Justo cuando parece que nada puede ir peor siempre tiene que aparecer algo que arruine todo. Al menos así se sentía en ese momento con esa chica frente a él cargando a un bonito niño de no más de dos años.
—¿Que quieres que haga que?
—Que te encargues de él, no puedo más cuidando a un hijo que no quiero.— la chica sostuvo frente a él al pequeño que parecía inquieto ante su imagen, temiendo por la seguridad del niño lo cargo tomándolo con cuidado.
—¡¿Y por qué se te ocurre decirme años después?! ¡Pudimos hacer algo! Pude ayudarte con él.
—¡Fue tu idea acostarnos por mera diversión! Ya me hice cargo de él mucho tiempo es tu turno.— la chica dió la vuelta apunto de irse, grito desesperado, no sabía que hacer.
—¡Escucha! Es de ambos, no puedes dejarme solo con él.
—Adios Hoseok.— y la chica se fue.
Cuando ella salió de su vista el niño comenzó a llorar pateando con fuerza queriendo buscar a su mamá. Gritando apenas haciendo entendibles sus palabras.
—...Ma...— comenzó a gritar el pequeño.
—Shh... Lo siento tu mamá acaba de irse... Hey no llores.— Hoseok entrando en la misma desesperación que el pequeño comenzó a cargarlo con más fuerza y moverlo ligeramente para dormirlo, cosa que parecía funcionar debido al cansancio del niño.
Ahora no sabía que hacer, ella lo había citado en un parque cerca de su universidad y regresar a su casa parecía ser lejos su primera opción, no podía simplemente decirles a sus padres que ahora eran abuelos gracias a una estupidez que cometió ebrio.
Tampoco podía llevarlo con sus amigos, ni siquiera ellos sabían que se había acostado con una chica, fue una estúpida borrachera que cometió a los 17, incluso sus amigos sabían que era gay. Por Dios, ¿Quien hace bien las cosas en su adolescencia?
En una situación así no sabía que hacer, toda su vida se basó en siempre tener un plan, nada podía salirse de su lugar en su vida y un hijo sin duda era una grieta muy grande en su vida.
Miro al pequeño que estaba dormido, ahora que lo veía bien no tenía rasgos parecidos, su nariz era tal vez lo único en lo que se parecía a él. Ahora estaba acabado, no tenía otra opción más que ir a casa y contar lo sucedido.
—Bien Hoseok solo diles a tus padres que te acostaste con una chica estando ebrio y ahora tienes un hijo de dos años...— un silencio profundo apareció —¡No puedo hacerlo! Es lo más estúpido que pude escuchar, aún me quedan tres años de universidad, un hijo es lo más estúpido que pude hacer...— volvió a mirar al pequeño que tenía la respiración relajada, con su manga seco los restos de lágrimas en sus ojos y mejillas y suspiro. Tenía que hacerlo.
...
Una bofetada llegó a su rostro y un grito seguido de un llanto se escuchó en la casa. Su madre lo había golpeado y el pequeño estaba llorando buscando a su madre.
—¡Eres un gran imbécil, Hoseok! ¡¿Cómo pudiste hacer tantas estupideces tan joven?! Ya soportamos mucho con tu estúpida idea sobre tu sexualidad y ahora... Un hijo... ¡¿Acaso no piensas en tu futuro?!— su madre paso su mano por su pelo, su respiración agitada y su rostro algo rojo le daban la advertencia de siempre.
—No pensé con claridad las cosas, fue algo absurdo, se supone que no tenía que pasar esto.— una segunda bofetada llegó a su rostro.
—Jamas piensas bien las cosas, siempre fuiste un problema... Espero que tengas un plan para tu estupidez.— sus lágrimas amenazaban con salir.
—E-El niño podrá quedarse en mi habitación conmigo...
—¿Piensas quedarte aquí después de la vergüenza que nos has hecho pasar? Sería tan desvergonzado de tu parte hacer eso.— hablo su padre. Hoseok abrió un poco la boca sorprendido, no tenía que ser verdad.
—¿Q-Quieren que me vaya con él? Pero no tengo donde ir.
—Debiste pensarlo cuando embarazaste a esa mujer.
Levantó sus cejas sorprendido por eso, apretó un poco la mandíbula y miro al pequeño que seguía llorando, si, siempre era su culpa y esta vez fue idiota por pensar que sus padres le ayudarían en algo.
Camino hasta el pequeño y lo cargo tratando de calmarlo, limpio sus propias lágrimas y miro molesto a sus padres.
—Bien, no los necesito.— y solo con su teléfono en mano salió de su casa, preocupado por el niño que llevaba en brazos.
Intento calmar al pequeño, cargandolo de nuevo y cantándole un poco. Tomo con cuidado su teléfono y marco un número suplicando que la otra persona contestará. Después de dos pitidos la línea abrió.
—¿Que pasa? ¿Necesitas ayuda con tu examen?— la voz de su amigo le hizo sentir desesperación que no evitó comenzar a llorar caminando sin un rumbo fijo.
—N-Namjoon... Ayúdame por favor.— su voz entrecortada asusto a su mejor amigo quien preocupado pregunto su dirección y corto de inmediato la llamada llendo a buscarlo.
Espero por unos cinco minutos a su amigo, el chico llegó en su auto así que Hoseok se sintió más tranquilo poniendo cómodo al pequeño en los asientos traseros. Ambos iban a la casa del mayor, quería explicarle un poco mejor la situación.
...
—¿Cómo pueden hacer eso tus padres? Eres su hijo, lo que necesitas es apoyo de ellos no su abandono.— Kim palmeo suave el hombro de su amigo y suspiro mirando al niño dormido en su sofá. —Escucha, sabes que puedes quedarte aquí el tiempo que necesites, no me molesta en lo absoluto y sobre el niño... ¿Por qué no mencionaste esa chica?
—Fue una estupidez, ambos estábamos ebrios, apenas si lo recuerdo, fue mi primera vez y lo sugerí cómo broma...
—No importa, lo que importa es que ahora eres padre y tienes como responsabilidad a un pequeño de dos años así que será mejor que busquemos ayuda para saber cómo cuidarlo.— el mayor pensó un poco y luego sonrió. —Le pediré ayuda a Ryul, ella seguro sabrá que hacer, una vez menciono algo se ser niñera de un niño.
Kim tomo su teléfono y marco el número de su novia esperando que contestará, mientras Hoseok se calmaba y miraba a su mejor amigo con alivio.
—Gracias Nam.
—Somos mejores amigos, además, no podía dejar a mi nuevo sobrino fuera.— una sonrisa aún más grande apareció en ambos rostros.
________________________________________________
Adivinen quién acaba de iniciar otra historia teniendo pendientes cuatro... Lo siento, prometo actualizar seguido todas.
Espero les guste esta.
-J⁷
ESTÁS LEYENDO
¡No podemos ser tres! [JungHope]
Roman d'amourHoseok cometió la estupidez de su vida o al menos eso piensa al tener un hijo de dos años a la edad de 19. Su familia se alejo y no piensa apoyarlo en nada pero eso no fue impedimento para valerse por si mismo, pero los problemas nunca faltan. JungK...