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Aja regresó a su casa, cerró la puerta y caminó hacia la sala

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Aja regresó a su casa, cerró la puerta y caminó hacia la sala. Era extraño, eran ya las siete y su esposo todavía no llegaba. Tomó un vaso y se sirvió un poco de jugo de uva.

-- Buenas noches, amor

La voz hizo que la chica se sobresaltara, miró atrás suyo y era Adrien.

-- Ay, amor, eres tú. Pensé que no habías vuelto

-- Lo siento mucho, debí decirte por mensaje

-- Descuida, no reviso mi celular muy a menudo

-- Bueno-- Sonrió.

-- ¿Quieres terminar de ver la serie que dejamos inconclusa ayer? 

-- Claro, yo preparo las palomitas-- Caminó hacia la cocina.

La joven buscaba la serie mientras que el chico estaba en la cocina, tras haber preparado el alimento, volvió a la sala y ambos se sentaron a ver la televisión. Adrien volteó a verla y le sonrío, ella hizo lo mismo y la albina se recostó en el hombro del chico. Este tomó la mano de la contraria y siguieron viendo la película. Dentro de un rato, Adrien la miró, tomó su rostro y le dio un beso.

-- ¿Sabes? No me arrepiento de casarme contigo

-- Yo tampoco me arrepiento, eres un chico muy lindo

El joven siguió con el beso, era la primera vez que un beso suyo duraba mucho, se sentía diferente. La forma en la que el joven actuaba. Le gustaba, así que siguió con aquel beso apasionado. El chico se recostó encima de ella mientras la besaba. 

-- Adrien-- Interrumpió el beso-- ¿Qué ocurre?

-- ¿Acaso no puedo acortejar a mi esposa?

-- Es que estás avanzando muy rápido

-- ¿Rápido?

-- Sí, todavía no estoy lista. Ya lo discutimos, hasta que ambos estemos listos, avanzaremos al siguiente nivel ¿Sí?

-- Pero, amor mío, ya he esperado mucho. Me gustaría poder disfrutar al menos un momento romántico con mi bella esposa-- Acarició su mejilla y siguió con el beso.

La joven volvió a interrumpir el momento.

-- ¿Qué mosco te picó?

-- ... -- Su mirada se tornó seria.

Al notar que el chico la miraba con seriedad, sintió un escalofrío, su mirada era, de cierta forma, aterradora. Adrien no tenía un semblante de esa magnitud. La mirada de él era tierna y podrías sentir su felicidad, pero la mirada de aquel chico reflejaba sentimientos negativos.

-- Un segundo-- Se levantó de inmediato, empujando al chico.

Adrien quedó sentado en el sofá mientras la albina miraba con enojo al joven.

𝘌𝘯 𝘰𝘵𝘳𝘢 𝘷𝘪𝘥𝘢 || .'¨.𝘤𝘳𝘰𝘴𝘴𝘰𝘷𝘦𝘳 🎈Donde viven las historias. Descúbrelo ahora