Capítulo 39 - El comienzo de un ocaso

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Quinta Avenida, Ciudad de Nueva Miranda, Estado Miranda, República de Venezuela

Día 24, Mes de Zoicius, Año 207

11:17:38

Después de haber introducido una fracción de la República de Venezuela a Persida El Cobless y seguido de otra breve conversación sobre el futuro del Imperio de Timese, Leonardo decidió llevar a Amelia de paseo por Nueva Miranda y mostrarle todo lo que la Gran Manzana tiene que ofrecer a todos aquellos que la visitan. Y que mejor lugar que empezar que la famosa Quinta Avenida en el centro de Manhattan, con sus apartamentos y tiendas de lujo que son complementados con los muchos museos que se encuentran a lo largo de la avenida.

Leonardo y Amelia estaban caminando por la acera que estaba del lado del parque urbano de Central Park luego de haber visitado el Museo Metropolitano de Arte de Nueva Miranda, el cual posee la mayor colección de obras de arte en la República de Ve...

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Leonardo y Amelia estaban caminando por la acera que estaba del lado del parque urbano de Central Park luego de haber visitado el Museo Metropolitano de Arte de Nueva Miranda, el cual posee la mayor colección de obras de arte en la República de Venezuela y que entre ellas figuran celebres artistas como Carlos Cruz-Diez, Alejandro Otero Rodriguez y Jesús Rafael Soto.

Desde su llegada, Amelia no ha podido ocultar el asombro que tenía desde el momento en que vio la ciudad de Nueva Miranda por primera vez y como algo de esta magnitud pudiese existir en primer lugar. Patacuci tenía sus lugares únicos que han sido la inspiración de muchas historias de fábula y leyendas a lo largo de los años, pero la República de Venezuela lo llevaba todo un paso más allá, y esta ciudad que parecía algo que ni siquiera las leyendas más fantásticas podían concebir.

-Se nota que Nueva Miranda te ha cautivado.

Dijo Leonardo a una Amelia que miraba ligeramente boquiabierta los múltiples edificios que estaban a lo largo de la avenida, luego se volteó hacia Leonardo al percatarse que de que estaba hablando con ella.

-¿Y acaso eso no es obvio? Nunca pensé que una ciudad como esta pudiese existir. Leí sobre Nueva Miranda en la Casa Blair y no me podía creer las fotografías de lo que ustedes llaman rascacielos y como ser perdían en el horizonte.

-¿Y ahora que estás aquí?

-Y ahora que estoy aquí... Bueno, digamos que este lugar es algo que no se asemeja absolutamente a nada que exista en Patacuci, ni siquiera en los cuentos de leyenda o mitos más fantásticos.

-Gracias por el cumplido, me alegra saber que Nueva Mirada es de tu agrado.

-También me llamó mucho la atención el hecho de que tenga el mismo nombre que Miranda.

-Sí, bueno, Miranda es un nombre común aquí y mucha gente lo usa también como apellido.

-Ya veo...

Respondió Amelia sin saber en realidad de que Nueva Miranda fue nombrada así en honor a Francisco Miranda, el precursor del movimiento de emancipación de Hispanoamérica y la Venezuela de la Tierra contra el imperio español.

Una nueva Venezuela en un mundo de fantasíaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora