Tuve la osadía de amarte sin disfraces, me liberé de ti así tal cual fuí libre de mostrarte quien era. Leíste cada fragmento de mi vida, palafraciaste cada segundo de mi miedo y sentiste cada erizada de mi piel, tuviste todo de mí, y sentiste orgullo de ello, espero que ahora, en este tiempo tan eufemista te atrevas a probar un poco de mi realidad y que de la misma manera, el corazón roto y las lágrimas saladas que marcaste en mi se hagan parte de ti.El orgullo volverá...
No siempre se gana en el dolor.
No siempre te libras de llevar la cicatriz.
No siempre sales ileso del amor.
Felicidades, te has ganado un corazón roto.
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¿Y nuestro arcoiris después de la lluvia?
De TodoIampj, a mis dieciséis aprendí el valor de mis letras. El significado de que cada paso, por mínimo que sea, es extraordinario.