Junghope_🌻MI NECESIDAD🌻

🌻14🌻

Yoongi analizaba cada movimiento del alfa desde el sillón.

Después de la tremenda golpiza que recibió y en la que estuvo apunto de morir asesinado por Jungkook, Taehyung estaba recuperándose.

Jungkook le rompió una costilla y por mas merecido que lo tenga el omega no podía dejarlo solo. Yoongi se a estado haciendo cargo del malhumorado alfa.
Incluso comenzó a pensar que Kim Taehyung es jodidamente atractivo y quizás, posiblemente le gustaba.

Lo malo era que sus sentimientos no son completamente correspondidos, se han dado besos impulsivos y se acostaron en el celo del alfa. Sin embargo Taehyung estaba reacio aceptar que le gustaba Yoongi.

A veces se sentía usado, quizás era el karma de las cosas terribles que hizo para separar a Jungkook de Hoseok. Un maldito y molesto karma.

Este tiempo le sirvió para pensar que Jungkook en realidad era una obsesión suya y que detestaba a Hoseok a lo idiota.

Estuvo apuntó de romper a esa bella familia y ahora estaba aquí clavado hasta el cuello de un alfa gruñón que tampoco lo quiere.

Taehyung quería enserio a Hoseok.

Los sentimientos de ambos alfas por el pequeño y adorable omega eran muy fuertes, aunque Jungkook ganaba por muchísimo más.

Ambos alfas querían a Hoseok.

Envidiaba a Hoseok y por más que quisiera odiarlo no puede. El omega era alguien simplemente fascinante, su comportamiento dulce y alegre, e incluso su aroma maternal que desprendía a pesar de ser menor que él le daba paz.

Hoseok olía a protección, olía a bebé y a mamá al mismo tiempo, cálido, reconfortante y mágico. Yoongi puede asegurar que Hoseok a pesar de ser cinco años más chico, el omega lo trataba como un hijo.

Quizás su amistad con Jungkook no era la misma y pelearan por la atención del omega menor todo el tiempo, pero Jungkook siempre lo trata como si fuese su padre.

Yoongi puede considerar a la pareja esos padres que nunca tuvo. La diferencia entre él y Hoseok es que sus papás estaban mas ocupados en su vida de ricos que en prestarle atención a su cachorro.

Admiraba de verdad los grandiosos padres que resultó ser la pareja, Hoseok se niega a dedicarse a otra cosa que no sea su cachorro y la casa, aunque hace poco Jungkook le ofreció abrirle su invernadero, para que tenga dinero propio y desarrolle su talento en el jardín, incluso le ofreció hacerle su estudio de arte y danza.

El omega por ahora no deseaba ninguna de esas cosas y le pidió a Jungkook que no se preocupara, que él estaba bien dedicándose a su familia.

Jungkook aceptó, como alfa, padre y esposo se a encargado de enamorar a su omega todos los días de su vida.

Yoongi de verdad los admiraba.

¿Por qué debería odiar a alguien que ilumina a todo el que lo rodee?

Hoseok no merece odio. Merece todo lo bueno del mundo.
Incluso ser amado por dos alfas.

—¿Qué piensas?—. Yoongi enrojeció por completo.

Cuando al fin pudo salir de sus pensamientos y lo primero que vio es el rostro de Taehyung casi chocar con el suyo.

El alfa le miraba con una ceja levantada y apoyaba su cuerpo en la mesita de sala.

Parecía inexpresivo, pero Yoongi podía leer fácilmente la curiosidad que lo envolvía de querer saber lo que piensa.

Sonrió nervioso, llevando uno de sus mechones rizados detrás de su oreja en un gesto avergonzado.

Taehyung pensó que Min Yoongi es hermoso y aunque quiso decirlo, no lo hizo.

Se sintió mal al imaginarse a Hoseok haciendo aquello. Kim sabía que compararlos estaba jodidamente mal, Hoseok y Yoongi son omegas diferentes.

Cada uno tiene su propia maravilla, y probablemente aunque se sienta confundido con sus sentimientos por ambos, Hoseok es quien lleva la delantera por mucho.

Alguien como Hoseok no es fácil de olvidar. Si no pudo hacerlo cuando Jungkook lo hizo su omega, se casaron y tuvieron un hijo, ahora con Yoongi dudaba hacerlo.

Dañar al hermoso omega de sonrisa muestra encías no estaba en sus planes.
No al menos de esa mamera tan cruel, por eso y aunque su cuerpo lo estuviese pidiendo, no podía desnudarlo y hacerle el amor ahora mismo.

Primero tenia que aprender a superar amores que no le corresponden para poder amar a quien lo hace.

Le regalo una sonrisa débil, acaricio las delgadas mejillas del menor y pego su frente a la contraria.

Ambos cerraron los ojos disfrutando el cálido contacto.

—Eres hermoso Min—. Susurró de forma suave.

El omega volvió a sonrojarse sin abrir los ojos.

—Me gustaría pertenecerte—.Beso su frente—Pero ahora no puedo, primero tengo que dejar ir a Hoseok y después aprender a amarte—. Yoongi trago el sollozo que amenazaba con salir de sus labios.

Amar no es algo que se deba aprender,
es algo que nace sin darse cuenta y te hace latir el corazón de una manera única.

Apretó los ojos con fuerza para evitar las lágrimas. Hoseok. Hoseok. Hoseok. Hoseok.

Siempre Hoseok. Pensó con amargura.

"No puedo odiarte Hoseok"

"No podría hacerlo aunque quisiera"

Yoongi simplemente era incapaz de culparlos por enamorarse de ese ser, Hoseok es perfecto, incluso ante sus propios ojos.

—Lo siento—. Se disculpó el alfa.

Sabiendo que no volvería a verlo, sabiendo que Yoongi había sido nuevamente dañado, había sido nuevamente rechazado.

—No te disculpes alfa—. Sollozo débilmente.

Taehyung abrió los ojos topándose con los del omega cubiertos de lágrimas.

Un punzón en su pecho.

—Tengo que irme Taehyung. Fue un placer conocerte y espero que aprendas a dejar ir y amar nuevamente—. El omega se alejó del alfa, levantándose y tomando su bolso para salir corriendo de ahí.

Se sentía asfixiado.

Necesitaba aire.

Necesitaba sanar.

Taehyung no lo detuvo y tampoco espero que lo haga, pero corrió, olvidando su auto y perdiéndose entre las oscuras noches al único lugar que podía considerar un hogar y con las personas que él consideraba familia.

Necesitaba el aroma maternal de Hoseok, las risas dulces de Minnie y peleas pequeñas con Jungkook.

Dejando atrás a un destruido Taehyung, que sentía haber perdido su último aliento cuando Yoongi se fue.