AuPair || JinTae • Namkook [Part. 2]

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Cuando la puerta del departamento se abrió, Taehyung se asomó de inmediato desde la cocina donde había estado picando fruta para los niños. Y se sorprendió bastante al ver llegar a Seokjin, pues ya tenía varios días que no llegaba a casa directamente del trabajo.

—Llegas temprano hoy, Jinnie. —No iba a ocultar que estaba feliz y después de limpiar sus manos rápidamente fue a su encuentro ayudando al mayor a quitar su saco.

—Gracias, mi amor. —Seokjin agradeció comenzando a desabrochar su camisa de botones. —La verdad es que solo paso a cambiarme, Yoongi quiere salir a un bar y con Namjoon prometimos cuidarlo por si se pasa con las copas.

Eso le había bajado el ánimo un poco, pero solo un poquito. Porque en primer lugar él le había dicho al mayor que podía estar con su amigo sin preocuparse y no se iba a contradecir él mismo, pero le extrañaba en casa compartiendo tiempo de calidad con los niños.

—Entiendo. —Le sonrió para caminar de regreso a la cocina. Aunque unas manos grandes y unos brazos fuertes se lo impidieron.

—Pero ven aquí, cariño. —Seokjin lo había atrapado por la espalda y ahora inhalaba escondido en la mata del cabello castaño del AuPair. —Hoy será el último día que pase con Yoongi, creo que poco a poco se siente bien y ya no nos necesita tanto. —Su mano acarició el abdomen plano de su novio en muestra de cariño puro. —Así que regresaré por la noche. Te extraño mucho, los extraño mucho.

El menor sonrió soltando un suspiro enseguida, la calidez y los brazos de Seokjin siempre eran su lugar seguro, por eso se permitió recargarse en el cuerpo contrario mientras caminaban lentamente a la cocina, así, abrazados y felices.

—Estaba picando fruta porque los niños despertarán pronto de su siesta. —Explicó tomando una uva para ponerla en la boca del empresario quien aceptó gustoso.

—Entonces subiré a arreglarme para estar listo y pasar un rato con ellos antes de irme ¿Vale?

—Me parece perfecto. —Taehyung asintió dando un beso casto en los labios del mayor que tenían un poco del jugo de la fruta y eso le hizo lamerse los propios cuando se separó.

—¿Tu sabes lo sexy que puedes llegar a ser sin ni siquiera intentarlo? —Preguntó el mayor bastante descolocado y es que sus ojos no se habían perdido el espectáculo, si pudiera regresaría el momento una y otra vez, en cámara lenta para mayor satisfacción.

—No digas esas cosas. —Taehyung se sonrojó mirando a otro lado, quisiera saber qué día dejaría de ponerse nervioso frente a los cumplidos del mayor.

—Si no fuera porque tengo prisa...

—Solo cállate y ve a ponerte guapo, anda. —Taehyung lo empujó fuera de la cocina.

—Lo haré, lo haré. —Cedió el mayor subiendo las escaleras abriendo su playera en el camino. —Pero para tu información soy guapo todo el tiempo.

Y Taehyung regresó a la cocina con una gran sonrisa, su novio sí que era guapo, el más guapo de todo el mundo si se le permitía decirlo. Guapo, guapo, guapo y muy caliente, mucho, demasiado.