BRUJAS

Prólogo

Años atrás.

La familia Hill corría por el bosque para llegar a su casa, detrás de ellos solo se veía fuego y gritos.

Personas con antorchas los seguían.

Los vestidos de las chicas se enganchaban en las ramas de los árboles, los chicos corrían y las tiraban rasgando sus vestidos.

Más gritos, el fuego se acercaba a ellos.

La casa se veía a metros, solo un poco más de fuerza.

La chica de vestido rojo se paro, los demás la miraron.

-Corran, yo me encargo.-dijo con frialdad.

-Ana...-dijo una chica de rizos dorados.

-Ve. Ya.-ordeno Anastasia.

La chica de rizos dorados corrió.

Anastasia se dio vuelta y enfrento a la muchedumbre.

-Bruja.-dijo un hombre.

Anastasia gritó y agito su mano hacía él, este se comenzó a ponerse morado y cayo hecho ceniza.

Anastasia corrió.

Llego a la casa y salieron con sus escobas.

Los gritos y una gran fogata solo se escuchaban y veía del cielo.

La familia Hill dejo Salem para no volver.

-¿Abuela?-dijo una niña pequeña de ojos verdes.

-¿Sí?-dijo la señora.

-¿Por qué esa familia tiene tu apellido?-pregunto la pequeña.

-Veras Etna, no es solo mi apellido, recuerda que también es el tuyo.-dijo tocándole cariñosamente la nariz-. Es una historia vieja de la familia, quizás algún día te pueda contar más sobre esto. Pero tu madre y padre no deben saber por ahora.

-No les contaré abuela.-dijo con una sonrisa.

-Te tengo un pequeño presente.-dijo la señora sacando una cajita de su bolsillo-. Este collar ha pasado de generación en generación. Es protección, Etna, y es muy valioso para nosotros, porque es de familia. Quiero que lo guardes y lo uses más adelante cuando tú te sientas lista. ¿Sí?

-Sí abuela. Lo cuidaré mucho.-dijo mirando el collar de oro y rubí.

-Es hora de dormir, que descanses pequeña.

-Tu también abuela.