MUNDO IRREAL

Capitulo 10: "El despertar"

Ya lo había decidido, me cueste o no, voy a intentar hacer lo mejor y acabar con el de una vez por todas. No podía permitir que esto siga como esta. El constantemente se burlaba de mi, de nosotros. tenia que ponerle fin a todo esto, por Sharon, el rey, Eliot y mi familia.

Cerré el cajón acomodando cada cosa en su lugar y salí del cuarto,fui a mi habitación y tome un baño, quería que mi cuerpo se relajara, y pensar.

Llene la bañera de agua, me metí dentro y comencé a pensar en ¿como iba a hacer esto? ¿como iba a aprender a usar mis poderes? no podía negar esto, por mas ilógico que sonara como reencarnación de Sharon tenia poderes, me gustase o no, quisiera creerlo o no. Ya tenia que adaptarme a que nada en mi vida era normal, me duela o no, esa era la verdad.

Tenia que comenzar a organizar mis pensamientos, investigar y buscar el modo de despertar todo lo que hay en mi pero tenia el leve presentimiento que para poder hacerlo tenia que recordar todo sobre Sharon, y a la vez evitar que ella tome control en mi. Esa era otra de mis dudas, ¿ella podría llegar a tomar el control en mi cuerpo? eso es lo que mas me preocupa, llegar a perder el control. No es solo ella, si no el demonio que ella tenia dentro, su poder para manipular la magia negra, y también su parte vampiro. Cuando pensaba en ello tenia miedo de mi misma, me miraba en el espejo y todo mi ser se llenaba de impotencia e incredibilidad, yo no poseía la apariencia física ni mental para llevar a cabo todo eso. mi contextura física era normal, me veía devil, una persona que no posee nada fuera de lo normal. Pero muy en el fondo sabia que todos esos poderes y ese demonio están durmiendo en lo mas profundo de mi ser.

Tome mi celular y revise la hora, era hora de cenar así que mi madre seguro iba a venir a llamarme, tome una toalla y me cubrí.Me puse una camisa a cuadros azul, un suéter negro y un jean, con unos borceguís negros, recogí mi pelo en un moño azul y me mire en el espejo ya estaba lista.

Cuando me dispuse a bajar para cenar y comencé a ver todo negro hasta que ya no pude distinguir nada mas y caí a la profunda oscuridad que con sus brazos me sostenían en la lenta caída.

Me desperté por que sentía que mis manos se encontraban presionadas con algo, mis ojos me pesaban demasiado, mis piernas dolían, y sentía mucho olor a fango, agua y humedad intente levantarme pero mi cabeza choco contra algo. Esto me obligo a abrir los ojos y lo que vi me hacia querer cerrarlos.

Estaba encerrada en una jaula, era pequeña apenas tenia espacio para arrodillarme, los barrotes de acero desprendían una tenue luz brillante, algo en mi decía que era algún tipo de hechizo, mis manos se encontraban atadas al suelo con un par de grilletes y mis piernas encadenadas.

Mire hacia todos lados y me encontraba sola, el pánico comenzó a apoderarse de mi e instantáneamente comencé a querer sacarme esos grilletes de mis manos, pero mientras mas tiraba mas me dolía, la desesperación que sentía era enorme y mi pecho subía y bajaba a un ritmo descontrolado, mis latidos retumbaban en mi interior, lo hacían con violencia, eso solo me dejaba una solución salir de ahí.

Volví a observar todo, mas detalladamente y me vi en un enorme espejo que se encontraba frente a esa jala, pero lo que vi me sorprendió, por que no era yo, estaba dentro de Sharon, me encontraba en uno de sus recuerdos.

Sentí el golpe de la puerta e instintivamente cerré mis ojos, pero cuando los abrí ya no estaba dentro de ella, me encontraba parada frente al espejo, observando todo desde otro panorama, pero el miedo que sentía era mucho peor.

Mire hacia la puerta y vi que alguien entro, su aura se me hacia conocida pero no recordaba haberlo visto nunca. Su presencia puso en alerta todos mis sentidos, mis bellos se erizaron, sentí que toda mi piel fue cubierta por una fina capa de escarcha, todo mi ser se paralizo. Pero no fue por mucho, sharon comenzó a hablar.

