Junto A Ti

Capítulo 1; Bombón Nestlé

*Olivia Pov*

Me encuentro en mi cama tumbada, el móvil en el suelo de mi habitación; indicando que la alarma ya ha sonado y que ya ha sido lanzado por los aires hasta chocar contra el gran peluche tigre blanco que tengo encima de la silla de ruedas de mi escritorio. Todos, absolutamente todos los días que hay instituto, mi móvil vuela por los aires justo a las 7.00h de la mañana. Supongo que me entiendes cuando digo que la alarma de los cojones es estresante, ya que suena cada puto día; no falla nunca.

Tengo los brazos encima de mi rostro, sin ganas de levantarme. Respiro hondo y noto algo grande y blando chocar contra mi vientre desnudo porque la camiseta de mi pijama se me ha subido hasta tapar nada más que mis pechos. Frunzo el ceño y me aparto los brazos de la cara, abro un ojo y veo a Roxy (mi hermana melliza) asesinándome con la mirada.

Es casi igual que yo. Casi. Si no fuera porque ella tiene los ojos azul verdoso (yo los tengo azul grisáceo), el pelo ella no tiene lacio y cae por su espalda, llegando hasta sud omoplatos, de color negro como el carbón (el mío es rizado y a mí me llega hasta casi la cadera, además yo lo tengo del color del chocolate); ella tiene un flequillo cortinilla, mientras que yo tengo la raya en medio y no es que tenga mucho flequillo. Ella tiene los labios igual de carnosos que yo pero su piel es menos bronceada que la mía. Aparte de eso, somos iguales.

- ¡Olivia Maxwell, levántate de una puta vez!- me grita y entonces me vuelve a tirar otro peluche, ésta vez es un tigre blanco.
- ¡Que ya voy! ¡No me grites de buena mañana!- le grito en respuesta y ella pone los ojos en blanco, mientras me empiezo a sentar en la cama con total tranquilidad.

Veo como sale de mi habitación, entrando en la suya (ya que nuestras habitaciones se comunican por una pared corrediza, la cual a veces está cerrada y a veces abierta). En cuanto intento volver a tumbarme, recibo una hostia con un peluche en toda la cara y gruño, me levanto de la cómoda y caliente cama y camino arrastrándo los pies y medio sobada hacia el lavabo de la habitación.

Cuando llego, cierro la puerta y me siento en el váter. Hago mis necesidades, me levanto y me lavo las manos.

Vuelvo a mi habitación y abro la puerta de mi armario, el cual está empotrado en la pared. Abro mis ojos, mientras inspecciono cada prenda de ropa. Bufo mientras intento encontrar la mejor opción. Debería hacer lo mismo que mi hermana: prepararme la ropa antes de irme a dormir. Es práctico y no tienes que pensar por la mañana recién levantada.

Al final, me acabo decidiendo por un top ajustado con estampado leopardo que se ajusta a mis pechos y me llega hasta la cintura, una falda negra ancha (no mucho) y añado un colgante dorado con una cruz al final que me llega hasta la cintura, junto con otro colgante en el que pone mi nombre, este es más corto que el otro y solo llega hasta mi escote.

Vuelvo al lavabo y me desnudo, dejando en el suelo el caliente pijama que uso para dormir. La ropa interioe también la dejo en el mismo montón. Me meto en la ducha y dejo que el agua caliente relaje mis músculos, aun dormidos. Me lavo todo el cuerpo, excepto el pelo, ya que me lo lavé ayer.

Salgo de la ducha y me enrollo el cuerpo con una toalla. Me seco el cuerpo y después me pongo la ropa interior negra, el sujetador sin tirantes, ya que sino se verían porque el top tampoco tiene tirantes. Mis medias de color carne. Después me pongo el top y la falda, junto con los colgantes y añado un brazalete dorado que hay sobre el mármol.

Vuelvo a la habitación y me pongo unas botas con seis centímetros de tacón, más o menos, que son de color marrón claro; me llegan hasta la rodilla. Entro otra vez en el lavabo y ahí, me peino con agua mi pelo rizado y largo. Cuando consigo que quede presentable, sonrío a mi reflejo. Respiro hondo y salgo a mi habitación, son las 7.30h, he tardado como veinte minutos en ducharme y vestieme. ¡Nuevo récord!

