Capítulo 18; Voy a morir con los exámenes

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Dos días después los exámenes son cada vez más estresantes.

Ya he hecho los del lengua catalana, sociales (que no me fue tan mal como me esperaba), naturales y tecnología.

Hoy es miércoles, por lo cual ésta mañana antes del patio he hecho el de lengua castellana y ahora estoy sentada en mi sitio, cruzada de piernas y mirando por la ventana mientras muerdo el boli.

Son las 11.59h de la mañana y estoy en clase de tutoria. La última vez que estuve en esta clase, no acabé muy bien, por lo que hoy he decidido quedarme callada mirando por la ventana sin hacerle caso al profe, ya que a él le gusta mucho tocar los cojones.

Sí, no prestar atención en clase está mal, pero esque me da igual porque desde luego tendré un seis de nota final, como todos los trimestres.

Miro hacia el patio y veo algunos de los tíos buenos del instituto jugar a fútbol. Que pena que Christian no salga de mi cabeza y no pueda dejar de pensar en él, que si no, más de uno de los que están haciendo educación física ya fuesen sido violados en mi mente.

Suspiro y cierro mis ojos. Me bajo en la silla, dejando mi culo al filo y estiro las piernas, me cruzo de brazos después de dejar el boli en la mesa y miro hacia el profesor. Si prestarle atención alguna.

Es entonces cuando me doy cuenta de que está escribiendo algo en la pizarra y que debe de ser importante porque todos lo están copiando.

- ¿Qué es eso tan importante que acaba de decir?- le pregunto a Johnny y él acaba de escribir unos números antes de responderme.
- Liv, estamos haciendo un repaso para el examen de luego ¿no lo sabías?- me pregunta y yo abro mucho los ojos frunciendo el ceño.
- ¿Qué dices?- pregunto y miro a la pizarra.

En ella veo escrita números y operaciones y admito que sí, que estamos haciendo un repaso del tema para el examen que tenemos después y yo no he prestado ni la más mínima atención.

Puto karma. Un día que decido no prestar atención y ¡zas! repaso del tema. Claro que sí, joder. Y se supone que debo aprobar, manda huevos.

Miro al profe y bufo frustrada. Pensaba que tocaría tutoría, no repaso del tema. Y ahora yo no tengo tantas posibilidades de aprobar como si fuese escuchado el repaso.

- Señorita Maxwell- oigo entonces que dice el profe.

"Este tío tiene telepatía conmigo" pienso y me muerdo el interior de las mejillas para no contestarle.

- Dime- digo y respiro hondo.
- ¿Ha entendido esto último?- pregunta y yo niego con la cabeza, básicamente porque si le digo que sí me hará demostrárselo y si le digo que no lo volverá a explicar.

Aunque jamás le diría que no estaba prestando atención. Ya víste como se puso el otro día por reírme.

El profe vuelve a explicar el mismo ejercicio y cuando acaba, me mira; asiento con la cabeza varias veces, en plan: "lo he pillado todo todito, no lo dude".

***

Dos clases después, acabo de entregar el examen de matemáticas, y no me ha ido tan mal como me esperaba.

Realmente, cuando haces los deberes y estudias un poco, puedes llegar a tener fe en que aprobarás un examen de mates.

Si apruebo me da un chungo, lo juro.

Me vuelvo a sentar en mi silla, cojo el boli azul y miro por la ventana. Muerdo el tapón mientras pienso en qué puedo pintarme en la mano.

Al final, acabo pintándome dos huellas de perro pequeñas. También escribo "CHRSTN" que significa "Christian", lo pongo en calve para que nadie adivine el nombre. Aunque es obvio, prefiero que el que lo quiera saber se tenga que comer un poco la cabeza para averiguarlo.

Escucho la música sonar y me levanto de mi silla, colgándome la mochila al hombro y voy hacia la mesa de Val, mi mejor amiga. Como también se lleva bien con mi hermana, se suele venir a casa a dormir. Este fin de semana ni siquiera la he visto porque se había ido con su familia a Canarias, pero ya ha vuelto. La muy cabrona es casi una cabeza más alta que yo y además tiene buen cuerpo.

A su lado me siento enana, pero bueno, me he acabado acostumbrado a ser una enana.

- ¿Qué tal el finde?- le pregunto, mientras caminamos hacia fuera de la salida.
- Una mierda, faltabas tú- me dice sonriendo y yo le devuelvo la sonrisa.
- Tenía partido- digo, encogiéndome de hombros y empezamos a bajar las escaleras hacia el gimnasio del instituto.
- Lo sé, puta vida- dice y entramos al gimnasio. Dejo la mochila en el suelo y me recojo el pelo en una coleta baja.

Caminamos hacia los bancos y nos sentamos, esperando a que salga el profe y nos diga qué hacer.

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Espero que os haya gustado el cap aunque sea corto :')

Si no es mucha molestía, ¿podríais pasaros por la historia que escribo junto a una amiga? La historia se llama Una "yo" distinta.

Este cap se lo dedico a ella @Aname_o4 (que es muy maja y se ha vuelto una amiga importante para mí :3)

Votad y comentad por fas ^-^

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