Gyomei entro a la habitación, y como si supiese que es lo que sucedía con sanemi, se acercó, lo abrazó por la espalda, sin decir nada, sin ningún movimiento brusco, con calma.
- Gyomei... ¿Tú estás jugando conmigo?, Si amas a Aiko más que a mí, y soy solo una aventura que deseas tener, déjame irme, o simplemente déjame, al final, me terminaré reanimando yo solo - Dijo aún con lágrimas en los ojos -
- Sanemi, nunca dije que amo más a Aiko, pero escúchame, yo... No quiero que ella se lastime de esta forma, y menos cuando carga con un bebé, quiero que sepa de nosotros, cuando ya no me ame más, y para eso, tendré que empezar a mermar mi amor hacía ella, cuando ya no cargue con el bebé. -
- Se oye fácil para ti, pero para mí esto es una tortura, nada más, gyomei, mi pecho arde, sabiendo que tus labios no son míos, sabiendo que tu amor más sincero no es hacía mi, si no, hacía alguien más, y se, que soy solo el amante, el infiel, pero no puedo evitar lo que me hace sentir esto. - Dijo, con su voz poco a poco siendo quebrada.
- Por qué no puedes amarme, así como tanto me lo dices en privado?... -
Y gyomei atrajo su rostro al de él, y le dió un dulce beso.
- Te amo sanemi, y se que escuchaste todo lo que hablamos, déjame decirte algo, cada cosa que le dije, cada palabra, era pensada en ti, yo, ahora, no puedo dejar de ver a ti en Aiko, en mi esposa. E incluso, sanemi, la he llamado por tu nombre -
Sanemi enrojeció por completo y gyomei, beso sus mejillas, riéndose.
- Entonces no diré más -
Así, sanemi busco los labios de gyomei en medio de la oscura noche, y una lucecita pequeña, brindada por la luna les iluminaba.
Gyomei empezó a desabotonada ambas camisetas, poco a poco, subió sus besos de tono, apenas dejando aire para respirar.
Amaba esto
Sus besos recorrieron cada parte de su querido Sanemi, siendo delicado, suave, como si fuese a quebrarse en sus dedos, a un solo toque.
Cuando sus ropas fueron totalmente retiradas, tomaron unos segundos para darse miradas de consentimiento, y Sanemi, quien había dicho que no hablaría más, dijo:
"Hazme tuyo"
Y con eso, gyomei empezó dilatando la entrada de Sanemi, con sus dedos.
- ...! -
El primer dedo.
Las lágrimas de Sanemi comenzaron a salir con el segundo dedo, habían sentimientos mezclados en él, algo le decía que dolía y también, que esto era jodidamente bueno.
Gyomei besó esas lágrimas y las seco con su mano libre.
- Todo está bien, Shinazugawa -
Y Sanemi lloró, no por dolor o excitación, lo amaba, amaba a ese hombre que estaba haciendo de él, su alma, su corazón y mente, suyos.
- Te amo... -
Entonces llegó el momento, dió la señal a gyomei, quien entendió.
Se posicionó de forma cómoda para ambos y se introdujo poco a poco en Sanemi, quien en este momento estaba apuñando ambas manos en la espalda de Gyomei.
- ... Mhg ! -
Soltaba gemidos ahogados.
Cuando entró del todo, que tardó un par de minutos, por el tamaño de gyomei, el de Sanemi y tenía que ver, que era su primera vez.
Así, empezó a moverse dentro de Sanemi haciéndolo sentirse en un punto, dónde jamás en su vida había llegado, pero...
"Esto no es simple sexo, no? Himejima?, Me estás haciendo tuyo, haciéndome el amor, de forma tan dulce, que haces que el dolor sea de minutos." Pensó Sanemi.
Y así, sucesivamente, sus embestidas pasaron de lentas a más rápidas, hasta que ambos se corrieron, se besaron y cayeron a la cama, juntos, y durmieron así.
La sensación de los toques de gyomei quedarían grabados en la mente de Sanemi, por siempre.
"Pero, ¿por qué?"
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♡︎𝑪𝒐𝒖𝒍𝒅 𝒚𝒐𝒖 𝒔𝒕𝒂𝒚 𝒃𝒚 𝒎𝒚 𝒔𝒊𝒅𝒆?♡︎ /Hɪᴍᴇsᴀɴᴇ/
Fanfic"Venimos para hacer una revisión en su guardería, señor himejima gyomei." Esa fue la frase que, dejó a rrienda suelta todos los sucesos que se vendrían a continuación, y a el corazón de Shinazugawa sanemi, pondría en confusión. ...
