Capítulo 46: El fondo para perros

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Hacía mucho tiempo que Xin Qianyu no regresaba a la antigua casa de la familia Xin.

La mayoría de las personas obsesionadas con el poder y la posición también tenían un fuerte sentido del ritual, y el anciano no era una excepción. La vieja mansión era un símbolo de su autoridad, el equivalente al palacio de un emperador, y sólo él podía vivir allí por supuesto, los sirvientes también estaban permitidos, pero no eran realmente humanos en su mente.

Después de que sus hijos se casaron, todos se mudaron de la casa y sus nietos tampoco vivían allí.

De vez en cuando, el anciano decía que echaba de menos a alguno de sus hijos, así que les dejaba venir y quedarse un par de días, lo que era un gran honor y una señal de su preferencia por alguno de sus vástagos.

A lo largo de los años, el tío Xin y Xin Mu mantuvieron una competición secreta entre Xin Qianyu y Xin Simu sobre quién era más querido por el anciano, y quién podía quedarse en la vieja casa más noches y comer más.

Xin Qianyu también se había visto atrapado en medio de esta "competición por el favor", intentando por todos los medios aparecer e interpretar el papel del joven nieto que era más de su agrado.

Y con Xin Simu paso lo mismo.

El anciano en realidad tenia bastantes nietos, e incluso sus primos, que estaban a una generación de distancia de él, mostraban amor y afecto comportándose bien y actuando suficientemente inteligentes. Así que la competencia por ser el "nieto favorito" era feroz.

La familia y las ramas secundarias hacían todo lo posible por ganarse el favor, y a menudo era una batalla entre adultos y niños, muy parecida a una batalla judicial.

Los ganadores finales fueron Xin Simu y Xin Qianyu, que eran los que más favores habían recibido de su abuelo, pero no se conformaron con ello y luchaban desesperadamente por ser los únicos herederos, creando así una situación de enfrentamiento.

Sin embargo, ahora que Xin Qianyu había crecido y madurado, miraba hacia atrás y sentía lástima por la forma en que luchó por su favor.

Probablemente, a los ojos del anciano, lo que vio no fueron hijos y nietos a su alrededor, sino un perro feroz que arrebataba carne.

Lo que el viejo disfrutaba no era la alegría de la familia, sino que los jóvenes lo adularan, competían y arrebatan a los que le rodeaba.

En cuanto a quién seria la autoridad final, era posible que ya haya tomado una decisión en su corazón, pero nunca se lo dijo a nadie, solo quería darles esperanza a todos y ver a todos en conflicto.

Cuanto más luche la gente, más estable será.

Al pensar en eso, una mirada de burla pasó por el rostro de Xin Qianyu, pero desapareció tan rápido como el viento había pasado.

Los sirvientes de la vieja mansión saludaron a Xin Qianyu y Xin Mu cuando entraron en la casa, diciendo: —"Todos están esperando a la Señora y al joven maestro"—

Tras escuchar la palabra "todos", Xin Qianyu preguntó: —"¿Quién más está dentro?"—

—"El Señor y la señorita Simu están aquí"— El sirviente respondió.

—"Oh"— Xin Qianyu asintió: —"¿El tío Xin y Xin Simu están aquí?"—

Xin Qianyu creía que esto también era un truco de la mente del anciano.

Solo quería que Xin Simu viniera y lo mordiera y que el tío Xin viniera y mordiera a Xin Mu.

De hecho, el tío Xin estaba completamente bajo el control del anciano, y pensó que estaba influyendo en el anciano, pero él era solo un perro que el anciano dejó que mordiera.

Taza Cubierta de Agua (novela)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora