Please, look at me ~sakuatsu +18

~Especial 3~

Kiyoomi dio un último empujón profundo antes de sacarlo de su boca, la saliva corría por las comisuras de sus labios que aún estaban rojos e hinchados.

Quitó el preservativo con un gesto hábil y comenzó a mover sus manos con maestría absorbiendo cada uno de los hermoso sonidos que soltaba el hombre frente a él, sin quitarle la mirada de encima se centró especialmente en la punta de su miembro hasta que sintió el líquido bajar contra su pecho desnudo, mientras lo demás quedaba en sus dedos.

-Creo que te enseñé muy bien...-soltó Atsumu luchando por recuperar el aliento, Kiyoomi se arrastró por la cama hasta quedar a su lado y respiró profundamente luego de toser un par de veces para aclarar su garganta.

-¿Te gustó? ¿Seguro lo hice bien?-preguntó pegándose más al costado del rubio.

-Sí cariño, fue estupendo, lamento no hacer lo mismo por ti...

-Está bien, ya lo hablamos, no lo hago para obtener algo a cambio, lo hago porque me gusta.

-Déjame limpiarte, Omi.

Atsumu sonrió besando la mejilla del más alto cuando asintió, se inclinó a tomar toallitas húmedas de su mesita de noche, limpió el amplio pecho de Kiyoomi, también parte de su cuello y sus manos, una vez limpio se volvió a acomodar para acercarlo más a su cuerpo.

Ambos se estaban quedando dormidos cuando a la mente de Atsumu volvió la idea que había tenido por la tarde.

-Omi...-susurró sintiendo un apretón en su cintura.

-mmmm-fue lo único que pudo responder Kiyoomi, mucho más dormido que despierto.

-Despierta-susurró nuevamente.

-mmmm-se volvió a quejar, esta vez pegándose más a la espalda de Atsumu.

-Si despiertas te doy un beso.

-Dos y es un trato...

-Uno y eres la cuchara pequeña.

-Tienes mi atención, pero duermo sobre ti.

Atsumu de dio la vuelta para quedar cara a cara con su novio en la oscuridad de la noche, este volvió a acomodar su mano en la cintura del rubio acariciando con su pulgar.

-Estaba pensando y con todo lo de los entrenamientos, no hemos tenido mucho tiempo...

-¿A dónde quieres llegar?

-¿Te gustaría... tener una cita? Sé que es tonto, ya llevamos mucho tiempo juntos y vivimos en el mismo departamento, pero...

Atsumu se detuvo en seco al sentir a Kiyoomi pegarse a su cuerpo con brazos y piernas aferrándose a él.

Kiyoomi enterró su rostro en el cálido cuello del rubio y sonrió ahí restregando su nariz como un gato.

-Te amo-soltó el más alto acomodándose lo suficiente para relajar todo su cuerpo sobre el de Atsumu.

-Lo tomaré como un sí-rió Atsumu acariciando el cabello de Kiyoomi con una mano mientras la otra acariciaba su cintura y espalda.

-Día, hora y lugar, me vestiré bonito para ti.

Atsumu lo apretó en un abrazo amoroso y se dispuso a dormir bajo su calidez, no tardó en sentir a Kiyoomi nivelar su respiración indicando que estaba dormido. Él por su parte se dio un momento para pensar, realmente esto le estaba pasando, realmente se sentía amado, realmente compartía su vida con alguien que lo valoraba, realmente se sentía seguro, no solo de Kiyoomi, también de él mismo, claro que no todos los días se sentía un dios inalcanzable, pero su novio lo hacía sentir que podía tener el mundo en sus manos.