La reunión había estado muy tranquila dentro de lo que cabe, pues con cuatro niños pequeños era difícil que hubiera absoluta tranquilidad. La pequeña Jeon seguía siendo la novedad y todos querían traerla en brazos cada cierto tiempo, aunque la mayoría de veces siempre estaba con Namjoon o Jungkook. Taehyung aún no terminaba de procesar que sus amigos se irían pronto, pero no podía decir más o tratar de convencerlos de que se quedasen, claro estaba que ellos tenían sus planes desde mucho antes de conocerse. Lo único que podían hacer era disfrutarse el poco tiempo que les quedaba juntos.
Pasada la media noche, los niños ya estaban dormidos en la habitación de JoonHyun, que era lo suficientemente grande para que todos estuvieran ahí, además con el nuevo monitor para la bebé los adultos podían ver desde el patio cualquier cosa que pasara en la habitación mientras ellos bebían un par de cervezas. Esta vez Jimin no pensaba ponerse como en el cumpleaños de YongMin, suficiente tenía con la vergüenza que se hizo pasar él mismo con Min Yoongi aquel día. Y hablando del empresario, después de recibir solo un saludo de parte de la pareja, se había mantenido en silencio y se sentía tan fuera de lugar que no sabía porque aún estaba en ese lugar. Además de que su estado de ánimo caía con cada segundo que pasaba y fingir sonrisas cada que sus amigos lo miraban se estaba volviendo insoportable, sabiendo que no estaba en el foco de nadie tomó una cerveza y entró a la casa, necesitaba el baño, echarse un poco de agua en la cara le serviría para revivir un poco y así poder manejar de regreso a su casa. Era tarde y él tenía trabajo al día siguiente, además sabía que a la reunión no le quedaba mucho. Tomándose toda la botella de un trago -la primera y única de la noche- la dejó al lado del lavamanos y se miró al espejo, no veía al magnífico empresario Min Yoongi, no veía al señor reconocido en Japón por ser uno de los mejores inversionistas, no veía al dueño de Min's Company, solo veía a un hombre triste, un hombre incapaz de luchar por algo que quería y algo que le pedía el corazón, solo era aquel tío, aquel amigo, ni siquiera era ahora aquel hermano y mucho menos sería aquel amor. Y dolía, dolía como si pisara miles de brazas ardiendo.
Abrió el grifo del agua y mojó sus manos mirándolas, ni siquiera sentía fuerzas, era como si después de recibir la noticia de que se irían su batería fue bajando poco a poco hasta agotarse y solo quedaba un hombre lamentable. Ahuecó las manos y se mojó el rostro ahogando un sonido de sorpresa cuando la puerta fue abierta de golpe y cuando se giró tenía a Park Jimin de frente, igual o más sorprendido que él.
—Señor Min. —Su voz salió ahogada y es que el baño de invitados era muy pequeño, sus cuerpos apenas eran separados por un paso. —No sabía que estaba aquí, yo venía a... a... —Guardó silencio deteniéndose a mirar al mayor. —¿Está bien?
Yoongi bajó el rostro y asintió, pasando saliva e intentando que el nudo en su garganta se fuera con ello, pero no se iba, no se iba y él ya no se sentía capaz de retener su tristeza.
—Yo ya me iba, con permiso. —Habló bajito.
—Nosotros ya nos despedimos de los demás, no sabíamos que seguía aquí. —Yoongi se abstuvo de decir en voz alta lo que había pensado porque claro, como se iba a dar cuenta que seguía ahí si ni una mirada le habían dirigido, porque no importaba, no era relevante para ellos. —Hoseok me espera para ya irnos.
—Entiendo, saldré ahora. —Jimin lo miró suspirando una mueca. —¿Te vas a quitar de la puerta o no?
—Yo... sí. Solo que... —Jimin estaba muy nervioso, ya no iban a volver a ver al señor Min y él deseaba tanto una cosa, una cosa que estaba mal.
