Lo Prohibido (+18) [Completa]

Capitulo 29

NARRADOR OMNISCIENTE

29 años atrás:

El día era tranquilo en aquella escuela de Fort Worth, excepto para que aquel pequeño, llamado Brett, un chico de 19 años que transcurría los pasillos con la cabeza hacia el piso, él sabía que si la alzaba al menos un poco, iba a ser lastimado por el castaño fastidioso de Aidan, el que según era el más temido del lugar.

Brett casi nunca supo por qué aquel chico le hacía daño, sus comentarios denigrantes junto a los golpes, lo hacían sentir débil, ¿por qué le hacían daño? Es la pregunta que siempre rondaba por la cabeza de Brett, todos los días al llegar a su colegio, era un día que siempre lo encerraban en un baño a golpearlo, por estar débil y sin fuerzas, nunca pudo defenderse de sus agresores, los cuales estaban detrás de Aidan.

─ Eres un huérfano, una escoria que ni para sobrevivir sirve, ¿por qué crees que te abandonaron? ─ "porque murieron", la frase que siempre estuvo en la cabeza de Brett. Seguida de lágrimas por su cara que ardía por los golpes.

Lo único que le quedaba hacer, es aguantar, de cuando esos chicos lo golpeaban, para cuando llegara a casa, para así sanarse a sí mismo las heridas que les dejaban, ponerse hielo casi todos los días en los mismos lugares de siempre, frente, pómulo, mejilla, nariz y labio, no es tan fácil ocultarlos a los que fueron sus padres adoptivos.

Y así fue, días de abuso por parte de aquel castaño, poco a poco dentro de Brett algo se rompió, lo que fue su aura dulce, amable y frágil, se corrompió gracias a lo que le fue pasando.

6 MESES DESPUÉS:

─ ¿Estás seguro de lo que haces Brett? ¿Y si te atrapan? ─ era un riesgo que quería cometer, su necedad lo impulso a escaparse de la clase de Historia, sonrió cuando pasaba por los pasillos, yendo directamente a donde lo esperaba su chica, la que conoció en una de las tantas veces que lo lastimaron.

FLASHBACK:

Ese día estaba sentado en posición fetal en los vestidores, trataba de calmarse, por qué le vino un ataque de pánico por el dolor de tantos golpes, pero una voz suave lo sorprendió, que cuando ya había llegado a su lado, se percató de esos ojos mieles, un rostro angelical, sintió poco a poco estabilizar su respiración.

¿Quién eres? Llego a su mente, más no lo pudo entablar en voz alta, su garganta le ardía un poco, por los gritos de "Basta" cada que un golpe propinaba en su cuerpo, que ahora, al querer decir algo, le ardía, pero ella le sonrió y se propuso a limpiarle las heridas.

─ Se que, no nos conocemos, pero al escuchar tus sollozos a las afueras del vestidor, llamaron mi atención y al verte, me di cuenta de lo que había pasado, pero no te preocupes que yo no soy capaz de lastimarte, porque sé el dolor que deja en uno ─ Brett solo se quedó anonadado por la situación, nunca nadie se había preocupado por él.

─ Gracias... ─ en su hilo de voz, logro pronunciar ese simple agradecimiento.

─ No hay de que, además... yo creo que esas heridas se ven sexis ─ se rio un poco, pero el dolor que reinaba en su cuerpo, solo logro emitir un quejido. Ella solo se quedó con una sonrisa todo el rato.

FIN DEL FLASHBACK

Intento concentrarse en la realidad, por aquel recuerdo vago que rondaba por su cabeza, y siguió caminando hasta llegar a los mismos vestidores, al llegar capto en su campo de visión aquella melena castaña, sonrió al instante.

─ Laila Marks... ¿Me esperaste? ─ con un toque de dulzura y delicadeza, aquella chica sonrió, pero no se quedó ahí, camino hasta él y lo apretó a su cuerpo, Brett quedo sorprendido, pero luego su mente se nubló cuando sus labios impactaron contra los de ella, nunca espero esto, pero se dejó llevar tanto, que dejo parte de su corazón en el beso.