Reviso que mi coleta esté perfecta y me miro al espejo, una camiseta blanca de tirantes sencilla con unos pantalones de cuero negros y unos tacones negros. Perfecta.
Salgo de mi habitación y enciendo un cigarro bajando las escaleras, veo a Gio acompañado de Toni desayunando en la cocina. Le doy una calada a mi cigarro expulsando el humo mientras cojo una botella de agua de la nevera.
- ¿A dónde vamos hoy? - me pregunta Gio bostezando.
-Al hospital- digo dándole un trago a la botella y Antoni me mira confundido.
- ¿Te has vuelto loca? - me pregunta y ruedo los ojos.
- ¿Por qué vamos allí? - pregunta Gio y yo busco en los cajones algo para el dolor de cabeza.
-¿Qué se toma cuando te duele la cabeza?- les pregunto viendo varias cajas de pastillas para el dolor.
-Ibuprofeno- escucho y me giro viendo a Alessandro entrar a la cocina- Y yo iré ahora al hospital para hablar con Fran, supongo que Bianca quiere verlo.
-Hasta que lo vea no me lo creo- contesto tragándome la pastilla.
- ¿Sabes Bianca? No creo que deberías adelantar tu vejez- dice Alessandro y ruedo los ojos sabiendo por donde va.
- ¿Qué dices tío? - le pregunta Gio frunciendo el ceño.
-Fumar daña la piel, los fumadores consiguen arrugas muy profundas a parte que son muy propensos a perder pelo porque la nicotina constriñe los capilares que nutren la piel.
- ¿Cómo? - pregunta Gio escandalizado tocándose la cara.
-Sí y también aumenta la frecuencia cardíaca y sube la presión arterial. Los fumadores pueden padecer una enfermedad coronaria, una enfermedad vascular periférica o sufrir un aneurisma. - le dice Alessandro y Antoni se ríe al ver a Gio llevarse dos dedos al cuello.
-Se acabó la clase de medicina, vámonos. - digo y pongo el cigarro entre los labios para ir al pasillo y abro uno de los armarios llenos de armas.
Cojo mis dos Berettas y una navaja, me pongo mi chaqueta de cuero y abro el cajón donde están las llaves de todos los coches.
-No creo que haga falta eso- dice Alessandro viendo a Toni y Gio guardando sus armas.
-Siempre hacen falta- dice Antoni sonriendo de lado.
Cojo las llaves del Bentley y le doy a Gio y a Toni las de dos Range Rover, vamos al garaje y yo abro mi coche.
-¿Con quién voy?- pregunta el médico y sonrío de lado apoyándome en la puerta del conductor.
-Con quién quieras amore- digo haciendo reír a Toni.
Me subo al coche y saco de la guantera mis gafas de sol, enciendo el coche justo cuando Alessandro se sube. Se pone el cinturón y lamo mis labios tratando de que esa sonrisa victoriosa no salga a flote.
Gio sale el primero y acelero llegando en pocos minutos al hospital, bajo del coche y veo a Alessandro pasarse las manos por los pantalones varias veces.
-¿Nervioso?- le pregunto viendo a Gio y a Toni acercarse a nosotros.
-Por cómo pueda reaccionar.
-Para eso vine amore- le digo sonriendo de lado.
Entramos al hospital y seguimos a Alessandro hasta una sala donde se asoma y comprueba que ella está sola.
-Bien, esperadme aquí- dice y Gio lo mira divertido.
-No pienso esperar aquí cuando puedo ver todo el espectáculo en primera fila.
- ¿Cómo?
-Tú la pones de espaldas y nosotros controlamos desde aquí- digo y palmeo su hombro antes de empujarlo a la sala.
Veo como suspira antes de acercarse a ella, cuando lo ve sonríe y trata de abrazarlo, pero el la detiene.
- ¿Todo bien Ale? - le pregunta confundida.
-Escucha Francesca, creo que ha llegado el momento de avanzar como personas porque hay veces que para crecer tanto personal, como mentalmente, tenemos que dejar atrás algunas cosas y creo que nuestra relación ha llegado a un punto final.
- ¡Sí! Un punto final en nuestra relación de novios para comenzar con nuestro matrimonio y ahora que estoy embarazada podremos...
- ¿Cómo? - le pregunta mientras la mira fijamente.
-Sí... De la última vez que estuvimos juntos, ¿recuerdas el batido que te preparé?
-No me acuerdo de nada de esa noche Francesca- dice negando con la cabeza alejándose de ella.
-Deja de hacer el tonto, claro que te acuerdas- le dice tratando de tocarlo, pero él se aleja mirándola dolido.
-Yo no puedo tener hijos Francesca- susurra y ella lo mira confundida- Me hice la vasectomía hace años.
Jadeo al escucharlo y ella niega con la cabeza sonriendo.
-Deja de decir tonterías, ¿de quién estaría embarazada sino?
-Asumo que con el que me engañaste ¿no?
- ¡Es imposible! Te metí tranquilizantes como para tumbar a un elefante, aproveché que estabas dormido y usé tu semen para hacer la inseminación- dice y agarro una de las Berettas de mi cintura.
-Aquí no Bianca- farfulla Toni y elevo una ceja.
-Aquí sí Antoni.
-Se acabó Francesca, hoy mismo recogeré mis cosas de tu piso- dice y ella lo agarra del brazo comenzando a llorar.
-No me hagas esto Alessandro.
-Yo siempre te traté bien Francesca, aunque supongo que me lo merezco- susurra mirándome en la puerta.
Ella se gira y me ve en la puerta, frunce el ceño, pero cuando camino hacia ellos parece acordarse de mí.
- ¿Qué hace ella aquí Alessandro? - le pregunta y el solo niega con la cabeza mirándola decepcionado acercándose a mí.
-Sono venuto a ridere di te- digo mirándola fijamente
(Sono venuto a ridere di te ,He venido a reírme de ti)
- ¡Alessandro explícate ahora mismo! - le grita tratando de ir detrás de él pero saco mi arma dirigiendo el cañón a su cabeza.
-Acércate solo un centímetro más a él y te vuelo los sesos- digo y ella me mira asustada mientras Alessandro suspira a mi espalda.
-Déjala Bianca, solo quiero irme de aquí- me dice y aprieto con fuerza la mandíbula deseando apretar el gatillo para hacerla sufrir más de lo que acaba de herirlo a él.
-Dale las gracias, porque es él quien te está salvando la vida- digo guardando la pistola. - Andiamo amore
Salimos de ahí y subimos al coche, arranco y llegamos a la mansión después de un viaje sumergidos en un silencio que me revolvía las entrañas sin saber cómo está.
- ¿Todo bien?
-No mucho, no asimilo que la mujer con la que llevo varios años de mi vida me haya drogado para tratar de quedarse embarazada aun sabiendo que no quiero niños en mi vida.
-No te sientas culpable de nada, es lo peor que puedes hacerte a ti mismo y si quieres un culpable para poder superarlo cúlpame a mí- digo y él me mira fijamente- No te mereces sufrir por las decisiones erróneas de las personas.
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La regina della mafia (U.C.C #1)
ActionDe la bilogía; Una cura criminal. La regina della mafia. Una mujer con un único objetivo en su vida, gobernar la mafia más poderosa del mundo. Se tropieza...