Era domingo, mierda.
¿Con que excusa iría?¿Si quiera estaría abierto?.
Pensando que no tenía nada preparado, decidió olvidar el asunto, se vistió informalmente y, salió a comer, solo.
Entró al lugar, y la señorita en caja preguntó;
- ¿Mesa para uno? -
Y se dió cuenta, el nunca se había enamorado ni acompañado, nunca había estado junto a alguien sentado para disfrutar de comida de forma amorosa, nunca vio a nadie con amor, nunca sintió esa sensación de nerviosismo en su pecho y calor en sus mejillas.
- que deprimente -
Dijo para si mismo ya sentado en la mesa.
Al pasar el tiempo, comió y cuando estaba a punto de irse, entró aquel hombre, alto, fornido, buen porte, tez trigueña y, de la mano de una mujer, hermosa, por qué mentiría.
- al parecer no tienen hijos - pensó.
Decidió que pediría algo más, solo para ver a ese par de tortolitos pasársela bien.
Se quedó más que todo porque, quería buscar una oportunidad para establecer comunicación con aquel hombre.
Pero como?
Después de tanto tiempo, vio como la esposa se levantó y se fue, probablemente al baño, y el vio aquellas oportunidades abrirse a sus órdenes.
- Joder el mundo está de mi lado -
Dijo con una orgullosisima sonrisa caminando hacia el hombre.
– Hol- –
-¡Amoor! Volví-
Retiraba lo dicho.
Sus palabras fueron cortadas por aquella mujer con vestido rojo, tacones negros, bellas piernas, cabello corto y rojizo.
Ella era hermosa.
-Oh!, Eso es bueno, ah, oficial Shinazugawa, que coincidencia encontrarnos por aquí-
-S-si.- dijo desanimado (?).
-Bueno yo, no era nada, creo que estoy interrumpiendo, adiós!-
Y el hombre, tomó su muñeca y se levantó.
– Eh? –
- Señor oficial, quédese con nosotros. De hecho, yo había notado que estaba solo y, quería que viniese con nosotros, pero no sabía cómo debia de hablar-
Luego de unos cuantos "no", sanemi terminó sentado junto a gyomei frente a su esposa.
La cena transcurrió realmente bien, sue esposa resultó ser realmente amable al igual que él, y ambos, amaban a los niños, no paraban de hablar sobre los niños que llevan a la guardería.
–Definitivamente ellos no son delincuentes, eres bastante tonto, sanemi– pensó para si mismo.
Al terminar la cena, los tres salieron del lugar y se despidieron.
Shinazugawa y gyomei intercambiaron números.
- ¡AL FIN! -
espera, ¿A qué se debía su reacción?
Seguro porque ahora podría acabar sus dudas con aquel muchacho y sobre el matrimonio.
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♡︎𝑪𝒐𝒖𝒍𝒅 𝒚𝒐𝒖 𝒔𝒕𝒂𝒚 𝒃𝒚 𝒎𝒚 𝒔𝒊𝒅𝒆?♡︎ /Hɪᴍᴇsᴀɴᴇ/
Fanfiction"Venimos para hacer una revisión en su guardería, señor himejima gyomei." Esa fue la frase que, dejó a rrienda suelta todos los sucesos que se vendrían a continuación, y a el corazón de Shinazugawa sanemi, pondría en confusión. ...
