Ya sabes, lo típico, como cuando terminas un juego, y no conforme con los resultados finales vuelves a iniciarlo para tratar de no cometer los mismo errores.
Pero esta vez, la copa de la reencarnación no tenía el poder suficiente como para tener el...
Ya iban a ser las 6:10 de la tarde aproximadamente, y algunas personas ya estaban regresando a sus hogares. Mayormente estudiantes, ya que habían terminado sus clases.
Podemos ver a Jin-Ah ingresando al apartamento donde vivían. Se extrañó un poco al no ver a nadie en el lugar. En la sala no había nadie, la cocina estaba vacía, y en el baño tampoco había una sola persona.
Ella creyó que cuando llegara se encontraría a su hermano viendo tele o algo por el estilo, pero ese no era el caso al parecer.
Hablando del rey de Roma. Escuchó un ruido proveniente del cuarto de él, así que se acercó y tocó la puerta para no entrar así por así.
Jin-Ah: Oppa, ¿Eres tú?
Espero unos segundos pero no recibió respuesta, así que decidió revisar un poco.
Jin-Ah: Bien, voy a entrar.- Abriendo la puerta del cuarto.-
Cuando metió la cabeza para observar que había, se topó con algo gracioso.
El cuarto estaba con las luces apagadas, había ropa de entrenamiento toda rota regada por el cuarto, y había un bulto acostado en la cama.
Era Jin-Woo, había regresado después de que cumplió con el tiempo requerido en la zona de castigo. Nada más llegar solo comió un pedazo de pizza que había en la cocina, y luego entró a su cuarto, se quitó la ropa que cargaba consigo, se puso otra camisa, y literalmente se dejó caer en la cama. No quería saber nada de nada, ni de nadie.
Durante el tiempo que estuvo en la zona de castigo se encargó de asesinar a todos los ciempiés que había en el lugar, gracias a eso logró subir otros dos niveles ya que habían bastantes; también se puso a jugar un poco con la habilidad Sed de sangre. Mientras esperaba, se volvió a comprar la Mata Caballeros, y cuando vio que aún faltaba 1 hora para que terminara el tiempo, decidió meditar un rato ya que no le quedaba más que hacer.
Continuando con lo anterior, nada más tocó su cama se acomodo en una posición extraña, pero que era cómoda para él, y ha estado durmiendo hasta este momento.
Jin-Woo: ZZZzzzz....- Sonidos de ronquido barato -.
Jin-Ah: Jaja... Parece que ayer quedó exhausto y ha estado durmiendo. Mejor lo dejo, no quiero que se despierte malhumorado.- Sacando su cabeza de la habitación e hiendo a su cuarto a cambiarse.-
Y así, pasaron 20 minutos más o menos hasta que Jin-Woo finalmente despertó.
Salió de su cuarto y se dirigió al baño para asearse un poco. Cuando terminó, se dirigió a la sala de estar donde se encontró a Jin-Ah recostada en el sofá viendo su teléfono.