Cojo mi mochila del suelo y me la cuelgo al hombro, junto con el móvil en la mano derecha y en el brazo izquierdo una chaqueta de lana blanca. Camino hacia las escaleras y las bajo, entro en la cocina y veo a mi hermana desayunando apoyada en la isla.

- No sé como eres capaz de ser tan rápida- digo, dejando la mochila en el suelo, apoyada contra la isla de la cocina y mi chaqueta en el taburete donde me voy a sentar. Dejo el móvil en el mármol.

Después cojo un vaso y empiezo a prepararme la leche con Cola Cao que me tomo todas las mañanas.

- Pues porque como la ropa ya la tengo elegida, voy directamente a la ducha- me responde sonriendo, comiéndose tranquilamente una manzana a mordiscos.
- Bah, te duchas muy rápido- digo.

La oigo reírse y levanto una ceja.

- ¿Yo me ducho rápido? ¿Qué te has tomado?- dice entre risas y ahora entiendo su risa, por lo cual me acabo riéndo con ella.

Roxy tarda en ducharse casi tanto como yo.

Sonrío y me acabo de hacer el vaso de leche, me siento en la silla y me lo empiezo a beber, viendo como ella tira el hueso de la manzana a la basura.

- Anda vamos que no llegamos- dice, colgándose su mochila.
- Son menos veinticinco, Roxy, llegamos de sobras- digo, poniendo los ojos en blanco.

Se vuelve para mirarme con cara de "flipo por completo".

- Si no- dice irónica- ya te gustaría a ti llegar a tiempo algún día- dice y yo le sonrío victoriosa.
- Siempre llego puntual a clase- digo, hinchando pecho.
- Porque corres- se encoje de hombros y abre la puerta.

De todas las escusas que podía poner, pone esa. Hay que ver.

- ¿Yo? ¿Correr? ¿Qué llevaba la manzana, Roxy?- le digo sonriendo, me pongo la chaqueta de lana y me cuelgo la mochila.
- Manzana- dice y pongo los ojos en blanco.
- Ja, ja, que graciosa- digo irónicamente.

Después salgo de casa y empiezo a caminar tranquilamente. Hablando con Roxy sobre sus deberes de mates, la muy cabrona entiende las mates, saca ochos y nueves y yo con un puto cuatro.

Levanto mi cabeza de repente al chocar contra algo duro. Frunzo el ceño y miro al chico delante de mí. Wow, no sabía yo que había estos bombones sueltos por Barcelona.

- Lo siento, muñeca- se disculpa y me derrito cuando me llama "muñeca"- no era mi intención chocar contigo- me dice y me sonríe con media boca. Creo que voy a morir.

Intento salir de mi empanación. Pero me cuesta. Reacciono cuando mi hermana me pellizca el brazo y gruño por lo bajo. Eso duele.

- Tranquilo, no pasa nada- le sonrío y me muerdo el interior de las mejillas.
- Me llamo Christian- dice sonriéndome.
- Yo Liv- susurro y me vuelvo a quedar empanada mirando sus hermosos ojos marrones.
- Bonito nombre- me sonríe- ya nos veremos- dice y sigue caminando; mi corazón late rápido cuando pasa por mi lado rozando su brazo con el mío.

Me derrito, o sea en serio. ¿Quién es ese bombón y de dónde sale?

- Tierra llamándo a Liv, Tierra llamándo a Liv- oigo que dice mi hermana, pasándome una y otra vez su mano delante de las narices.
- ¡¿Lo has visto?!- grito, mordiéndome el labio inferior y suspiro.
- Se me han caído las bragas al suelo- afirma mi hermana y la asesino con la mirada.
- Es mío, Roxan- digo y ella levanta las manos en señal de paz.
- Todo tuyo, solo he dicho lo que las dos estabamos pensando- me dice sonriendo y asiento con la cabeza, riéndome levemente.
- Tienes razón. Lo voy a llamar bombón Nestlé- sonrío- están muy ricos y él también- digo y la risa de mi hermana es tal que creo que ha despertado a nuestros padres, y mira que estamos lejos.

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Holaa :')
He decidido subir hoy el primer cap de mi nueva historia. Decidme que os parece en los comentarios, y también dejadme algún voto para mayor felicidad :')
Además os he dejado el modelito de que lleva Liv en multimedia :')
Espero que os haya gustado y que tengáis ganas del segundo.
He decidido subir cada semana, así que subiré la semana que viene.
Adiosito :3