Yoongi dió el paso que los separaba para tomar el pomo de la puerta, pero esa no había sido una buena idea porque Park se había sentido acorralado por aquel cuerpo y nunca lo había tenido tan cerca, olvidaba la última vez que un hombre le había hecho sentir el mismo deseo que sentía por Hoseok, aquel deseo que le hizo tomar el rostro del empresario para cubrir sus labios en el beso más necesitado por otro hombre que no fuera su novio. Cerró sus ojos pegándose al cuerpo contrario para no ser rechazado, pero Min jamás podría hacer eso, porque había añorado tomar esos labios con ganas, las mismas ganas con las que le estaba comiendo la boca a Park en ese momento. La mano que se encontraba en el pomo de la puerta tomó al menor de la curva de su cadera y lo pegó contra la madera de la puerta, con la respiración pesada y apenas con la boca separaba Jimin habló.
—Amo a mi novio.
—Y yo también. —Le respondió el mayor sin dudarlo aún besándole los labios.
—¿Qué? —Jimin se separó confundido pero unos golpes en la puerta lo hicieron saltar de susto.
—¿Amor, ya terminaste? Taehyung y Seokjin ya se fueron, solo Jungkook nos espera para acompañarnos a la salida.
—Voy. —Jimin murmuró limpiándose los labios sin mirar a Yoongi. —¡Voy! —Habló más fuerte empujando el cuerpo del mayor lejos de él. —Quédese aquí y no salga, no quiero que él piense que hicimos algo malo.
—¿Y fue así? Eso no se sintió como algo malo.
—Adiós, señor Min.
Jimin salió apresurado y suspirando aliviado cuando no vio a su novio Justo fuera de la puerta, sino unos metros más allá con Jungkook. Hoseok lo tomó de la cintura y besó su frente con cariño.
—Ahora si nos vamos, gracias por todo hoy. Los vamos a extrañar. —Jung hizo un puchero y Jungkook solo río caminando con ellos a la salida, cuando los tres se estaban abrazando en despedida Yoongi pasó por su lado saliendo de la casa. —Creí que ya se había ido.
—Yo también. —Respondió Jungkook con el ceño fruncido. —Bueno, ahora si los dejo. Les deseo buen viaje.
Se despidió cerrando la puerta de la casa y la pareja caminó calle abajo tomados de la mano, eso hasta que en la esquina se encontraron con el mayor.
—¿Puedo hablar con ustedes? —Pidió mirando las manos juntas de ambos.
—Señor Min, fue un gusto conocerlo y a nosotros no nos queda más que decirle "adiós". —Habló Hoseok con una leve sonrisa. —Y nada más.
—Pero es sobre otra cosa. —Está vez miró a Jimin y Hoseok tiró de sus manos juntas.
—Es tarde y nosotros nos vamos. —Camino unos cuantos pasos pero Jimin se detuvo y miró al mayor. —Jimin no quiero hablar con él, ya no me cae bien.
—Él no nos hizo nada. —Yoongi no podía escucharlos, estaban lejos de donde él se había quedado estático.
—Hizo que nos peleáramos y eso es suficiente, vámonos.
Y Jimin cedió, su mano picando para extendérsela a Min Yoongi a unos metros atrás de ellos, para invitarlo a tomarla, pero solo pudo hacer un puño a su costado siguiendo los pasos de su novio. Y esa noche cuando Hoseok besó sus labios no pudo más que largarse a llorar, excusándose con la despedida. Sin poder decirle que estaba besando la misma boca que había besado Min Yoongi.
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Momento para recordarles que les quiero mucho, pero que a veces toca hacernos sufrir ☹️
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AuPair || JinTae • Namkook [Part. 2]
FanfictionSegunda parte de AuPair porque Wattpad ya no me dejó seguir las actualizaciones en el otro apartado 😒 Funemos a Wattpad