7

67 12 9
                                    

/Ariza/

Los padres de kirishima me miran sorprendidos cuando me ven entrar a la casa. Ambos están en la mesa revisando unos aparatos extraños pero los sueltan al vernos, miro a Kirishima nerviosa pero él sólo les sonríe.

*Ella es Ariza-informa-es una amiga y la invité a comer.

*Hola-digo insegura.

*¿Desde cuándo es tu amiga?-pregunta su madre.

*¿Desde cuándo tienes una?-cuestiona si padre.

*Hoy nos conocimos-sus padres se miran y suspiran.

*Bueno-dice su madre-no es algo que nos sorprenda-ella sonríe y se levanta para acercarse a mi-¿tienes hambre?

La familia de Kirishima es como una brisa de aire fresco entre el montón de caras de perros que tengo que ver a diario. Aunque su padre, Kenji, no es muy expresivo y sonriente, es muy amable conmigo y atento con su esposa, bromea mucho con Kirishima. Y su madre, Emiko, es muy dulce, entiendo de dónde sacó su personalidad Kirishima.

Él es sólo completamente distinto a todos. Es muy expresivo, sonríe mucho y se muestra preocupado por mis heridas y fue extremadamente cuidadoso con ellas, pero es más que eso. Es su atención cuando le hablan, la forma en que trata a sus padres, su simpatía, lo que me hace sentir tan cómoda.

*¿Viste a mi hermano Kae?-pregunta Kirishima sorprendido, asiento.

*Tuvo que ser mi guía los primeros días que estuve aquí-le digo igual de sorprendida al enterarme que Kae es hermano de él, son tan distintos.

*Puedo imaginar su cara al tener que aceptar ese trabajo-dice su madre divertida haciedome sonreír.

*No estaba feliz pero tuvo que hacerlo-confieso y veo como su padre sonríe de lado.

*Hana necesita escuchar esto, se va a burlar mucho de Kae-suelta Kirishima riendo.

*¿Quién es Hana?-pregunto.

*La esposa de Kae-responde Emiko-le encanta molestarlo cuando se ven-asiento divertida.

La tarde se pasa demasiado rápido junto a la familia de Kirishima, Emiko me ofrece pasar la noche en su casa y aunque eso me encantaría, debo rechazar la oferta porque no puedo imaginar la reacción del rey si su prisionera no aparece por el castillo. Después de todo, sigo siendo la invasora.

Me despido de ellos y salgo con Kirishima quien ofrece acompañarme hasta las puertas del castillo.

*¿Quieres ir volando?-pregunta haciendo una seña con su mano hacia su espalda, suelto una risa y niego.

*No estoy muy emocionada por volver, si podemos tardarnos toda la noche sería fantástico-él asiente comenzando a caminar.

*Y yo que me muero por entrar al castillo-frunzo el ceño-siempre quise ser parte del ejercito del rey Bakugo.

*¿Por qué querrías eso?-pregunto casi sin voz.

Puede que nos conozcamos de hoy pero estoy segura de que Kirishima no es como nadie en este lugar, tiene un corazón dulce, expresivo, tierno y cuidadoso. Me cuesta imaginarlo entrenando igual que Katsuki, con esa sonrisa violenta y feroz mientras golpea a otros.

*Volverme más fuerte-responde mirándome con ternura-y proteger a mi familia.

*Tiene sentido-suelto suspirando-¿y por qué no lo haces?-sus ojos de pronto adquieren un pequeño aire de tristeza y aunque sonríe casi podría sentir el nudo en su pecho.

*Es complicado-dice rascando su cabello nervioso.

*Estuviste toda la tarde escuchando mi historia, me parece que es mi turno de escuchar la tuya-su mano cae y su sonrisa desaparece-no se lo contaré a nadie, si es lo que quieres.

Princesa perdidaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora