CAPÍTULO 5

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Te amo. – Le comento con una sonrisa, corrió hacia ella y sin perder tiempo la hizo girar por los aires. - ¡Te amo! ¡Te amo!

Basta Steve. – Gritaba entre risas la pelirroja, el la dejo sobre los suelos para después robarle un beso. – Te amo. – Susurro.

Ese día, en aquella tarde, la mas temible Viuda Negra le había contado al dichoso Capitán América que esperaban a su primer hijo, una persona que jamás lo habían visto venir, pero con solo saber de su existencia sus mundos cambiaron.

No sabes lo feliz que me haces. – Dijo acariciando con ternura su cabello, acto que a la pelirroja le hizo estremecer y soltar unas cuantas lagrimas reprimidas. - ¿Qué sucede? ¿Esta todo bien?

Si. – Se seco sus lágrimas. – Solo parece un sueño. – El entendió en ese momento y solo le abrazo de la misma forma en que siempre lo hacía. – No quiero despertar de este sueño, Steve.

Siempre voy a velar de tus sueños. – Afirmaba besando la cabellera de su amada.

Cuidaremos a nuestro bebé, yo lo juro. – Sentencio entre lágrimas. – Siempre que tu estes conmigo.

Y yo no te pienso dejar jamás. Seremos los mejores padres, cuidaremos de nuestro bebé con nuestras vidas, juntos. – Ella asintió.

Se quedaron así por un par de minutos, abrazados, acariciando con ternura el cuerpo de la otra persona, y fue ese silencio donde la rusa empezó a cuestionarse ¿Seguro que iba a ser buena madre? ¿Qué pasaría si su hijo corriera peligro? Y sin perder tiempo se respondió. Mataría a la persona quien le haga el más mínimo daño.

¿En que piensas? – Cuestiono el soldado haciendo que salga de sus pensamientos.

¿Cómo sabes que...

Frunces la frente y tu vista se nubla. – Ella sonrió, como la conocía. - ¿Bien?

Tengo miedo de lastimarlo, ¿Y si no soy buena madre? Me costo tanto abrirme contigo, tengo miedo de que me cierre y lastime a todo en mi entorno, no quiero hacerle eso a nuestro bebé. Si se enteran de su existencia, nuestros enemigos no dudarían en ir por el o hasta podrían usarlo en nuestra...

Nat. – La detuvo. – Tu serás la mejor y mas fuerte madre, no puedo imaginar a otra persona como madre de mi hija o hijo, eres fuerte, valiente, lista y muchas cosas más, sé que cuidaras de nuestro bebé de la forma en que te hubiera gustado que te cuidaran a ti, harás lo que sea para que el este en un entorno sano y crezca feliz. – Busco su mano y le dio un beso en sus nudillos. – Cuidaremos a nuestro bebé de nuestras propias pesadillas.

Nuestro. – El frunció el ceño. – Repites la palabra varias veces, como si no lo creyeras.

Tu también. – Afirmo, la volvió a abrazar permitiendo que ambos se reconforten.

Seremos padres, Romanoff. – Comento aun en el abrazo emergido, poso su nariz sobre su cuello y inhalo en aroma que desprendía en el cabello rojizo.

Seremos padres. – Susurro la ojiverde, dándole mimos en la espalda ancha de su amado.

¿Romanoff? – La voz de Clint le obligo a salir de sus recuerdos. - ¿Me estas escuchando?

¿Mm? Si, que encontraron. – Clint miro a Tony y este solo alzo los hombros. - ¿Qué?

Nada, hace una semana hubo un robo de información en una de las sedes antiguas de SHIELD, algunos dicen haber visto a un hombre robusto. – Informo mientras su compañero mostraba imágenes pixeladas del lugar.

EN BUSCA DE TI - CompletoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora