pesado mientras Hanma quien había creado toda la conmoción se entretenía con el pelo de su novio ajeno a todo. Kazutora estaba en shock, había recordado a Hanma pero a costa de rememorar todos aquellos recuerdos que su mente ocultaba en lo más profundo de su ser debido a que su pequeña mente fue incapaz de enfrentarlo y/o entenderlo. Solo pudo correr despavorido sin rumbo ni dirección, solo quería huir de todo y todos, ahora sí estaba seguro de que no merecía la felicidad, que nunca fue merecedor de ella.
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Amor entre costuras
Novela Juvenil¿Qué pasaría si Takemichi hubiera conocido antes a Izana y Kakucho?¿Que sin darse cuenta hubiese evitado la muerte de Shinichiro? La vida de dos familias se ve cruzada por un accidente que cambiará el destino de ambas y descubrirán que todo aquello...