Este es el capítulo anterior que me faltó una parte al final, ahora si que está completo :)
Con un rotulador tacho la foto del hombre que fuimos a buscar hoy ya que cuando llegamos a su casa estaba muerto, aparentemente se había suicidado, pero podía estar amañado para que creyese eso cuando fuese a por él.
Esto solo me demuestra que vamos en buen camino, alguien teme que llegue hacia él y trata de eliminar todos los cabos sueltos que ha dejado. Debo volver a la caseta para interrogar a los hombres y ver qué más puedo conseguir.
Veo los papeles que me dio Alessandro con lo que necesita para la enfermería en el escritorio y los cojo para salir del despacho. Los ojeo mientras camino y me encuentro con Gio en el pasillo.
- ¡Regina! - dice sonriente y elevo una ceja sin entender su alegría, estamos dejando que se burlen de nuestro sistema de seguridad y el feliz- Necesito tu ayuda
-Espera, tengo que hablar con Alessandro- le digo, pero él me agarra de la mano y tira de mi hacia el otro lado del pasillo- ¿Quieres otro agujero de bala Giovanni? - pregunto zafándome de su agarre
-No gracias, me llegan los que tengo- dice y me lleva a la caseta donde están retenidos los que entraron ayer- Creo que, si les presionamos más, contarán todo- dice y ruedo los ojos
-A la tarde lo haré ahora tengo que hablar con Alessandro para que encarguen esto- le digo y el mira los papeles para quitármelos- Che ti prende Giovanni? – inquiero enfadada
( Che ti prende Giovanni?, ¿Qué te pasa Giovanni?)
-Yo haré esto por ti, te traeré a Toni para que te ayude con lo que necesites- dice y se marcha antes de que pueda decir nada.
Suspiro y me llevo las manos al pelo para recogerlo en un moño alto, entro en una habitación donde está uno de ellos encerrado. Tiene el rostro lleno de sangre y su torso está lleno de moratones producto de los golpes que le di.
- ¿Tienes familia? - le pregunto y el asiente con la mirada fija en el suelo- ¿Hijos?
-Una niña de mes y medio- susurra y al comenzar a recordarla se rompe en llanto.
-Puedo darte pasaportes falsos, una nueva identidad y un piso franco lejos de aquí- le digo y él me mira ilusionado- Donde nadie te encontrará, solo si me dices todos los nombres de los que te pagaron.
Suspira y mira al suelo, él fue quién me dio la identidad del hombre que fui a buscar hoy. Si ya ha hablado, volverá a hacerlo.
-No conozco los nombres de todos, pero sí puedo decirte donde nos veíamos para que nos diese la información de tu hogar- dice y asiento cruzándome de brazos.
-Comienza a hablar
-Nos reuníamos en un bar de mala muerte del centro, L'Antica, había dos hombres uno se llamaba Carlo él nos nombró todo lo que hay que pasar hasta llegar a tu puerta. Nos aconsejó que atacáramos cuando los guardas hacían el cambio de turnos, debíamos de llegar a la puerta con un coche reforzado para poder traspasar la valla –dice y aprieto los puños enfadada
- ¿Dijo algún apellido?
-Si era algo como De Marco- dice y gruño enfadada
En ese momento Toni entra a la habitación y le ordeno traer las fotos de los miembros del consejo.
- ¿Cómo era el otro?
-Era joven, de unos veinte años, pelirrojo- dice y doy un golpe en la mesa cada vez más enfadada.
Toni regresa y le muestra las fotos, reconoce a Carlo De marco y al hijo de Sorrentino, Alphonso. Salimos de la habitación y entro en otra dejando a Toni en fuera.
Veo a otro de los intrusos y le doy un puñetazo en la nariz provocando que esta comience a sangrar. No pienso en lo que hago, mis golpes son mecánicos, en mi mente se repite la escena de los dos traidores.
La historia se repite y pretenden quitarme el poder, creen que pueden ganar, pero no lo conseguirán. Mi respiración está acelerada y dejo de golpearlo cuando veo que se ha desmayado del dolor o quizás está muerto.
Miro mis nudillos en carne viva y salgo de la habitación viendo a Toni mirarme preocupado, paso de largo y me encierro en el despacho a conseguir más hombres, armas y más personas que hacen droga.
Tocan la puerta y cuando hablo para que pasen veo a Alessandro con todos sus instrumentos para la revisión.
-Buenos días Bianca- me sonríe y yo suspiro pasándome las manos por la cara agotada de leer tantos documentos.
-Acabemos rápido- le digo y el asiente comenzando con las preguntas.
Poco después finaliza y me da la pastilla para que la tome, me la trago y el saca un sobre de su bolsillo.
-Toni me dijo que te lo diera- me dice y asiento cogiéndolo.
Lo abro y cuando leo su contenido sé que estoy jodida, mañana hay una cena benéfica en el teatro. Acudirán grandes celebridades y un par de mafiosos como yo que solo vamos para aparentar. Hay que llevar pareja, Toni me dijo que no iría y Gio debe encargarse del encargo con Luca.
- ¿Buenas noticias? - pregunta Alessandro y suspiro negando con la cabeza dejando la invitación con el resto de los papeles.
-Hay una especie de gala benéfica mañana a la que hay que acudir acompañada y no tengo con quien ir- le explico cruzándome de brazos- Dile a Toni que les llame y diga que estoy enferma o algo así, a ellos lo que les interesa es el dinero- digo y el coge la invitación
-Si quieres te puedo acompañar yo- se ofrece y frunzo el ceño mirándolo
- ¿Qué quieres a cambio?
-Nada...-contesta extrañado –Deberías dar una vuelta, quizá nos lo pasamos bien- se encoge de hombros y lo miro aún descolocada.
- ¿Enserio haces esto porque sí? - le vuelvo a preguntar sin estar segura de lo que me ha dicho
-Claro- dice y asiento con la cabeza.
Se marcha de la habitación y me quedo pensando, es la primera vez en mi vida que alguien hace algo por mi sin pedirme nada a cambio. Después de un par de horas consigo más hombres y varias personas que me suministrarán la droga a partir de ahora.
Cierro con llave el despacho y bajo por las escaleras viendo a Toni, Gio y Alessandro jugando a las cartas en el salón.
-Me encanta como trabajáis –les digo y Alessandro al escucharme suelta las cartas lanzándolas al suelo nervioso
-Yo...ya me iba a casa- tartamudea y asiento
-Mañana puedes cogerte el día libre, a las ocho te recogeré en tu casa para ir a la cena- le digo y asiente
-Yo también quiero el día libre- dice Gio haciendo un puchero del que Toni se ríe
-Tienes encargo con Luca – le digo y gruñe cruzándose de brazos
Alessandro comienza a caminar hacia el garaje, pero me hace una seña para que me acerque, frunzo el ceño, pero camino hacia él.
- ¿Debemos ir combinados? - pregunta y ruedo los ojos
-No es el baile de fin de curso, Alessandro.
-Qué lástima, ya sabía que tocado regalarte para que llevaras en la muñeca- sonríe divertido y lo miro antes de girarme y sonreír de lado.
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La regina della mafia (U.C.C #1)
ActionDe la bilogía; Una cura criminal. La regina della mafia. Una mujer con un único objetivo en su vida, gobernar la mafia más poderosa del mundo. Se tropieza...