La diana cantaba en los patios de los cuarteles,
Y el viento de la mañana soplaba sobre las linternas.
Era la hora en que el enjambre de los sueños malignos Tuerce sobre sus almohadas los atezados adolescentes; Cuando, cual un ojo sangriento que palpita y se menea, La lámpara en el amanecer es una mancha roja; Cuando el alma, bajo el peso del cuerpo rudo y pesado, Imita los combates de la lámpara y del día. Como un rostro en llanto que las brisas enjugan, El aire está lleno del escalofrío de las cosas que se fugan, Y el hombre está fatigado de escribir y la mujer de amar,
Las casas, aquí y allá, comienzan a humear, Las hembras de placer, el párpado lívido, Boca abierta, dormían con su sueño estúpido; Las pordioseras, arrastrando sus senos fláccidos y fríos, Soplaban sobre sus tizones y soplaban sobre sus dedos. Era la hora en que, entre el frío y la roñería
Se agravan los dolores de las mujeres yacientes; Cual un sollozo cortado por un vómito espumoso El canto del gallo, a lo lejos, rasgaba el aire brumoso; Un mar de nieblas bañaba los edificios,
Y los agonizantes en el fondo de los hospicios Exhalaban su postrer estertor en hipos desiguales. Los libertinos regresaban, destrozados por sus esfuerzos.
La aurora tiritante, vestida de rosa y verde, Avanzaba lentamente sobre el Sena desierto, Y la sombra de París, frotándose los ojos, Empuñaba sus herramientas, anciano laborioso.
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Las Flores del mal
PoetryLas Flores del mal (título original en francés: Les Fleurs du mal) es una colección de poemas de Charles Baudelaire. Considerada la obra máxima de su autor, abarca casi la totalidad de su producción poética desde 1840 hasta la fecha de su primera pu...