Princesa perdida

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/Ariza/

Sólo cuando mis pies se apoyan en algo duro, abro los ojos. Estamos en el techo del castillo, desde aquí se puede ver todo, no sólo el castillo sino que el lugar de entrenamiento, los jardines traseros y parte de la tierra fuera del castillo, las casas fuera de aquí.

El centro del techo es el único lugar plano y lo suficientemente ancho para apoyar ambos pies. Pero los lados del techo están inclinados y la caída es bastante larga.

*¿Por qué aquí?-pregunto sorprendida mirando al suelo.

*No voy a estar gritándote-suelta molesto, asiento ahorrándome la risa y el comentario sarcástico que quiero hacer.

Me siento en el techo doblando las rodillas hacia afuera para apoyar la libreta.

*Vas a comenzar desde cero-me ordena, suspiro y voy a una nueva hoja-en el centro vas a dibujar el salón del trono.

Comienzo a dibujar añadiendo todos los detalles que quiero aprovechando que él se concentra más en la pelea, aunque a veces tengo la sensación de que me da tiempo a propósito.

Las instrucciones que me da del primer piso son cortas pero claras. No me da muchos detalles sobre la decoración o cosas así pero considerando que voy a pasarme varios días en este lugar, dejo los espacios para poder añadirlo cuando tenga tiempo de pasearme por el castillo, por ahora solo me interesa la ubicación.

*El pasillo 2 no es tan importante-avisa cuando terminamos el primer piso, miro el dibujo divertida y orgullosa, espero haberlo echo bien.

Si lo comparo con el primero está mucho mejor. No sólo por el contenido, sino por los trazos que parecen más firmes y seguros.

*Lo dibujaré igual-le digo seria y demandante.

*Como quieras-dice con simpleza-el dos debes comenzarlo desd...

*Espera-digo antes de que termine-¿no tienen calabozos o algo parecido?-me lanza una mirada rápida llena de burla antes de volver a la pelea.

*¿Crees que somos alguna clase de civilización arcaica?-le da una patada en las costillas a uno de los tipos

*¿Quieres que te responda?-digo siguiendo con la mirada al soldado que choca contra el suelo.

*Los prisioneros no duran mucho aquí-vuelvo a mirarlo y tiene esa mirada y sonrisa que tanto quiero dibujar.

*Pero mientras los tienen ¿dónde los dejan?-cuestiono interesada.

*¡Guarda silencio, niña!-grita el tipo al que golpeó en las costillas y mandó al suelo. Ahora se eleva enojado, tiene sangre saliendo de la boca, heridas por todas partes y sudor cayéndole-nos distraes demasiado, y al príncipe también.

*Si eres tan malo que una persona distraída te vence, no es mi culpa-suelto sin pensar.

Sus ojos brillan con maldad, levanta su mano en mi dirección y veo el brillo formándose en la palma, pero antes de que pueda reaccionar, Katsuki la toma girándola sin piedad. Resisto el correr la mirada y chillar de sorpresa, el hombre suelta un grito de dolor que me tensa.

*No seas cobarde-dice con una voz profunda Katsuki-tu pelea es conmigo-tiene esa sonrisa malévola nuevamente que me distrae de la sorpresa y hace que los dedos me piquen por dibujarlo.

Hazlo.

Dibújalo.

*Y ella tiene razón, le cargas a otros tu debilidad-lo suelta y golpea haciendo que caiga rápidamente al suelto otra vez.