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Durante el viaje a casa de Santi vamos algo en silencio. Supongo que aunque el detalle nos ha unido, la tensión sigue en el ambiente.

+Y... ¿cuál es el plan?

-Simplemente ver alguna película sin que te quedes dormida, ¿te ves capaz de hacer eso?

+Idiota... Claro que sí.

Llegamos a su apartamento y entramos a la cochera para dejar el coche.

Conforme subimos las escaleras para llegar a su piso empiezan a sonarme las tripas. Entre unas cosas y otras no he podido cenar aún. Que vergüenza.

-Parece que en el plan también voy a hacerte la cena.

+¡No hace falta!

-¿Has escuchado eso? Sí hace falta.

Me muerdo el labio, no puedo llevarle la contraria a eso.

Llegamos al departamento.

-Ve a mi cuarto y acomoda tus cosas, yo voy a hacernos algo para cenar.

+Vale.

Me paso 5 minutos buscando su dormitorio. Nunca he estado en su departamento y cada paso que doy es algo nuevo.

Por fin doy con el dormitorio de Santi. Entro, cada rincón huele a él. Veo que tiene varias fotos en la mesa de noche.

Una de las fotos es nuestra de hace mucho tiempo, con nuestro grupo de amigos en común.

Ver esa foto me causa mucha ternura y me emociona. De una manera o de otra, me tiene en su mesita de noche.

Abro el armario para acomodar mi ropa, y no puedo evitar caer en la tentación y abrir un par de cajones.

No me lo puedo creer. Hay un sujetador en uno de los cajones.

+¡Santi!

-¿Qué pasa?

Santi entra en su dormitorio y me ve con el cajón abierto.

-¿Qué hacías mirando ahí?

+No sabía dónde poner mi ropa. No trates de evadirme. Sabes lo que he encontrado.

-Sí, lo sé.

+Espero que sea tuyo.

-¡¿Qué?! ¡No! Es... de Alicia.

+¡¿Habéis vuelto a veros?!

-No es lo que crees. Tenemos todavía cosas del otro en nuestras casas. Simplemente tenemos que vernos para devolvernoslas.

+No sé...

-Confía en mí. Por favor.

+Está bien...

-¿Te has puesto celosa?

+¿Tú qué crees?

-Dulce, ni siquiera somos algo.

Me paro a pensar un segundo. Si sigo con este numerito de celos probablemente acabe liando las cosas. Si Santi se enterase de que esta tarde la he pasado con Lucas probablemente sería igual.

Si está mintiendo ambos lo estamos haciendo mal, si no está mintiendo soy un monstruo.

+Llevas razón, perdona por la escenita. Confío en ti.

-Ven aquí. Te he preparado algo para cenar que espero sea de tu agrado.

Nos sentamos a cenar mientras veíamos una película de comedia de fondo.

¿Y si no eres tú?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora