Dos días pasaron desde los hechos en la sala común, días en los que el rubio cenizo no había superado el tema a pesar de que por fuera lucía tan imperturbable como siempre.
Mina, Denki y Ejirou intentaron retomar el tema acerca del amor en más de una ocasión pero en todas ellas alguno de ellos terminaba esquivando una explosión, por lo que, resignados, habían dejado de insistir, pero no de pensar en ello. Mientras que Sero se mantuvo al margen pero igual analizaba cada detalle desde la distancia.
Así que sí, sin que Katsuki ni nadie lo esperara, Sero fue el único que parecía darse una idea de lo que pasaba; para ser precisos, había deducido que el zagal de ojos rojos había escuchado los pensamientos románticos de alguien, y también, su inteligencia de adulto joven le daba para interpretar que esos pensamientos románticos estaban dirigidos a él, de lo contrario no se preocuparía en preguntar la definición de un concepto tan abstracto y subjetivo como el amor.
Lo había sospechado, claro, por lo que ahora la pregunta que se hacía el chico de quirk de cinta era ¿Quién era ese alguien de la clase que estaba interesado en su amigo explosivo? Es decir, desde el primer momento podía descartar a varias personas, como por ejemplo Uraraka, ella parecía estar más interesada en personalidades menos toscas, por lo que Bakugou sería su última opción; también descartó a su mejor amiga Mina, era obvio que ella no estaría interesada en el líder de su pequeño grupo; por no mencionar que Tsuyu y Momo también quedaban fuera de la lista, dejando las posibilidades reducidas a dos chicas más, pero ninguna de ellas parecía tener el más mínimo interés romántico en su amigo.
Todos los descartes reducían la cantidad de chicas candidatas a estar enamoradas de su malhumorado amigo a cero, y dejaba, por el contrario, con la amplia opción de que en realidad esa persona interesada ni siquiera se tratase de una chica; sí, esos mismos tres días en el que el pelicenizo estuvo bajo los efectos del quirk su clase había convivido con la clase B, pero le parecía poco probable que alguien de la clase contraria hubiera puesto el ojo en el muchacho que tan mala imagen le había dado a su grupo.
Sero jamás se imaginaría que el primer chico en el que pensó como candidato y que enseguida descartó por pensar que parecía más interesado en la chica gravedad cero, era realmente la respuesta a sus preguntas.
En cuanto a Katsuki, había llegado a la odiosa conclusión de que necesitaba confirmarse a sí mismo que lo que había escuchado era algo cierto, y para eso tendría que humillarse y buscar al menor de los Todoroki. Había llegado a esa conclusión dado que a pesar de no haber tenido mayor contacto con el pecoso durante el fin de semana, del fondo de su memoria no podía borrar esas miradas que le dedico al hablar de amor. Esas imágenes estaban ahí, reproduciéndose como una película tan brillante que resultaba molesta.
Sí, sabía que probablemente interrogar al heterocromático complicaría las cosas que de por sí sabía que no podían ser falsas, pero estaba estresado de más con el tema, es decir, estaba en un punto en el que comenzaba a dejarle sin otra cosa en la que pensar en todo el maldito día.
Así que aprovechando que el muchacho de cabello bicolor caminaba tranquilamente por los pasillos de la compañía de su padre con una lata de soda de naranja en mano, el rubio tiro de él con fuerza y le llevó consigo a un pasillo menos concurrido.
—Casi tiras mi soda.—señaló el bicolor sin inmutarse demasiado al haber sido arrastrado—¿Se puede saber ahora que pasa?
—Escucha, mitad y mitad bastardo, hay una jodida duda que me está comiendo la maldita cabeza desde hace un par de días y tú eres el único que puede solucionarlo.
—¿Duda has dicho? ¿Cómo esperas qué yo conteste tus dudas?
—Maldición, tiene que ver con Deku.
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Invasión Mental || Katsudeku
FanfictionY es que Katsuki podría enlistar todas y cada una de las cosas en las que era bueno, podría recitar en voz alta sus virtudes y habilidades, así como reconocer a regañadientes sus defectos. Tenía una cantidad enorme de cosas en las que, él considerab...