Capítulo 10 - Lo que se viene en el horizonte

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Salón del Trono, Palacio Imperial, Gnadarkald, Condado de Gnario'ur, Imperio de Timese

Día 7, Mes de Zoicius, Año 207

11:11:06

-¡MALDICIÓN ¡MALDICIÓN ¡MALDICIÓN! ¡MALDICIOOON!

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-¡MALDICIÓN ¡MALDICIÓN ¡MALDICIÓN! ¡MALDICIOOON!

Retumbaban los gritos de furia de Gunderic El Cobless mientras apuñalaba a uno de los sirvientes con un cuchillo de un juego de vajilla.

El Emperador había recibido la noticia por parte de un mensajero de que la flota enviada a conquistar Olvia fue destruida por una inexplicable magia explosiva y era muy probable de que Geraldus Stolo y Duran Terrin hubiesen muerto.

Gunderic estaba extremadamente furioso, no solo había perdido 300 buques, si no que perdió a sus dos mejores oficiales del alto mando timesiano. Ahora estaba en una posición difícil, el Senado estaba sospechando que Gunderic tramaba algo cuando se enteraron de que envió 300 navíos de la Marina Imperial a alta mar, y que al mando de la flota iban el Almirante Terrin y el General Stolo. Si se llegaban a enterar de que Gunderic había perdido esos 300 buques y que Terrin y Stolo habían muerto, la facción anti-expansión podría amenazarlo con una moción de censura y removerlo del trono. Y esta vez ni las amenazas o sobornos podrían salvarle.

-Cómo es esto posible... ¡¿CÓMO ES QUE ESOS SALVAJES PUDIERON VENCER A LA MARINA Y MATAR A MIS DOS MEJORES GENERALES?!

Decía el Emperador mientras se alejaba del sirviente que había apuñado en el brazo derecho y ambas piernas, la razón por la que no lo apuñaló en la cabeza o el pecho hasta matarlo era por lo difícil que le resultaba a los otros sirvientes limpiar la sangre y porque su esposa se molestaba cuando mataba a los sirvientes durante sus ataques de furia.

-Ahora como voy a hacer para salir de este lío...los senadores no pasarán esto por alto sin importar las amenazas que puedan recibir...malditos salvajes... Esto no tenía que pasar...

Mientras Gunderic caminaba por todo el salón del trono tratando de pensar la manera de salvar su pellejo, las puertas del trono se abren y entra una persona que cabello negro y llevaba puesta una armadura del color azul oscuro junto con una capa negra. 

 

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