-¿otra vez cambiando de apariencia Abaek?-dijo mirándolo a los ojos, en su mirada no se hallaba una pizca de miedo, pero su cuerpo delataba que si lo sentía.

-¿ya te das cuenta cuando soy yo y cuando no?-pregunto entre risas.

-es imposible no oler su esencia y sentirme asqueada.-contesto la muchacha.

- eso no lo dijiste ayer cuando me viste transformado en tu padre- contesto el demonio.- fue música para mis oídos cuando te escuchaba rogarle que te sacara de aquí- iba diciendo mientras se acercaba paso a paso hacia donde estaba ella.- ¿lo recuerdas verdad o quieres que te lo recuerde?- pregunto poniendo su cara cerca de la de ella.

-eres una mierda Abaek, juro que cuando salga de aquí, los matare a todos ustedes.- contesto con rabia en su mirada.

El demonio comenzó a reírse y sus carcajadas daban mucho miedo, era algo inexplicable, metió su mano por los barrotes y la tomo del cabello acercándola a centímetros de su cara y le dijo:

-no tientes a la suerte pedazo de escoria, estas viva por el único motivo de que quiero hacerte sufrir y bañarme en tu sangre y en la de todos tus seres queridos. Voy a disfrutar escucharlos pedir misericordia por sus miserables vidas y créeme, vas a ver a todos a cada uno de ellos morir de la peor manera.

-eres una mierda-contesto la muchacha-cuando pueda hacer que ella despierte voy a matarte.

-ella, es tan débil que no puede hacer nada contra un simple hechizo del nivel de un demonio de ultimo rango.-contesto este entre risas.

-todos sabemos que no es así, comenzaste todo por que temes de ella.-y comenzó a susurrar palabras irreconocibles para mi, el idioma no era latín ni nada, era el idioma del demonio que tenia dentro

En estos momentos, solo tenia una duda y era de quien hablaban, pero ahí me di cuenta era del demonio que teníamos dentro Sharon y yo. Cuando llegue a esa conclusión volví a sentir lo mismo que la noche en la que abaek me encontró y el demonio llamado beck me salvo.

Mi piel comenzó a lastimarse y marcas tomaron paso por todo mi cuerpo, el dolor era inhumano sangre comenzó a caerme por todas las marcas, su color era negro. Mientras Sharon mas fuerte pronunciaba las palabras en ese idioma, mas fuerte se volvía el dolor, mas insoportable era para mi tratar de sobrellevarlo. Caí al piso de rodillas, puse mis manos en mi cabeza y sentía que alguien gritaba, sus gritos eran horribles, desgarradores, me rompía por dentro, se sincronizaban con una risa demoníaca que inundaba mis sentidos.

Era cada vez mas insoportable aguantarlo, Sharon ya gritaba en ese idioma hasta que comenzó a reírse de una forma horrible, se la veía perdida.

Pero en ese momento yo deje de sentir dolor, pero sentía que dentro mio había alguien que susurraba cosas inaudibles, mire mi cuerpo y ya no tenia mas sangre pero las marcas permanecían en mi cuerpo como delicados tatuajes. Mi pelo estaba mucho mas largo, mis uñas también habían aumentado su tamaño y sentía que ese alguien que estaba dentro de mi cuerpo iba tomando el control lentamente de mi.

La voz que oía dentro mio, se hacia cada vez mas clara.

Hasta que lo escuche, era el demonio de Sharon, ya había despertado y se encontraba dentro mio.

La risa de Sharon hizo que girara a mirarla y cuando lo hice sus ojos se encontraron con los míos, me sonrió y lo miro a Abaek mientras le decía:

-Ella ya despertó abaek, y confió plenamente en que ella podrá matarte.

El demonio comenzó a mirar hacia todos lados, la tomo del pelo y comenzó a pegarle. Cuando Sharon iba a perder la conciencia se detuvo, mirándola con asco.

-Ellas tendrán que temer, yo ya las encontré.

Lentamente abaek comenzó a girar su cabeza hasta que sus ojos se toparon con los míos y largo una macabra risa.

Luego de oírla comencé a ver borroso, y me desmalle dentro de su recuerdo,pero sabia que nada volvería a ser lo mismo, ella ya había despertado, yo ya no era la misma.